Color de Colombia y MarViva han iniciado un diálogo en torno a apoyar el cumplimiento del ODS 14, Vida submarina, desde la sociedad civil.

Desde 2002, la Fundación MarViva, ONG regional de Costa Rica, Panamá y Colombia, creada por el filántropo suizo Stephan Schmidheiny, ha logrado un reconocimiento en el ámbito técnico científico para promover la conservación y uso sostenible de los recursos marinos en el Pacífico Tropical Oriental.

Desde hace 5 años hace parte del grupo de expertos que, en el marco de Naciones Unidas, se encuentra construyendo los lineamientos y las acciones para atender la contaminación por plásticos y microplásticos.

En Colombia, Daniela Durán (foto) es la coordinadora de Incidencia Política de MarViva.

Es socióloga de la Universidad del Rosario y tiene experiencia en la creación de esquemas participativos de gobernanza local para la administración de áreas marinas protegidas y la implementación de mecanismos de coordinación y marcos regulatorios locales. Hablamos con ella.

¿Desde hace cuánto está MarViva en Colombia y cuál es su misión?

Trabajamos en Colombia desde el 2006 en el pacífico chocoano en los municipios de Juradó, Bahía Solano, Nuquí y Bajo Baudó, contribuyendo al ordenamiento espacial marino, al fomento de dinámicas de mercados responsables para productos y servicios marinos y al fortalecimiento de capacidades institucionales.

Desde hace cinco años venimos promoviendo la disminución de la contaminación por plásticos de un solo uso, a través de campañas de sensibilización y fortalecimiento a marcos regulatorios locales, nacionales e internacionales en Costa Rica, Panamá y Colombia.

¿Cuál es el alcance de la contaminación mundial por desechos plásticos?

Los plásticos de un solo uso son aquellos polímeros sintéticos que se suelen utilizar para envases plásticos e incluyen artículos destinados a ser utilizados una sola vez antes de ser descartados (UNEP, 2018).

La contaminación por plásticos de un solo uso es una problemática de carácter mundial, que comienza desde que el material se extrae y se produce por parte de la industria petrolera hasta que se desecha. Por tanto, esta problemática debe abordarse desde un enfoque de ciclo de vida, que comience con la reducción de los desechos plásticos lo que implica disminuir el uso y consumo.

Son como una plaga creada por el hombre …

Los plásticos de un solo uso no se biodegradan en condiciones naturales. Es decir, no hay ningún organismo en la naturaleza que pueda destruir las cadenas químicas de los polímeros que componen estos elementos. Adicionalmente, en el mundo sólo se ha reciclado el 9 % de todos los plásticos producidos por la humanidad (OECD, 2018) y no todos los plásticos pueden reciclarse. Aquellos que sí pueden someterse un número de veces limitado a ese proceso.

Actualmente, se estima que hay más de 150 millones de toneladas de desechos plásticos en los océanos (Jambeck et al., 2015) y cada año sumamos entre 8 y 13 millones de toneladas más.

¿En Colombia cómo estamos?

En Colombia se consumen aproximadamente 1’250.000 toneladas de plástico anualmente (Greenpeace, 2018). El 93 % de los plásticos de un solo uso no se recicla (Procuraduría General de la Nación, 2018). Nuestro porcentaje de responsabilidad extendida del productor es del 30 %, lo que quiere decir que los productores no están en obligación de reciclar el 70 % de su producción (CONPES 3874, 2016).

Adicionalmente, el 80 % de la contaminación marina (por todo tipo de residuos) proviene de tierra firme (Jenna R. Jambeck et al., 2015).

En Color de Colombia nos preocupan mucho los 47 municipios costeros en Pacífico y Caribe …

Ha habido un incremento drástico en los últimos años en la acumulación de desechos flotantes en playas y otros ecosistemas de los municipios costeros del país, como los manglares. Más del 50 % de estos residuos está constituido por residuos plásticos (INVEMAR, 2004).

Ahora, el 90 % de las playas de la costa Atlántica están contaminadas por microplástico (partículas de 5 mm de diámetro) (INVEMAR, 2017).

Para el Pacífico, se ha encontrado que los macroplásticos (fragmentos de mayor tamaño) tienen mayor presencia en las playas de Buenaventura y superan los estándares de otras playas del mundo son: icopor (poliestireno), fragmentos, y tapas plásticas (UNAL, 2019).

¿Cómo afecta la economía la contaminación por plásticos?

En los municipios costeros del país, la contaminación marina por plásticos de un solo uso no sólo afecta el sector pesquero, ya que múltiples especies marinas se encuentran contaminadas con microplásticos y diversos aditivos químicos; sino también al turismo costero que representa el 5 % del PIB a nivel mundial (ONU, 2015).

En Colombia, esta actividad corresponde al 6,9 % del PIB (Dinero, 2018), por lo que es preocupante que, en zonas costeras de Colombia, tanto del Pacífico como del Caribe, se hayan podido encontrar hasta 8.000 microplásticos por litro de agua y 1.000 microplásticos por metro cuadrado de playa (Semana Sostenible, 2019).

Y la institucionalidad ambiental es débil en los municipios costeros …

Los sistemas de gestión de residuos sólidos en estos municipios cuentan con múltiples deficiencias.

Según el DNP (2017), el 55 % de los municipios costeros del país disponen sus residuos sólidos en rellenos sanitarios, el 8 % en celdas transitorias, el 26 % en botaderos a cielo abierto y el 8 % vierten directamente sus residuos en cuerpos de agua naturales, que posteriormente se convierten en basura marina que se acumula en playas, manglares y fondos afectando los ecosistemas.

Definitivamente hay que proponer algo sostenible para los planes de desarrollo territoriales 2020-2023.

Así es. Y los municipios, alcaldes y concejos sí pueden tomar medidas.

Seguiremos informando.

 

Imagen: Cortesía MarViva