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En la fila hacia el estrellato, hay artistas que pasan sin pena ni gloria cuando sacan un disco o una canción. A medida que crecen, cuando ya han demostrado que están para grandes cosas, el flujo de noticias sobre ellos empieza a crecer. Hace poco le decía a Martha Velandia, la jefe de marketing e imagen de Jorge Celedón y Jimmy Zambrano, que con ellos ya tocaba como con Fonseca, Cabas, Aterciopelados, Juanes o el mismo Carlos Vives. Había que informar cada vez que daba un paso. Porque son los primeros en algo, porque van escalando y su carrera va generando olas cada vez más grandes.
Por eso, la salida de una nueva canción de Celedón se convierte en noticia importante. Y a una semana del lanzamiento de Tu amor fue malo, el cantante más popular del vallenato en la actualidad se ubica, junto con Jimmy Zambrano, en el primer lugar de la lista tropical (tropical airplay) de la revista Billboard en Estados Unidos. La canción es Me vio llorar, la misma que lo llevó a concursar en la categoría de mejor canción tropical en el Grammy. Ya Jorge Celedón ha escalado una posición más. Su competencia ya va más allá de destacarse entre vallenatos, ahora su reto es destacarse entre los latinos.
Y ojalá que haya muchos vallenatos que se tomen su carrera como objeto de estudio, porque él les está abriendo el oído a nuevos públicos para un género que pretende conquistar el mundo, pero a la par, se resiste a darle la libertad de experimentar. En ese sentido mi fe está más en los jóvenes como un Luifer Cuello, un Peter Manjarrés, Daniel Calderón de Los Gigantes y los peladitos que vienen -como los alumnos de Andrés ‘El Turco’ Gil- y que aspiran a ser cantantes y acordeoneros, porque están más abiertos a nuevas tecnologías a no ver tan grande y tan distante el resto del mundo y a medirse sin complejos con músicos de cualquier lado.
Celedón está en la Billboard, conquistó la lista tropical. Un próximo paso sería conquistar la lista de hot latin tracks, en la que compiten todos los géneros (pop, rock, norteño, tropical) hechos por latinos (que en esta semana está liderada por Luis Fonsi). Sin embargo, ya puso su bandera en la Billboard y sirve para mostrarles a los demás que sí se puede.
Ya nos hizo sentir orgullosos cuando tocó en la Casa Blanca, muchos volverán a compartir esa sensación cuando lo veamos tocar en la ceremonia del Grammy, el próximo 13 de noviembre, algo que también le ocurre a un vallenato por primera vez.
Sus críticos pueden seguir insistiendo en que está fusionando o que llegó a punta de convertir rancheras (cosa, que me temo no es tan así, convirtió una, una sola ranchera en un vallenato, y qué con eso). Pero, aún así, está abriéndo los oídos de nuevos públicos para el género en general que después de oírlo puede interesarse por oír a los demás. Eso es lo que muchos de los vallenatos (enfrascados en sus rivalidades cotidianas) no han querido entender y por eso se quedan.
