Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.
@Cruzrojacol
Una persona necesita de 7,5 a 15 litros diarios de agua para satisfacer sus necesidades vitales, entre ellas: beber, uso para la preparación de los alimentos e higiene personal. Paradójicamente, en un planeta donde el 70% es agua, 768 millones de personas en el mundo no tienen acceso a ella, ni logran alcanzar el mínimo vital de agua para subsistir un día.
Aunque la temporada seca que enfrentó Colombia en el 2014 afectó en gran medida la flora, fauna, los parques naturales y los sectores agrícolas y ganaderos de varias regiones del país, también dejó nuevos desafíos para los organismos de socorro quienes al atender la temporada seca en la Costa Caribe detectaron que no todos los pozos ofrecían agua dulce, en especial en el departamento de la Guajira donde se requería, además de pozos profundos, plantas desalinizadoras de agua.
En la Guajira se cuenta con dos plantas potabilizadoras de agua dulce; una produce 175 mil litros diarios y beneficia en promedio a 12 mil personas día, la otra 25 mil litros cada día beneficiando a cerca de 1.600 personas. A pesar de este importante esfuerzo fue necesario contar con plantas desalinizadoras para tratar el agua de algunos pozos ya perforados, motivo por el cual el Gobierno Nacional, a través de la 
Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo en Desastres -UNGRD-, dispuso de un equipo especializado que procesará el agua de los pozos salobres o directamente del mar, garantizando de esta manera el suministro de agua apta para el consumo humano en los municipios de Uribia y Manaure.
La planta desalinizadora es un equipo de última tecnología que cumple con los más altos estándares de calidad, como parte de la exigencia de los acuerdos para la asistencia humanitaria y que son el medio para el consumo de agua segura para cualquier persona. En este caso, el equipo se ubicó en Uribia específicamente para el tratamiento del primer pozo que perforó el Sistema Geológico Nacional en el año 2014.
Acciones de la Cruz Roja Colombiana en Uribia
El equipo fue entregado a la Cruz Roja Colombiana para que a través del Socorro Nacional la planta desalinizadora sea operada en la Guajira, para lo cual se realizó el proceso de formación con los proveedores de los equipos, con el propósito de conocer los pormenores de la operación e iniciar el proceso de desalinización del agua en la zona.
La planta tiene la capacidad de producir 275 mil litros cada día en su máxima exigencia, así puede beneficiar a cerca de 18.330 personas aplicando la normativa de estándares mínimos del Proyecto Esfera y la Guía de Estandarización de Ayuda Humanitaria de Colombia –UNGRD, los cuales consisten en que una persona requiere entre 7,5 a 15 litros diarios de agua para satisfacer sus necesidades vitales como son para beber, utilizar para la preparación de los alimentos e higiene personal.
La operación de la planta inició el pasado 1 de febrero de 2015 y en 5 días de actividad ha producido 244 mil litros para aproximadamente 15 mil personas. El agua salobre tratada es llevada a las comunidades cercanas a través de 3 carrotanques del Gobierno Municipal de Uribia y Departamental de la Guajira para realizar el transporte del agua.
La Cruz Roja Colombiana cuenta con un equipo interdisciplinario entre voluntarios y empleados de la Seccional Guajira, con amplia experiencia y conocimiento en procesos de tratamiento y potabilización del agua, lo cual garantiza en las comunidades agua de la más alta calidad para el consumo entre sus habitantes.
Esa calidad se cumple gracias a las rigurosas pruebas de laboratorio a las que se enfrenta el agua en el proceso de potabilización, las cuales son controladas de manera detallada por la Cruz Roja Colombiana, además del control sanitario realizado por la Secretaría de Salud de la Guajira.
Acciones en promoción de la salud y prevención de la enfermedad
La Cruz Roja Colombiana trabaja en temas de promoción de higiene, preparación adecuada de los alimentos, manejo efectivo del agua y de basuras. Sensibilización en temas ambientales para evitar incendios y afectación de cultivos.
Monitoreo de posibles enfermedades que se puedan presentar en la zona por el manejo inadecuado del agua, como el dengue, el chikungunya, la malaria, las infecciones en la piel por la extrema sequía y enfermedades diarreicas agudas por el mal estado del agua, sobre todo en la población infantil.
¡Porque a esta hora hay alguien de la Cruz Roja trabajando por Colombia!
