Tal vez muchos adultos mayores no tengan que envidiarles nada a los Stones, porque tienen tanto talento y vigor como ellos, sin embargo algunos se deprimen en el olvido sin haber conocido notas musicales que les puedan alegrar el alma, al menos un poco.

 

El martes pasado estuve en un hogar Geriátrico, tenía que hablar con su director, mientras lo esperaba me puse a observar a los abuelos, algunos de ellos leian, caminaban, mientras otros escuchaban música popular de una rockola que tiene un monitor «incrustado» en un mueble gigante, «modernas», manejadas por un computador, de esas que se encuentran en algunas tiendas de barrio. No puedo negar mi tristeza al ver a los ancianitos en ese estado y no quiero decir mal cuidados por el contrario la atención que brindan es buena, lo digo porque no me gustaría llegar a esa edad y tener que estar lejos de mis seres queridos y tal vez como en varios casos, abandonados sentimentalmente por ellos mismos. Pero me deprimió más, tener que verlos escuchar ese tipo de música donde la más animada fue una canción llanera, a mi modo de ver no debe ser fácil estar padeciendo algún tipo de enfermedad, estar en un lugar lejos de casa, o simplemente viviendo los últimos días de vida, oyendo líricas tristes que dicen «me dejaste…. tengo el corazón roto….me queda poco tiempo cerca de ti….» en fin;  posiblemente sea del gusto de la mayoría de los abuelos por aquello de nuestra idiosincrasia y cultura. Me puse a pensar si no sería mejor animar sus corazones con melodías que le competen a esta Autopista, obviamente no podríamos a estas alturas rodarles un tema de Lamb Of God o de una banda de Black Noruego, no creo que puedan sacudir sus cabezas a ese ritmo, pero si por ejemplo, mover sus cuerpos adormecidos por el paso del tiempo, con canciones como Jonnny B. Goode de Chuck Berry, aunque no puedan realizar el popular paso del pato, bailar al ritmo del piano incendiario de Great Balls of Fire , de Jerry Lee Lewis, o porque no, canciones con menos movimientos de cadera pero si para reposar y dejarse llevar, temas preciosos como Something de The Beatles para recordar el amor de la vida, o hasta el cielo, con The Great Gig in The Sky de Pink Floyd, sin llegar a que sea definitivo, claro.

 

Quiero que vean el siguiente video para poder entender de lo que hablo, no es permitido continuar sin hacerlo, perderán el pase de conducción por esta carretera.

 

                    

 

Inquieto por el asunto, me puse a investigar y me encontré con varias perlas, como la anterior video, ejemplo de cómo hacer rock sin morir en el intento o falleciendo en el, pero felices, como le sucedió a uno de estos abuelitos mientras grababan las canciones. The Zimmers es una banda que supera los 3000 años, sumando las edades de todos sus integrantes, ellos bajo la idea de su precursor el periodista Tim Samuels, decidieron grabar a su estilo canciones de The Who, Queen y hasta Prodigy, pero no a lo «malditasea» se fueron para los mismísimos estudios de Abbey Road, si señores, como lo leen, en voz de Alf Carreta de 90 años, los 40 ancianitos lograron llegar a puestos altos en los listados del Reino Unido, la noticia quedo registrada en varios portales.  Tiene su propia pagina donde se pueden ver más videos y una de las caratulas de los Beatles adaptada a lo Zimmers.

 

 

En España un Grupo de Rock/Grunge de nombre Dover, premio a Gertrudis, Angelina, Ángel y Alberto, residentes en un Hogar geriátrico de Alcañiz, por participar en un concurso para versionar la canción ´Seranade´, éxito de la banda, los cuatro adultos mayores realizaron un video-clip en versión libre, apoyados en Diego Pastor, joven que los inscribió, el video fue uno de los más votados.

 

                     

 

Posiblemente aquí no se llegue tan lejos como para tener una banda o filmar una película, pero estoy seguro de lograr alegrar a nuestros «viejos» con algo más que música popular, no solo rock, también sonidos que alimente su espíritu, más constructivos, revivir los sentidos inyectándoles inquietud, o reviviendo sentimientos escondidos por la ausencia de cariño, rejuveneciendo la risa y esos huesos tallados por el reloj imparable. La tarea puede empezar por los que se encuentran a nuestro lado y para evitar tener que hacerlo tarde podemos empezar por nuestros hijos. Yo empecé a pensar como implementarlo hace dos días.

 

 Permanezcan Rockosos