Los proyectos sobre el riesgo y la recuperación de desastres fracasan si los estados ignoran la verdadera relación de la gente con el riesgo, es el principal cuestionamiento del Informe Mundial Sobre Desastres publicado por la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.

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Video Informe Mundial sobre Desastres 2014

En el informe se pregunta, por ejemplo, qué habría que hacer cuando la gente atribuye las inundaciones a una diosa furiosa (río Kosi, India) o una erupción volcánica, al dios de la montaña (monte Merapi, Java, Indonesia). Después del tsunami de 2004, muchos habitantes de Aceh, Indonesia, creían que se trataba de un merecido castigo divino por haber permitido el turismo y las perforaciones petrolíferas. Creencias similares eran comunes en Estados Unidos tras el huracán Katrina de 2005: el desastre mostraba el disgusto de Dios por el comportamiento de algunas personas que vivían en Nueva Orleans.

El cambio climático está aumentando el número de personas en riesgo, así como la frecuencia y la gravedad de los peligros climáticos. En el Informe mundial sobre desastres 2014 se defiende un nuevo enfoque que tiene en cuenta la forma de pensar, comportarse y actuar de las personas frente al riesgo y las instituciones de emergencias.

Las prioridades de la gente a menudo incluyen la necesidad de vivir en entornos de alto riesgo, porque les proporcionan medios de vida. Cientos de millones de personas viven en lugares peligrosos como laderas de volcanes, zonas de fallas sísmicas y costas expuestas a tormentas y tsunamis, pues ofrecen buenas oportunidades de ganarse la vida.

Los enfoques de reducción del riesgo de desastres deben reconocer por qué hay personas que viven con riesgos y la forma en que su comportamiento y sus actitudes relacionadas con la cultura afectan su exposición y sensibilidad a los peligros. Para reducir esos riesgos, es esencial centrarse en fortalecer los medios de vida, lograr que sean más seguros y, llegado el caso, reemplazarlos. También es vital conciliar creencias o prácticas diarias e intervenciones de salud pública. En la percepción de los riesgos para la salud intervienen opiniones, tradiciones, creencias y prácticas sociales de ámbito local; de ahí que sea importante entender las diferencias culturales que pueden incidir en los resultados.

La cuestión de la cultura y el conocimiento local es hoy más importante que nunca, pues el cambio climático hace que las comunidades sean más vulnerables. Las presiones que eso ejerce en los sistemas sociales, físicos y económicos están conduciendo al mundo hacia una nueva era de riesgo. Para preparar las respuestas más efectivas a dichos cambios, es preciso reconocer las causas subyacentes del riesgo y eso no se puede hacer sin considerar el papel central de la cultura.

Datos sobre los desastres de 2013

Apoyo en emergencias Cruz Roja Colombiana 2014

Incendios forestales: acciones de prevención, evacuación y soporte logístico en 1.443 eventos.

Accidentes de tránsito: acciones de estabilización de heridos, búsqueda y rescate en 76 eventos.

Incendios estructurales: apoyo en primeros auxilios y apoyo Psicosocial en 291 eventos.

Vendavales: entrega de ayudas humanitarias a las comunidades afectadas en 419 eventos.

Sismos: asistencia humanitaria, alojamiento temporal, alistamiento de grupos de rescate en 11 eventos.

Primera temporada de lluvias: asistencia Humanitaria de Emergencia, Apoyo a alojamientos temporales en 645 eventos.

Temporada Seca: movilización de 10 plantas potabilizadoras de agua a 8 departamentos del país.

¡Porque a esta hora hay alguien de la Cruz Roja trabajando por Colombia!

100 AÑOS DE ACCIÓN HUMANITARIA

Programa Contaminación por Armas: Durante 17 años la Cruz Roja Colombiana y Cruz Roja Española vienen atendiendo a más de 1.700 víctimas de accidentes producidos por minas antipersona, municiones sin estallar y otros artefactos de guerra, en más de 18 departamentos del país.