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La
organización de Naciones Unidas desde su creación en 1945 en San Francisco,
California buscó ante todo, concertar y unificar un organismo supraestatal que
regulara e hiciera especial vigilancia en temas de toda índole a través de
diferentes órganos que van desde el consejo de seguridad o el económico y
social, por ejemplo, hasta la conformación de la Corte Internacional de
Justicia, la cual resuelve por medio de sentencia las disputas que le sometan
los Estados y emitir dictámenes u opiniones consultivas para dar respuesta a
cualquier cuestión jurídica que le sea planteada por la Asamblea General o el
Consejo de Seguridad.
Es
claro que la ONU, que reemplazó a la Sociedad de Naciones fundada en 1919,
posterior a la primera guerra mundial, ya que dicha organización había fallado
en su propósito de evitar otro conflicto internacional, buscó ante todo evitar la
barbarie de las dos guerras mundiales vividas de forma consecutiva en pleno
siglo XX y por eso es que hasta el día de hoy cuenta con 193 países, soberanos
reconocidos internacionalmente, son contados los países que no están en la
misma, entre los que se cuentan por ejemplo aquellos que no son reconocidos a
nivel internacional (ejemplo: Taiwan) y colonias (ejemplo: Puerto Rico, Aruba,
Curazao), entre otros países que hasta el momento no son reconocidos por ésta
organización.
Si
bien, la ONU desde su formación ha tratado de fomentar la unión entre pueblos y
ha buscado diversas formas y mecanismos para un mejor progreso y desarrollo de
los países en vía de desarrollo y lograr que entre estos y las potencias se
establezcan no relaciones de subordinación sino antes por el contrario de
armonía y colaboración para mejores índices como el de pobreza, educación,
salubridad, economía, entre otros.
Sin
embargo, a pesar de los aparentes logros cometidos por ésta, para muchos se ha
constituido en el centro de frustración y mentiras y el reflejo de lo que hoy
es el mundo actual, crisis económica, países orientales en graves conflictos
internos por dictaduras de mas de 30 y 40 años, subordinación e intereses entre
países (potencias vs países subdesarrollados) y Latinoamérica, en la que el
pueblo a través de sus gobiernos refleja el descontento y el rechazo a la clase
política tradicional, casos como los grupos armados en Colombia por mas de 50 años, las protestas
en Chile con relación a la educación, los procesos dictatoriales y
totalitaristas que se están llevando a cabo en Venezuela, Ecuador, Bolivia y
Nicaragua, la guerra contra el narcotráfico en México y la poca proyección de Argentina como futura potencia, al estar en el selecto grupo del G20, entre otros casos específicos
de los países latinoamericanos, son el fiel reflejo de lo que hoy es América Latina y sus focos
de problematización a nivel interno y tal vez regional, casos que, para muchos,
son exclusivamente intrínsecos y no tiene porque intervenir organizaciones
supraestatales, pero es claro que el factor desestabilización y la búsqueda de
un mejor porvenir de forma unida, requiere el apoyo y la salvaguardia de la
organización mas importante del mundo y su sostenibilidad y fortalecimiento a través
del tiempo.
