Cerrar Menú Blogs
Las opiniones de los blogueros son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
Profile image

Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Seguir este blog

En algún momento tuve mucha información por digerir, un deber más que imperativo de aceptación, una expansión en mi capacidad de reflexión, de percepción. Una revolución en mi cabeza y un corazón tremendamente vulnerable pero decidido. Esos estados traducían mi duelo, el duelo principal. El más duro, el más largo.

Los hijos son el amor y el dolor más profundo. Existe un antes y un después de ellos. Y ese después, claramente, es la mejor versión de nosotros como seres humanos. Independientemente de la historia que nos toque vivir.

Clínicamente hablando, el diagnóstico de mi hijo abarca cientos de factores que entiendo, manejo y experimento a diario. Pero eso deja de ser importante, incluso de existir, cuando el enfoque se vuelca en lo esencial.

En la practica lo esencial sería hablar de la intervención temprana e integral. De la importancia de prestarle todas las herramientas y los escenarios ideales al niño para su evolución. Esto, sin duda alguna, es indiscutible y casi obligatorio. Pero, trascendentalmente, está la tarea de enrutarse a través del amor. No hay nada que ese poder no traspase, no supere, no alivie, no sane. No hay nada que la vida misma no recompense más que pensar, actuar, y hablar a través del amor.

Bajo esa óptica, nosotros como familia decidimos no definir nuestra experiencia como un camino difícil,  para nosotros es una experiencia distinta, única, otra forma extraordinaria de vivir, de sentir. A pesar de esto, a lo largo del camino se presentan pequeños duelos secundarios, unos livianos y rápidos, otros más complejos, pero que deben ser superados en los primeros cinco minutos de empezar a sentirse.

Porque ese pequeño duelo empodera al miedo y el miedo paraliza más que una condición física. Y aunque es bueno sentirlo, llorarlo y gritarlo: es un deber parársele de frente.

No es sencillo, pero ese sentimiento no está diseñado para inmovilizarnos, está hecho para activarnos, para superarnos. Una y mil veces, y de cualquier manera.

Le pedimos a Dios no sanar la condición de nuestro hijo, sino en medio de su condición mantenerlo sano. Es un pedido con una connotación distinta, es un pedido con agradecimiento implícito, con aceptación. Agradecemos a la vida por tenerlo, a Dios por escogernos. Ya el milagro está hecho.

Tenemos fe, pero nuestra fe es realista, no es quimérica. De ese modo no existe frustración, solo esperanza en el camino de seguir como estamos: felices.

Su papá y yo lo amamos por quien es, adoramos cada cosa que lo define. No lo imaginamos distinto, jamás hemos deseado que sea distinto, y en eso consiste la aceptación enrutada por el amor. Es clara, se lleva con orgullo y con cojones.

Nuestras fuerzas seguirán concentradas en su felicidad. Ese es nuestro compromiso de vida, cada día y de por vida.

(Visited 731 times, 1 visits today)
PERFIL
Profile image

Soy Érika Llamosa Durán, estudié Artes y me tiré la tesis. Trabajé en periodismo, moda y publicidad. Ningún trabajo fue tan importante como ser mamá.

Más posts de este Blog

  • Cultura

    Ritmo

    El ritmo desvergonzado de la existencia, que continúa en asenso y se salvaguarda inmune. Inmune ante la expiración de(...)

  • Bogotá

    Fragmentos sobre exclusión.

    Inclusión... la tentativa de la sociedad por acercarse a ese compromiso aún transcurre a través de aproximaciones tremendamente mediocres,(...)

  • Bogotá

    Encontrarse

    Todo se trata de encuentros. Pero qué importante es perderse para genuinamente encontrarse; con versiones superiores de nosotros mismos,(...)

  • amorpropio

    Decreto

    Me reconozco vulnerable, me acepto rota, me abro a mi dolor, lo manifiesto y lo transformo en energía viva,(...)

Ver más

Lo más leído en Blogs

1

Quizás eres como yo, de esos que siente que marchar es(...)

2

La continuación del artículo que escribí hace un tiempo sobre la(...)

3

La innovación tecnológica está desempeñando un papel fundamental en la transformación(...)

0 Comentarios
Ingresa aquí para que puedas comentar este post
Reglamento de comentarios

ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en este espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y la tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:

  1. Promuevan mensajes tipo spam.
  2. El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de situación de discapacidad.
  3. Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
  4. Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.

Además, tenga en cuenta que:

  • - El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Aceptar
¿Encontraste un error?

Para EL TIEMPO las observaciones sobre su contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.


Debes escribir el comentario
¡Gracias! Tu comentario ha sido guardado
Tu calificación ha sido registrada
Tu participación ya fue registrada
Haz tu reporte
Cerrar
Debes escribir tu reporte
Tu reporte ha sido enviado con éxito
Debes ser usuario registrado para poder reportar este comentario. Cerrar