Claudia Olaya, ingeniera ambiental bogotana que fue a trabajar al Chocó, dice que por documentales no se conoce la riqueza de ese territorio ni cómo se está explotando irracionalmente.
Por Claudia Marcela Olaya Perea, ingeniera ambiental de la U. Libre, y participante en el programa «100 nuevas plumas en el Bicentenario, 2010-2021»
La biodiversidad es la principal riqueza que posee nuestro país, ¿pero realmente nos detenemos a observarla y asumirla como una prioridad?
Tuve la oportunidad de trabajar en el Chocó, realizando unas caracterizaciones ecológicas en diferentes cerros del Chocó Biogeografico, lo que se convirtió en una experiencia profesional y personal enriquecedora. Comprobé que realmente somos un país biodiverso y que el departamento del Chocó está lleno de riqueza, visto desde adentro.
No se conoce este lugar viendo documentales, pues no conozco ninguno que cuente en detalle y muestre la diversidad de especies de anfibios, mamíferos, aves y plantas que conforman este territorio.
Paradójicamente, la belleza de los paisajes que conforman los territorios, se ve opacada por la actitud de algunos chocoanos, que al igual que la mayoría de los colombianos, ven al Chocó como un territorio de pobreza y desigualdad.
Personas que entregan su herencia y patrimonio natural al mejor postor para procurar sobrevivir, tratando a la biodiversidad que contiene esta región como una fuente eterna de materiales y recursos que satisfacen las necesidades diarias, y agotando los recursos naturales a ritmo acelerado, sin tener la oportunidad de observar y planificar la abundancia de recursos para lograr el crecimiento de la región.
La educación juega un papel fundamental, puesto que el estudio, valoración y protección de estos recursos pueden generar, sin duda alguna, una importante fuente de desarrollo, que proporcionaría a la región y al país alimentos, energía, madera, materias primas y medicamentos, además del ecoturismo.
Muchos consideran que no puedo sentir la problemática de la región por no haber nacido ahí, pero la siento probablemente por el hecho de ser negra o más simple que eso, por ser una colombiana que vio al Chocó desde adentro como un territorio rico, productivo y lleno de oportunidades.
Es necesario que Colombia ponga sus ojos en esta región y haga una apuesta por la conservación de los recursos que este territorio tiene y por poner al departamento en el puesto que realmente merece en el país
Comentarios