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@JuanPabloMed
Quedo muy triste de volver a mi ciudad y encontrarme frente a frente con la prostitución en las calles del Parque Lleras. La prostitución no es un fenómeno nuevo en esta ciudad o en alguna otra, no obstante, observar la cantidad de mujeres que se dedican a este oficio da desazón, y muestra la necesidad de avanzar en políticas sociales y de educación para que se generen nuevas oportunidades para los jóvenes y se evite la explotación sexual.
Son decenas las mujeres que recorren el perímetro del parque en búsqueda de clientes, en este lugar se concentra los principales establecimientos de diversión y restaurantes de Medellín, y es el sitio por excelencia donde turistas locales y extranjeros disfrutan de la vida nocturna de la ciudad, también es donde los paisas, como decimos a los habitantes de esta zona, nos encontramos a celebrar los triunfos de los equipos de fútbol local.
En las caras de estas jóvenes paisas, se reflejan expresiones de dolor y en otras se puede observar sin mucho rodeo la inequidad social reinante en la Ciudad. No obstante, lo más aberrante es ver el incremento del turismo sexual, evidenciado en la cantidad de turistas que negocian en el espacio público acuerdos económicos por una noche de sexo.
Faltan acciones, y que la Alcaldía de Medellín desarrolle estrategias mucho más potentes para disminuirlo en su máxima expresión.
La prostitución es un fenómeno que nunca va acabar, y no es un oficio prohibido, cuenta con reglas para su ejercicio contenidos en el Código de Convivencia Ciudadana del Departamento de Antioquia. El problema no es sobre la necesidad de crear nuevas leyes o normas de policía, el asunto está orientado en que las Autoridades Públicas deben cumplir su función: la Policía Nacional y la Alcaldía de Medellín acciones de control; las Secretaría de Inclusión Social y la de Salud, acciones de prevención en sus ámbitos de competencia.
Hago un llamado a la Alcaldía y los ciudadanos de Medellín ha luchar contra la explotación sexual, y evitar a toda costa las secuelas que esta situación puede generar para la construcción de un tejido social sano para sus habitantes. No acostumbrarse al status quo es el paso más importante para reconocer lo que es evidente y que requiere de amplios esfuerzos públicos y privados para atender esta problemática social reinante no solo en Medellín, sino también en otros lugares de Colombia como lo es la Puerta del Reloj en Cartagena, donde el problema social se incrementa con el paso de los días.
Aviso:
* Aunque este blog no es para temas como el tratado en esta ocasión, no puedo dejar pasar la oportunidad para evidenciar una situación social que sucede a los ojos de los habitantes de Medellín.
* Este blog no representa la opinión ni estrategia de empresas, compañías u organizaciones a las que represento o hago parte. Para más información, pueden escribir un comentario en el presente blog o en el email juansala@ucm.es
* Doctorando en Derecho Internacional de la Universidad Computlense de Madrid, con Maestría en Relaciones Internacionales. Abogado de la Universidad de Medellín.
No le parece que pretender acabar con la prostitución en ese especial parque, es lo mismo que intentar acabar con el lujoso , costoso y discriminador UBER ?
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Los paisas solo viven de apariencias, no les gusta el trabajo honesto, por eso hay tanto criminal en esa tierra, aunque hay mucha gente buena tambien, creo que es un problema de identidad y de gobernantes.
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Hasta que el país declara la prostitución como ilegal, nada va cambiar. Al contrario, empeorar. Ya que Colombia tiene el puesto 3 en el turismo sexual al nivel mundial.
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