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No todo está escrito…
En el audio de este episodio podcast cuento algunos de los antecedentes que sirven para explicar por qué el fallo que obligaría a las operadoras de telefonía a pagar una “billonada” de plata sería justo y a la vez injusto.
Por qué tiene que ver el pasivo pensional de Telecom, por qué puede afectar el futuro de nuestras conexiones a internet, por qué Claro y Movistar son “multadas” por contratos firmados antes de que esas marcas existieran. En realidad no sería una multa sino un fallo que impone un pago. La diferencia estaría en que se impone una multa ante acciones indebidas, pero lo que se presenta es el cobro por años de uso de activos como antenas, torres y transmisores, tras haber creído que eran propiedad de las empresas, pero luego establecer que son de la nación y no de las compañías que los pagaron e instalaron. ¿Se ve complejo? Escuchando el podcast se entiende mejor.
Oye el audio aquí mismo, o mejor suscríbete para descargarlo en tu teléfono y oírlo mientras haces otra cosa, porque dura 30 minutos que puedes aprovechar para oír y hacer algo diferente con las manos y los ojos libres. Ventajas del podcast: ¡No necesitas mirar la pantalla para oírlo!
Reproductor de Audio:
Hay preocupación en el sector de tecnologías de información y comunicación en mi país, porque viene una subasta de frecuencias de espacio electromagnético para telecomunicaciones y justo ahora un tribunal ordenó el cobro de dinero más grande a favor de la nación y en contra de empresas privadas de telecomunicaciones.
El primer pensamiento que tiene uno es algo como “bravo por la nación, que las empresas privadas paguen”. Pero tengo la impresión de que no es tan fácil, de que aquí no hay unos buenos y otros malos sino un enredo difícil de comprender como el de una torre llena de antenas y ‘celdas’ que quisiéramos al mismo tiempo quitar para que no se vean tan feas pero que siguieran funcionando nuestros teléfonos. Una cosa no se puede sin la otra, y el punto intermedio y justo es muy difícil de establecer.
¿Cómo puede afectar eso a los usuarios? En la noticia en EL TIEMPO el Ministro de TIC habla de la protección de los recursos del estado. Eso suena muy bien. Lo curioso es que su declaración representa a la misma entidad que otorga los contratos de uso de espectro de la nación para telecomunicaciones.
El pago impuesto a Claro (América Movil) y a Movistar (Telefónica) es de 4,7 billones de pesos. Equivaldrían hoy a 1559 millones de dólares, pero según el blog Desmarcado todavía no estaría todo definido por completo y habría derecho a “pataleo” acudiendo a otras instancias.
El monto que tendría que pagar Movistar es de 1,6 billones de pesos colombianos, equivalente a 530 millones de dólares. A Claro le correspondería pagar 3,1 billones que son 1028 millones de dólares. Para esa última compañía significa más o menos entregar la utilidad de su negocio por 4 años. Los mexicanos tienen pendiente una demanda por este mismo en una corte internacional en Washington. Pero ¿si el fallo es diferente al fallo colombiano cuál prevalecería? Eso también está enredado.
Con Movistar el asunto es también complejo, pues es socia de el estado colombiano desde cuando la compañía española compró a la estatal Telecom. El lío del pasivo pensional heredado de Telecom se explica en el audio del podcast, y se pone todo más complejo porque se acaba de pactar una recapitalización de esa empresa en la que el estado, dueño del 32% tendría que poner 1,2 billones pero ahora le cobraría a su socio 1,6 billones por la orden de pago del fallo jurídico, de manera que los socios españoles terminarían pagando toda esa capitalización y 400 millones más.
¿O acaso también debe la nación asumir el 32% del fallo? No sería al final ese porcentaje, porque habría que calcularlo de acuerdo con la valoración de las empresas que hacen parte directa o indirecta de Telefónica. Se vuelve compleja esta torre de antenas y problemas jurídicos, un enorme bulto de anzuelos del que parecería que no vamos a poder sacar nada sin pinchar al menos un poco nuestro futuro como ciudadanos bien conectados.
El podcast también está disponible en Youtube, para quienes prefieren oírlo allí.
