Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.
Siguiendo con las REFLEXIONES que se producen cuando MONSEÑOR ENRIQUE SARMIENTO ANGULO invita a sus PARES para sacar CONCLUSIONES que lleguen aportar a la PAZ&DESARROLLO sale un MATERIAL como este…
“La Iglesia propone impulsar el DESARROLLO HUMANO INTEGRAL.
Hay grandes dificultades: si la gente no está convencida y entusiasmada, falta el compromiso real del clero mismo. En el caso del desarrollo, muchos de nuestros sacerdotes no están formados para promover estos temas y acompañarlos.
Vamos a llegar a un acuerdo que está delimitado e implica unas tareas. La construcción de la paz y la reconciliación precede el acuerdo y va más allá del acuerdo. Otra manera de verlo es que la construcción de la paz comienza desde el acuerdo y se abre hacia el porvenir.
Se han hecho y se siguen haciendo cosas interesantes, iniciativas, procesos de construcción de paz, programas de desarrollo y paz. Es un tema que es mucho más amplio que los acuerdos de La Habana. Los acuerdos son una condición y un punto de partida.
Hay que ver qué se hace con las personas que se “reinsertan”. La experiencia de Centroamérica puede ser muy aleccionadora para nosotros: allí se generaron grupos y bandas y se ha incrementado la delincuencia común, con grupos de personas cuya vida ha girado en torno a las armas, ahora sin articulación y sin control. ¿Qué hacer con estas personas?
El primer punto del acuerdo gira en torno al agro y se establece la creación de organismos y acciones: tierra, crédito, distritos de riego. Allí hay la necesidad de altas inversiones y la búsqueda de que el campo sea un sitio que atraiga trabajo.
Hay otro actor, los empresarios, quienes tienen el capital para participar. También hay capital internacional vía cooperación internacional.
La inversión en el campo es uno de los puntos clave para empujar al país. Ha de ser una inversión grande, para ello se está formulando la reforma tributaria.
La única bandera que puede reivindicar las FARC, como bandera política, es reforma agraria y desarrollo rural en algunas regiones. Eso es lo que les puede dar una cierta legitimidad política –al menos regional- y eso es lo que puede permitir que realmente haya algún proceso de reinserción.
La reinserción implica generar empleo en oficios que demanden mano de obra de baja o mediana cualificación. En ello, el campo es una opción más viable que la ciudad –donde la mano de obra poco cualificada se puede emplear básicamente en construcción o en seguridad. Tenemos que interesarnos en los guerrilleros rasos.
Hay que ponerle atención a lo que está pactado, estudiar estos acuerdos. Es también importante estudiar con cuidado los planes que se potencian desde allí. Para tener una verdadera economía rural, hay que impulsar economías de escala y que en el campo se le pueda agregar valor a los productos.
Si se logra vencer la corrupción, el campo se puede volver un polo de desarrollo importante.
La estructura agraria en Colombia, con la gran cantidad de zonas de ganadería extensiva, exige revisión si se quiere generar empleo en el campo e industria agrícola.
La Iglesia debería poner cuidado especial –quizá una misión rural- en las zonas que han sido afectadas por la guerrilla y donde, probablemente, quedarán las zonas de concentración. Es importante que en estas zonas haya inversión, infraestructura. La propuesta agraria implica, también, la propuesta macroeconómica…”.
Sea como sea debemos DARLE una OPORTUNIDAD a la PAZ… con DIÁLOGOS y abriéndonos al PORVERNIR…
Recapacite y síganos aquí o en…
www.docsocialiglesia.com
Twitter @docsocialiglesi
Facebook docsocialiglesia
LOS DIALOGANTES DE HOY
Monseñor ENRIQUE SARMIENTO ANGULO
Padre LUIS FERNANDO MUNERA SJ
Padre RAFAEL DE BRIGARD SJ
ALEJANDRO LOPEZ CONDE A..
FOTOS : ALEXANDER PINZON
