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En el trajín de ésta vida acelerada y ocupada, se puede olvidar el mantenimiento de los vehículos. Toca hacerlo en los intervalos recomendados por el fabricante o antes si las condiciones de trabajo son exigentes. De ésta manera se extiende la vida útil y se asegura un buen funcionamiento. Por ejemplo, unas mangueras de refrigeración al final de su ciclo no avisan.
Simplemente se van cristalizando y en cualquier momento se rompen, sale el refrigerante en un instante, tan rápido, que deja marcas en forma de empaque de culata (empaques en motores en V, o planos de cilindros opuestos como los Subaru), arruinado en el mejor de los casos, o con culata torcida y en el otro extremo, con una gruesa suma porque toca reparar la máquina.
Nadie asegura que unos frenos que han funcionado ”bien” en la ciudad sin ruidos ni fugas de líquido, lo harán igualmente en carretera. Un cilindro de freno en las campanas con una leve fuga que no se deja ver ni quitando la llanta, puede empeorar en el viaje, hasta dejar de operar ya cuando el pedal se vaya al fondo y llegue el accidente.Lo primero a revisar a fondo antes que cualquier componente o sistema, son los frenos, con las suspensiones y las llantas.
Que nunca tengan que usar el freno de emergencia por descuido….
No ahorren en componentes que no sean originales o de equivalencia – calidad – marca reputadas. Pastillas, bombas principales, discos o cilindros, deben ser 100 % confiables, especialmente cuando un auto tiene ya muchos años de haber sido descontinuado.
Frenos y suspensiones en impecable forma, para tomar curvas como el mejor….
Si no se ha cambiado el líquido de frenos en 2 años, es recomendable hacerlo para asegurar la fiabilidad del sistema, verificando que se haga una perfecta purgada del aire que hay dentro del sistema dejando el recorrido – tacto – dureza del pedal casi como cuando era nuevo.
Una buena inspección de suspensiones y llantas se hace con el vehículo puesto en un elevador. Ahí aparecen en forma de desgaste verificable, los ruidos que jamás aparecieron, pero que son evidentes a la vista de las tolerancias excesivas de algún buje, rótula, etc. No debe haber fugas de líquido en las rutas de las direcciones hidráulicas, y no viaje si el testigo de la dirección eléctrica o electrohidráulica se prendió y no saben la causa.
Neumáticos, frenos o suspensiones en mal estado, alargan las distancias peligrosamente
Los invito a leer sobre algunos otros importantes consejos de mantenimiento o corrección que recomiendo, y que son para ejecutar en cualquier vehículo durante cualquier época del año, a lo largo de su vida útil, en cuanto a motores, llantas, refrigeración, cajas – transmisiones, correas y demás. Simplemente para que el viaje en éste fin de año sea tranquilo, sin la preocupación de estar pensando después de la varada, ¿será que el mecánico del pueblo puso el repuesto que era y de forma adecuada?
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