Las becas INL de la Embajada de EE.UU. han aumentado la diversidad en la suboficialidad y la oficialidad de la Policía y la Armada, y son una aspiración para el Ejército Nacional y la Fuerza Aérea de Colombia, se dijo en En vivo extra con Coronel de Incorporación de la Policía y altos oficiales afrocolombianos de la Reserva Activa de la Policía y el Ejército.

La Jefe del Área de Selección del Talento Humano, DINCO, de la Policía Nacional, Coronel Claudia Susana Blanco, y dos altos oficiales de la reserva activa: Luis Alberto Moore Perea, Brigadier General de la Policía, y Alfonso Otto Quiñones Arboleda, Coronel del Ejército, hablaron sobre inclusión y diversidad en las Fuerzas Militares y la Policía.

Estas fueron las respuestas en vivo a la periodista Katerin Panesso. **

Para contextualizar, ¿cuántos uniformados tiene la Policía Nacional en cada categoría?, ¿cuántos cupos se abren cada año por Escuela y cuántos aspirantes se presentan?

Coronel Claudia Susana Blanco: En la actualidad somos un promedio de 139 mil hombres y mujeres al servicio de la patria, de la seguridad ciudadana. En este momento, incluso, nos encontramos en convocatoria abierta, invitando a todos nuestros jóvenes para que participen. Tenemos nuestras escuelas esperándolos para que inicien su proceso de formación.

Estamos activos en este proceso de incorporación, iniciando con la etapa de preinscripción, tenemos 30 mil jóvenes haciendo su proceso con ese deseo de ingresar a la Policía Nacional.

Durante su carrera en la Fuerza, ¿qué cambios pudo observar en la composición social, regional y racial de los suboficiales y los oficiales?

General Luis Alberto Moore: cuando estuve en la Escuela General Santander, el único negro aspirante a oficial que había en ese momento era yo. Esa participación de nosotros los afros, los negros, dentro del proceso de la oficialidad es una participación minoritaria.

En la Escuela Gonzalo Jiménez de Quesada, donde están nuestros suboficiales, la participación era un poco más alta, pero de todas formas seguía y sigue siendo muy limitada para las personas de nuestra raza.

Yo creo que si bien el proceso ha ido mejorando, todavía falta mucha participación de nosotros porque de estos 139 mil miembros activos, hombres y mujeres, de la Policía Nacional, yo creo que no hay un solo general ni coronel que represente nuestra raza dentro de los designios como oficiales altos de la Policía Nacional.

Coronel Alfonso Otto Quiñones: el coronel Alfonso Quiñones Arboleda es un ciudadano de Tumaco, Nariño, totalmente afrocolombiano y del Pacífico. Fueron tres décadas de servicio a la patria como oficial del glorioso Ejército Nacional.

Me remonto a la década de los 80, cuando no había referentes de la afrocolombianidad en la oficialidad de nuestro Ejército, esto impacta nuestra sociedad de tal forma que nuestros jóvenes no tienen un espejo o un referente, y eso implica un desbalance en esta Colombia diversa.

Lo que apuntaba mi general de esa minoría tan significativa continúa de manera visible, de tal forma que, si hemos ganado espacios, es gracias a la decisión individual, a ese afán de irnos abriendo puertas en un país como el nuestro.

Cuando uno es un servidor de la patria, como soldado, militar o policía, se debe a su pueblo. Qué bonito sería que esta población afrocolombiana, y la misma población en general de Colombia, mire a los hombres y mujeres de raza negra con las insignias de la oficialidad de las fuerzas militares y de policía. En eso estamos, vamos ganando espacios, pero es importante que haya visibilidad.

¿Cuáles son los cinco departamentos de los cuales se presentan más aspirantes a la Escuela de Oficiales y qué dificultades ha identificado la Policía Nacional para incorporar jóvenes a las escuelas de Oficiales y suboficiales provenientes de los departamentos que menos aspirantes aportan?

Coronel Claudia Susana Blanco: en la Dirección de Incorporación, con nuestra política institucional de nuestro señor director, vemos muy claro hacer todo un programa de estrategias comunicacionales que nos han permitido generar cobertura a nivel nacional, nos ha permitido llegar a los diferentes rincones del país.

Incluso, tenemos más de 50 grupos pertenecientes a la Dirección de Incorporación con la capacidad de llegar a estos rincones. Actualmente tenemos una presencia más grande de aspirantes en ciudades como Bogotá, Barranquilla, Cúcuta, Medellín, Ibagué y Cali, son los sitios donde en la actualidad se presentan mayor cantidad de aspirantes, sin decir que no se genere cobertura a nivel nacional.

Muchos hogares y jóvenes de la población afrocolombiana no ven como una opción la carrera militar por los costos y por la desconfianza ante prejuicios raciales o racismo desde el propio proceso de selección. ¿Usted qué les dice a esos padres de familia e hijos?

General Luis Alberto Moore: Pasaron 35 años de servicio a esta gran institución que me dio absolutamente todo, mi Policía Nacional. Desde el principio cuando ingresé en el año 1977, sabía que tendría dificultades. Si bien estamos en un país multiétnico, multicultural, esos espacios de los que hemos estado hablando no se nos han dado totalmente.

Al ingresar a la Escuela tuve dificultades, así como las han tenido muchos de los que han pasado por las escuelas de formación. Pero lo importante es que dentro de esa situación, podamos dar de cada uno lo mejor. Somos muy visibles dentro de ese grupo pequeño que se puede dar en las escuelas, entonces se trata de procurar esos espacios.

Y esos espacios se logran siendo buen estudiante, buen deportista, buena persona, un ser humano íntegro. Así como otros lo hemos logrado, esas personas que tienen aspiraciones, talante, disciplina, deseo de superación y de salir adelante, seguramente lo podrán hacer.

Y en cuanto al tema económico, precisamente para eso están las becas que dan tanto el gobierno colombiano como el gobierno americano, para que esa carga económica que es alta para nuestros jóvenes que no tienen los recursos suficientes, puedan acceder a esas becas y puedan cumplir sus sueños.

Coronel Alfonso Otto Quiñones: es un hecho que en nuestras regiones la pobreza es un factor determinante, pero no es el factor decisivo para no aspirar a la realización de sueños. La carrera militar o policial es ante todo vocación, es algo tan serio que en ella se nos pasa la vida.

Esto es tan serio que nuestro servicio es por la protección de la vida, honra y bienes de nuestros conciudadanos; por la salud y seguridad de la patria misma. Por lo tanto, al vincularse a las escuelas de formación, el punto de quiebre no puede ser ni la parte económica ni la parte racial, ante todo es vocación.

La carrera militar es difícil, pero la fortaleza está en la vocación, en la disciplina. Esto implica abnegación y sacrificio, ese sería el mensaje para los padres y para estos jóvenes: que haya vocación, decisión y que exista todo el apoyo de las familias para lograr los cometidos.

¿De qué modo las Becas INL de la Embajada de EE.UU. han permitido una mayor diversidad en las escuelas de suboficiales y oficiales de la Policía Nacional, cuáles son los números?

Coronel Claudia Susana Blanco: este convenio ya tiene un tiempo aproximado de 10 años. Empezó con apoyo a 150 jóvenes y hoy en día son cerca de 6 mil jóvenes que se han hecho profesionales de policía a través de este convenio.

Este programa genera cobertura y se hace de manera coordinada con la Policía Nacional, a través de la Dirección de Incorporación, buscando llegar a las diferentes regiones, como la región pacífica, amazónica, caribe y las zonas rurales; buscando llegar a estas poblaciones indígenas, raizales y campesinos.

Realmente el proceso de selección que se hace es incluyente, buscamos generar cobertura y llegar a todos esos rincones. Buscamos esos jóvenes que se ajusten a estos perfiles, a estas competencias que son requeridas por la Policía Nacional.

El servicio que nosotros prestamos es contribuir a la seguridad ciudadana, garantizar la convivencia, por eso necesitamos de esos jóvenes que tengan todo ese deseo y ganas de servir, justo allí es donde llega este convenio y ayuda a que los sueños de estos jóvenes se cumplan.

Con cierta frecuencia se presentan incidentes de abuso o brutalidad de agentes de la Policía Nacional con ciudadanos de determinadas características. ¿Está fallando la formación en derechos humanos y qué podría hacer la institución al respecto?

General Luis Alberto Moore: yo lo primero que creo es que, infortunadamente, nuestra sociedad ha perdido valores, eso tan importante que le enseñaron a uno desde su hogar: el respeto por el semejante, por la autoridad, por cada una de las personas.

Cuando vemos que ese policía quiere prestar un mejor servicio y lo primero que encuentra es una agresión por parte de ese ciudadano, muchas veces vemos que ese policía lo que hace es defenderse, antes de aplicar esa autoridad que el mismo Estado le ha proporcionado.

Pero lo que sucede en las redes sociales es que muestran a ese servidor que se está defendiendo como un agresor, un violento, entonces yo llamaría la atención a que la gente también sepa que un policía es una autoridad del Estado, que es un servidor que está para protegerlo de cualquier otra situación.

También hay momentos donde se presentan abusos de algunos, que considero pocos de estos servidores, y la institución misma hace todas sus investigaciones, sanciona cuando hay que sancionar. Creo que la formación que tenemos se basa en esos principios de respeto, consideración del ciudadano, ayuda y protección.

Yo considero que tenemos que mirar otras cosas que se pueden dar antes de que ese policía o esa autoridad actúe de una forma contraria. Hay que considerar también el respeto mutuo y el respeto por la autoridad.

¿Qué podría hacer el Ejército Nacional para aumentar la inclusión y la diversidad en la Escuela de Oficiales?

Coronel Alfonso Otto Quiñones: la pregunta no es tanto lo que el Ejército puede hacer, sino nosotros por el Ejército. Precisamente, estas becas INL de la Embajada de los Estados Unidos llevan 10 años. Aplican para nuestra Policía Nacional y Armada, pero es la oportunidad de solicitar que estas becas se amplíen, den el paso para cobijar también a los aspirantes a la Escuela Militar de Cadetes General José María Córdoba y a los aspirantes a la Escuela de Suboficiales Sargento Inocencio Chincá.

Pero el Ejército sí puede hacer más visibles a sus militares afrocolombianos. En este momento contamos con un significativo número de oficiales y suboficiales afrocolombianos en las filas. Esos hombres y mujeres tienen que ser bandera, tienen que ser punta de lanza, tienen que ser la publicidad, para que los aspirantes se sientan representados, para que digan: si ellos pueden, nosotros también.

El sol del señor general Moore no se apaga, sigue alumbrando y brillando el camino para los demás aspirantes. Las estrellas del coronel Quiñones siguen brillando en el firmamento de todo el Pacífico y todo el territorio colombiano para que sean guía para las nuevas generaciones, a los relevos que necesitamos en nuestras Fuerzas Militares y de Policía.

**Los oficiales estuvieron en el En vivo «Fuerza Pública: inclusión y becas» de magazine tv «Cuarentena musical Pacífico y Caribe» (17 de julio). Puede revivir la conversación aquí.

Editó: Juan David Morales, jefe de redacción de la plataforma de comunicaciones de Color de Colombia.

**Trazador misional de esta publicación de Fundación Color de Colombia: Línea estratégica 1: Reconocimiento e integración. Iniciativa 1: Inclusión simbólica y diversidad en la historia y la sociedad. Proyecto: Apoyo a inclusión y diversidad en Oficialidad de FF.MM. y Policía (desde 2011).