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Ver el coliseo del Parque de La Leyenda lleno es espléndido. Porque la energía no es solo la de una multitud, sino la de una multitud feliz y muy crítica, capaz de abuchear sin piedad.
Y René Pérez, de Calle 13 se echó al bolsillo al público valduparense, con solo salir al escenario. El vocalista de la agrupación puertorriqueña asistió a su presentación acompañado de una familia arhuaca con la que entabló amistad en un viaje de búsqueda de raíces musicales por la Sierra Nevada de Santa Marta, realizado hace meses, que lo llevó también a conocer a Los Gaiteros de San Jacinto.
Antes del concierto, su manager informó que René estaba tan emocionado con lo que vio en Valledupar, con el sentimiento vallenato, que por la tarde había decidido ampliar un documental que está haciendo con los músicos colombianos (y que fue el motivo de su visita a la Sierra Nevada el año pasado).
De hecho, René afirmó dentro del concierto que en un Festival así se siente como en su casa. Que ha visto el calor del pueblo, que los considera como su sangre y que le gusta encontrarse con algo tan típico como lo que se está viviendo.
De hecho, dentro de la presentación, espectácular en su puesta en escena, Calle 13 interpretó una canción acompañado de caja, guacharaca y acordeón y fue aplaudido por los vallenatos.
Una experiencia así es un ejemplo. Para los otros músicos vallenatos porque pueden inspirarse en puestas en escena así para sus shows. Y también para los que se quejan de que en un festival vallenato no hay campo para otras músicas. Porque la presencia de grupos de primera línea como Calle 13 le da realce internacional y, por la respuesta del público, se siente que Valledupar está listo para recibir en su magnífico coliseo a artistas internacionales en cualquier momento.
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