El domingo 28 de mayo, el país le dijo «no más» al uribismo. Más de 13.000.000 colombianos apoyamos el cambio en primera. Ya no habrá mas uribismo en la próxima papeleta de votación, como muchos querían. Sin embargo, 5.500.000 de colombianos dijimos: sí, queremos un cambio pero no un cambio que quiera atentar contra la libre empresa y la propiedad privada, tampoco un cambio que «pacte» con los mismos políticos de siempre.
Veía celebrando a seguidores de Petro, felices, pero ahora a se ha iniciado una campaña de desprestigio con cuanta mentira se les pase por la cabeza del ingeniero Rodolfo Hernández. El mismo que da un discurso de agradecimiento a quienes votamos por él, desde la cocina de su casa. ¡Es clasista!,  ¡Es machista! ¡Todo fue una estrategia de marketing!, frases propias de los políticos tradicionales, los Roy, los Benedetti, los Petro, sacando cualquier cosa para acabar con el oponente. Y esos quienes piden el cambio, les están haciendo el juego, se comportan igual que ellos.
Fuente: El Tiempo
Muchos siguen con indignación, con inconformismo. Ahh, pero es que: «si no es Petro, el país se va acabar». Si, así entre queja y queja se la pasan aquellos que están esperando que alguien llegue a darles subsidios y cosas gratis.
Cuando toda Colombia pase de la indignación al agradecimiento, veremos no sólo el cambio en Colombia sino también en cada casa, trabajo y empresa de los colombianos.
Es hora de dejar la queja y el inconformismo. A esos colombianos que votaron por el cambio que representa Petro, quien logró más de 8 millones de votos, les digo: trabajen, vayan a las calles y plazas, vendan sus ideas con respeto y no diciendo que los que no votamos por Petro somos ignorantes o inocentes.
Así se gana en democracia. De igual forma, los que votamos por el ingeniero haremos lo propio porque vamos a ganarles en segunda.