La modificación en el rostro de ciertas características étnicas es una tendencia en el campo de la cirugía plástica que cada vez se vuelve más popular. Esto se ve en algunas personas que acuden a procedimientos quirúrgicos, buscando obtener una apariencia occidental, caucásica o europea.
Procedimientos como los implantes de mentón, el rediseño del contorno facial sin pómulos grandes y algunos tratamientos estéticos para aclarar u oscurecer la piel son algunos de los más solicitados por estos pacientes.
Al respecto, en un artículo de ‘The New York Times’ se dice que en Estados Unidos las cirugías plásticas para modificar algunas características raciales son famosas entre la comunidad de inmigrantes. Por ejemplo, algunos chinos acuden a la cirugía de nariz para remodelar su forma, con el fin de que esta se vea más fina y respingada, mientras que los coreanos acuden al bisturí para adelgazar su mandíbula y suavizar su expresión.
Sin duda alguna, uno de los procedimientos de modificación de rasgos étnicos por excelencia es la remodelación de párpados asiáticos para que que los ojos se vean más grandes, el cual se logra creando un doble pliegue en cada párpado.
Con respecto a la cirugía de párpados doble, «La definición de hermosura no es el rostro asiático estándar, sino algo más parecido a los rostros caucásicos». Asegura el Dr. Kim Byung-gun, jefe máximo de la clínica más importante de cirugía plástica de Seúl en Corea del Sur, en entrevista para CNN.
La modificación de rasgos étnicos mediante la cirugía plástica, podría considerarse como una tradición para los inmigrantes de ciudad, según Victoria Pitts, profesora de sociología en la Universidad de Queens, debido a que «desde hace un siglo muchos judíos se sometían a la cirugía de nariz, y los inmigrantes irlandeses se operaban las orejas en un intento de obtener una mirada más americana. Aquí se encuentra entonces una relación entre estas operaciones y algunos problemas de asimilación».
La profesora Pitts también considera que fenómenos relacionados con la cultura pop norteamericana, por ejemplo, han influido mucho en cómo algunos inmigrantes y sus hijos creen que deberían ser físicamente. A esto hay que añadirle, por supuesto, la televisión y reality shows de cirugías plásticas como «Bridalplasty», que han animado a muchas personas a acudir al bisturí.
Sin embargo, este tipo de cirugías plásticas no sólo se presentan en el caso de inmigrantes establecidos en países occidentales. También se ha visto que en China muchas personas deciden someterse a operaciones como la rinoplastia, por supuesto a la cirugía de párpados y en el caso de las mujeres, al aumento mamario, con el fin de que estos nuevos «atributos» físicos los ayude a conseguir un empleo, como se muestra en un informe al respecto, realizado por TVE.
Uno de los casos que ha atrapado la atención de los medios es el de Lee Min-kyong, una niña que a sus 12 años se sometió a la cirugía de párpados dobles u ojos rasgados no porque ella lo pidiera, sino porque su mamá Jang Hyu-hee, consideraba que esto era lo mejor para su hija como lo aseguraba días antes a la operación de la niña en una entrevista para CNN: «Yo quiero que se la haga porque creo que va a ayudarla. Esta es una sociedad en la que tienes que ser bonita para salir adelante…»