Los futbolistas se suman a campaña «Tumaco necesita estadio»
Por Melina Nogales M. Especial para Color de Colombia*
Caía la tarde en la Perla del Pacifico. Un sol sofocante que se acercaba a los cuarenta grados recibiría el Vuelo 9421. Entre arengas con lágrimas, especialmente de niños y niñas en espera de sus grandes ídolos, se escuchaba: ¡Ibarbo, Miñía!
La ansiedad y la alegría se juntaban. Un gran arco de honor, simbolizado en dos grandes chorros de agua propulsados por un carro de la Aeronáutica Civil y otro del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, se dispuso para la llegada de Pablo Estifer Armero y Víctor Ibarbo, jugadores de la Selección Colombia durante el Mundial Brasil 2014, oriundos de San Andrés de Tumaco.
Una acción que se contrapone a la realidad de un municipio que aún no tiene acueducto y agua potable, pero que buscaba manifestar el agradecimiento para estos jóvenes que ahora son considerados héroes.
A su arribo al aeropuerto La Florida de Tumaco, fue evidente en los rostros de los jugadores una sensación de calidez y hogar.
Ibarbo, al ver las manifestaciones de aprecio de los asistentes a su bienvenida, expresó conmocionado: ¡Esto, sencillamente es Tumaco!, mientras abrazaba con fuerza a su primer entrenador, ese mismo de cuando era niño y vivía en el humilde barrio La Carbonera.
Armero, por su parte, con su particular baile de Salsa Choke, al son de Quendambuxx, artista local, contagió el ritmo a quienes lo miraban emocionados.
Este ritmo que se ha hecho popular con la Selección Colombia, también nació en Tumaco, a través de CJ Castro, quien hace más de tres años fue su precursor.
Motos de la Policía, el carro de Bomberos, una ambulancia y centenares de motocicletas con acompañantes se formaban para el recorrido de la caravana, organizada para homenajear a los futbolistas.
Grandes pancartas de agradecimiento, instrumentos autóctonos como las maracas y el bombo, adornaron el andar entre el Puente del Morro, la Avenida de los Estudiantes, la Avenida La Playa, el Pindo (Vía Pasto- Tumaco), el Barrio Porvenir, llegando al barrio Ciudadela, donde se encuentra la actual casa de Pablo Armero.
Los inicios de Armero fueron en el Bajito, un sector que hace parte de una de las islas que componen el municipio. Ahí Armero aprendió a jugar futbol de la forma tradicional, en la playa.
Suceso que aún recuerda, al aseverar que cuando era pequeño no tenía guayos para jugar y se las arreglaba para hacerlo.
Dice que es una de la razones por las que estableció hace un par de meses la Fundación Miñía, que busca apoyar a niños y niñas, y jóvenes en la formación deportiva, puntualmente en el fútbol.
El homenaje
Después de recorrer otras principales vías y ya entrada la noche, la caravana llegó a su parada final.
“Qué viva Tumaco”, gritó Pablo Armero con emotividad ante miles de espectadores que los esperaban en la Cancha San Judas, lugar referente que entre otras cosas en 1986 recibió a uno de los papas más queridos, Juan Pablo II.
Acto seguido agradeció todo el cariño recibido en nombre de la Selección Colombia durante toda la etapa mundialista. Declaró sentirse orgulloso de ser tumaqueño, nariñense y del Pacífico colombiano.
Y sin duda es hijo de la Costa Pacífica. Lo revelan el sabor y la alegría de su personalidad, que ha impregnado a sus compañeros en las celebraciones de gol.
Víctor Ibarbo y “Miñia”, como es apodado Armero, en honor a una palabra propia de Tumaco que significa “Amigo”, recibieron la Orden Domingo Tumaco González de manos del alcalde Víctor Gallo, al igual que otro reconocimiento del gobernador Raúl Delgado, que resaltan la labor de estos hijos de la Perla del Pacífico.
“Los colombianos nos sentimos orgullosos de esta generación de fútbol y de estos hijos del puerto, que a pesar de ser humildes siempre creyeron en sus condiciones físicas y con disciplina miraron en este deporte un futuro de vida. Eso es lo más importante; lo malo es que en Tumaco no hay apoyo al deporte”, señaló a esta reportera Pablo Antonio Erazo, médico tumaqueño.
“Tumaco necesita estadio”, se leía en las camisetas que posteriormente portaron los jugadores de la Selección. El alcalde anunció que el 30 de julio el Presidente Santos visitará el municipio, y le reiterará la iniciativa, que tiene ahora el apoyo de Armero e Ibarbo;
Los tumaqueños coinciden en que se necesita la construcción de otros escenarios deportivos, que en este momento son escasos, para que los niños y niñas, adolescentes y jóvenes de este territorio, que tristemente ha sido azotado por la violencia, tengan y cultiven referentes de vida positivos.
“Aquí veo a muchos amigos que jugaron conmigo, quizá yo llegué a donde estoy por un poquito de suerte, así es el fútbol, pero muchas bendiciones, ánimo… orgulloso de ser tumaqueño”, expresó conmovido Víctor Ibarbo, tras recibir el reconocimiento.
[Fotos: cortesía de Edwin Vanegas]
* La número 5 de las 10 propuestas al presidente Santos para el progreso afrocolombiano 2014-2018, dice:
“Por complejos deportivos de alto rendimiento en Bolívar, Urabá, Chocó, norte Cauca, Buenaventura, Tumaco. #GloriaOlímpica”
Puede firmar en respaldo de las 10 propuestas en este link:
http://www.change.org/es/peticiones/presidente-santos-incorpore-en-el-plan-de-desarrollo-2014-2018-estas-10-propuestas-para-el-progreso-afrocolombiano