Me pasa algo particular y es que no me apetece un ceviche si no estoy frente al mar. Muchas veces haciendo mercado en alguno de los grandes almacenes de Bogotá ofrecen ese producto y hasta me parece desagradable. Pero apenas me bajo del avión, carro o flota y llego a una ciudad costera hago clic y de repente me dan unas ganas inmensas de comer camarón con salsa picante y galletas de soda. Pues bien, hace unos años caminando por la bahía cerca de la estación de policía vi un tumulto de gente y como buen rolo chismoso me acerqué a ver de qué se trataba. Me encontré con el puesto callejero de ceviche más delicioso del mundo: se llama “Donde Juancho” y jamás me ha caído mal comer de sus productos. Se encuentran ubicados en la carrera 1 No 22-33 y sus precios oscilan entre ocho mil y quince mil pesos el vaso más caro. Siempre que voy a Santa Marta no dejo de pasar por donde Juancho.
Como pueden ver la bella Santa Marta ofrece muchas cosas que a mí me dan tranquilidad, me traen paz y yo trato de ir cada vez que puedo porque es como visitar la tumba de mi madre quien también se sentía muy a gusto en esta ciudad. Visiten la bahía más tranquila de América, quedarán encantados.
https://www.youtube.com/watch?v=pZf7oe8HgLY No soy muy de seguir en redes a los llamados "influenciadores", jóvenes en redes sociales como Tik Tok(...)
bonita ciudad. las playas muy sucias colmadas de ambulantes..las calles llenas de aguas de caño. y en este viaje ibamos 15 personas para ingresar a la quinta de san pedro COSTOSISIMOOOOO el ingreso mejor una fotico y chao. definitivamente no sabemos cuidar al turista solo que venga una vez y que no vuelva. lastima rico clima
Qué buen artículo, pués hace dos días regrese de Santa Marta, mí hijo me regalo este hermoso paseo, igual siempre me ha gustado ir allí, pero lamentablemente la bahía de Santa Marta ya no es, ahora solo hay un muelle para los yates de los ricos y poderosos de este país y de algunos extranjeros, no hay playa se la comierón los yates y donde llegan los grandes barcos. Taganga era lo máximo, ahora no se puede ni andar por sus playas, entonces la opción es irse a playa grande. El Rodadero ya no es tan Rodadero, casi qué ni se puede disfrutar, y según me conto un samario piensan privatizar algunas playas. Qué cosa, como si las playas tuvieran dueños y el mar también.
La verdad que mi experiencia no ha sido agradable, el centro histórico no es ningún centro historico, creo que lo unico es la catedral, el resto son locales de comidas con sillas utilizando el espacio publico, campanas de cocina sobre la calle, grafitis y lo mejor pillamos a una pareja haciendo el amor delante d ela gente y la policia no aparecio por ningun lado, la venta de droga ni se diga y los gamines y habitants de la calle pidiendo plata es desesperante. Taganga esta llena de extramnjeros entre ellos israelies que se han adueñado de ella prostitucion, droga y se roban los cerros sin que la autoridad haga nada incluso estan haciendo una carretera sin permisos. la verdad esto es el principio de mi experiencia. pronto seguire con mas anecdotas
Gracias, por describir este paraíso, realmente a mucha gente le gusta esta tierra y también desearian vivir una vejez apacible. Tiene muchos sitios bonitos y agradables, ha crecido bastante en los últimos años y le están invirtiendo en carreteras haciendo más fácil su acceso desde el interior del país, lo que ha contribuido a su despegue como la carretera del Sol, con doble calzada y la zona industrial ya no es solo El Rodadero, sino, Playa Salguero, y la zona turística en que están construyendo centros residenciales, hoteleros, etc, progreso asegurado, pero que traerá mucha gente. Naci en Bogotá, crecí en Barranquilla, estudie en Cartagena, pero creo que siempre viviré en Santa Marta. Nuevamente gracias por el artículo.
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bonita ciudad. las playas muy sucias colmadas de ambulantes..las calles llenas de aguas de caño. y en este viaje ibamos 15 personas para ingresar a la quinta de san pedro COSTOSISIMOOOOO el ingreso mejor una fotico y chao. definitivamente no sabemos cuidar al turista solo que venga una vez y que no vuelva. lastima rico clima
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Qué buen artículo, pués hace dos días regrese de Santa Marta, mí hijo me regalo este hermoso paseo, igual siempre me ha gustado ir allí, pero lamentablemente la bahía de Santa Marta ya no es, ahora solo hay un muelle para los yates de los ricos y poderosos de este país y de algunos extranjeros, no hay playa se la comierón los yates y donde llegan los grandes barcos. Taganga era lo máximo, ahora no se puede ni andar por sus playas, entonces la opción es irse a playa grande. El Rodadero ya no es tan Rodadero, casi qué ni se puede disfrutar, y según me conto un samario piensan privatizar algunas playas. Qué cosa, como si las playas tuvieran dueños y el mar también.
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La verdad que mi experiencia no ha sido agradable, el centro histórico no es ningún centro historico, creo que lo unico es la catedral, el resto son locales de comidas con sillas utilizando el espacio publico, campanas de cocina sobre la calle, grafitis y lo mejor pillamos a una pareja haciendo el amor delante d ela gente y la policia no aparecio por ningun lado, la venta de droga ni se diga y los gamines y habitants de la calle pidiendo plata es desesperante. Taganga esta llena de extramnjeros entre ellos israelies que se han adueñado de ella prostitucion, droga y se roban los cerros sin que la autoridad haga nada incluso estan haciendo una carretera sin permisos. la verdad esto es el principio de mi experiencia. pronto seguire con mas anecdotas
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Gracias, por describir este paraíso, realmente a mucha gente le gusta esta tierra y también desearian vivir una vejez apacible. Tiene muchos sitios bonitos y agradables, ha crecido bastante en los últimos años y le están invirtiendo en carreteras haciendo más fácil su acceso desde el interior del país, lo que ha contribuido a su despegue como la carretera del Sol, con doble calzada y la zona industrial ya no es solo El Rodadero, sino, Playa Salguero, y la zona turística en que están construyendo centros residenciales, hoteleros, etc, progreso asegurado, pero que traerá mucha gente. Naci en Bogotá, crecí en Barranquilla, estudie en Cartagena, pero creo que siempre viviré en Santa Marta. Nuevamente gracias por el artículo.
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