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¿Por qué digo que primero es el contenido y después el SEO?
Porque yo creo que son muy pocos los que entran a Google a buscar la palabra amor. Creo que son muy pocos los que hacen una búsqueda para saber por qué es que “deben cantar los niños”, como dice José Luis Perales, y porque creo que son muy pocos los que buscan la palabra felicidad como una tarea diaria.
Nosotros solemos entrar a hacer búsquedas de aquello que necesitamos para nuestro trabajo diario. Para informarnos, para saber qué pasa de algo, para documentarnos. Pero… ¿Entramos para encontrar a ver quién dice que está buscando que el mundo sea feliz?
¿Será que algún día entramos a buscar en Google aquello de “Yo quiero que canten los niños que viven en paz, y aquellos que sufren dolor, que canten por esos que no cantarán, porque han apagado su voz'”?
¿Será que algún día entramos a Google a buscar la palabra felicidad para sentirla? ¿Para vivirla?
Si José Luis Perales estuviera escribiendo un blog con normas SEO, nunca se la habría ocurrido decir “que canten los niños que alcen la voz, que hagan al mundo escuchar, que unan sus voces y lleguen al sol, en ellos está la verdad”.
Yo canto para que me dejen vivir
Yo canto para que sonría mamá
Yo canto porque sea el cielo azul
Yo para que no me ensucien el mar.
Yo canto para los que no tienen pan,
yo canto para que respeten la flor,
yo canto para que el mundo sea feliz,
yo canto para no escuchar el cañón.
Que canten los niños que alcen la voz,
que hagan al mundo escuchar
que unan sus voces y lleguen al sol,
en ellos está la verdad”.
Pienso que no deben ser muchos los que pongan en el buscador de Google las palabras canto, niños, paz, dolor, no cantarán, han apagado su voz, que alcen su voz, voces, sol, verdad, pan.
Pero también creo que a nadie le cabe duda de que el tema de José Luis Perales, ‘Que canten los niños’, nos lleva a un inmenso mundo de amor, de inocencia, nos lleva a querer abrazar a nuestros hijos con toda el alma y a decirles ‘estoy aquí’, nos mueve el corazón para abrazar a todos esos niños que en el mundo claman por al menos una sonrisa, y nos lleva a decir que algo podemos hacer por los que sufren dolor.
Eso no lo lee el buscador de Google. Esta entrada en el blog que estoy escribiendo no creo que vaya a estar en los primeros lugares de los buscadores, a menos que alguien busque por José Luis Perales y le agregue el nombre de Roberto Vargas. Lo que, por supuesto, no va a ocurrir.
Por eso es que digo que primero tenemos que escribir con el corazón, con el alma, aquello que queremos decir, y después de eso, nos podemos ocupar de las normas SEO (las que hacen que nos encuentren más fácilmente en los buscadores).
No soy enemigo de las normas SEO para escribir. Son necesarias. Mucho más en una noticia, un informe. Son indispensables si estamos tratando unos temas distintos. Pero cuando queremos desnudar el alma, solo tenemos que hacer una cosa: desnudarla.
Twitter: VargasGalvis
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