Con motivo del Día Internacional de los Desaparecidos, el 30 de agosto, la Cruz Roja Colombiana y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), invitan al país a una reflexión para no olvidar a los 68 mil colombianos que aún se encuentran desaparecidos y acompañar el drama de sus familias que piden el derecho de la verdad y de conocer la suerte de sus seres queridos. Con la campaña “En este espacio hay un vacío, llénalo de apoyo” la Delegación del CICR en toda Colombia busca visibilizar este drama humanitario.

@Cruzrojacol

María aún espera que alguna entidad le de una respuesta sobre la desaparición de su esposo. Hace 5 años José viajó a Cali para trabajar en el sector de la construcción con la esperanza de mejorar la calidad de vida de su esposa y sus tres hijos. Su familia nunca volvió a saber de él. Luego de su desaparición, María como muchas otras mujeres tuvo que salir a trabajar para sostener a sus tres hijos adolecentes, en medio de la situación de violencia que vive su región.

Después de un largo proceso de reconciliación con la vida, María entendió que no hay respuestas a sus preguntas, aceptó la ausencia de su compañero de vida, pero no pierde la esperanza de tener noticias de él. Hoy, la lección más importante para esta familia es que a pesar de la difícil experiencia es posible construir un mejor futuro, mantenerse siempre unidos y consolidar redes con otras familias para ser más fuertes.

Testimonios como el de María son sólo la punta del iceberg del drama humanitario de cientos de familias que hoy buscan a sus seres queridos desaparecidos. A la fecha son más de 68 mil las personas víctimas de esta problemática que se da a causa de los desastres naturales, conflictos armados, tensiones y disturbios al interior de un Estado o muchas veces por decisión propia.

La desaparición de personas es una problemática social que consiste en el desconocimiento del paradero de una persona por parte de sus familiares, bien sea que ésta se encuentre extraviada, se ausente voluntariamente sin dar razón o sea retenida de manera ilegal y oculta deliberadamente. Sea cual sea su causa, la desaparición es un hecho que afecta tanto a quien es víctima, como a sus familiares.

Cuando una persona desaparece, hay dos tipos de víctimas: la que desaparece y sus familiares, que se debaten entre la esperanza y la desesperación, que viven sumidos en la incertidumbre y el dolor, que esperan noticias, a veces durante décadas”, explicó Marianne Pecassou, jefe del programa de acompañamiento a víctimas de desaparición y sus familias.

La tragedia de la desaparición, que se vive en muchos países, arroja unas cifras abrumadoras. Según informe del Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia de las más de 90.000 personas dadas por desaparecidas inicialmente, se desconoce el paradero de 68.000. Como estos son muchos los que se quedan sin denunciar, sin registrar o son desconocidos.

Con el fin de mitigar las consecuencias humanitarias de este drama en las personas víctimas de desaparición y sus familiares, la Cruz Roja Colombiana y el CICR a través de los  programas: Restablecimiento de Contactos Familiares y Apoyo Psicosocial, realizan un acompañamiento permanente a las familias en el rencuentro con sus seres queridos, cuando consideran que es posible la búsqueda, así como acciones psicosociales que promueven la reconciliación de las víctimas que sobreviven a este drama humanitario.

Entre las acciones de Apoyo Psicosocial se desarrolla una estrategia de acompañamiento permanente a las familias para que puedan sobrellevar la ansiedad e incertidumbre de la ausencia de su ser querido. Por ejemplo en Buenaventura se han conformado grupos de base comunitarios a fin de generar acompañamiento y apoyo mutuo. Tal es el caso de Madres por la Vida, Entretejiendo Voces por los Desaparecidos y Capilla de la Memoria.

Durante los últimos años, los familiares han desarrollado diversas acciones reparadoras de carácter psicosocial que buscan acompañar y mejorar la comprensión que tienen sobre el tema, aliviar el dolor físico y emocional que produce la incertidumbre y el fuerte shock de la falta de noticias. También buscan el reconocimiento de esta problemática por parte de las autoridades haciendo efectivo su derecho a conocer la suerte de sus seres queridos y revindicar su memoria.

Sensibilizarnos sobre el sufrimiento y las dificultades a las que se enfrentan los familiares de las personas desaparecidas, quienes también son víctimas, es una forma de reconocerlos en su dolor y apoyarlos en la materialización de su derecho a saber qué paso con sus seres queridos y a conocer su paradero. Hoy, los invitamos  a Llenar el vacío, a través de su apoyo y conciencia sobre esta realidad.

100 AÑOS DE ACCIÓN HUMANITARIA

Caravanas humanitarias 19 de agosto de 2013: Durante el paro nacional agrario la Cruz Roja Colombiana realizó la movilización de personal medico, paramédico y voluntarios para abastecer los hospitales y movilizar algunos pacientes que requerían del traslado.