Jamás habrá paz en un país que carece de  justicia.

Colombia  lleva más de 40 años en guerra, actualmente se encuentra en búsqueda de la paz, pero como sociedad se debe entender que sí no se logra una justicia real cualquier esfuerzo se quedará en el papel. No podemos seguir  permitiendo que en nuestro país se den irregularidades  y que   inocentes sigan cargando cruces injustas por diferencias políticas, ideológicas o peor aún por hechos que  no han cometido. 

El extraño caso del General Flavio Buitrago y su esposa Elba Pulido,  empezó por un aparente  problema de presuntos nexos con el narcotraficante Marcos Gil alias “el Papero” , en dicho caso se encuentran un sin número de paradojas en el proceso, por ejemplo la Fiscalía General desvinculo del proceso por enriquecimiento ilícito a la familia de Gil, incluyendo a su esposa Soledad Guio de Gil, además curiosamente decidió no entrar a investigar al reconocido empresario Pedro Gómez Barrero por negociaciones  de más de $200 mil millones de pesos pero a pesar de que están bajo los mismos argumentos – la Fiscalía- decide mantener asegurados a los esposos Buitrago Pulido.

Las diferentes pruebas presentadas por el General Buitrago y su esposa no han servido de nada para la Fiscalía, ni siquiera la declaración del mismo Marcos Gil, quien aseguró en su confesión no haber tenido relación ilegal alguna con los mismos. Es como si el mayor karma que los acompaña es haber trabajado para el ex presidente Álvaro Uribe Vélez, servicio que presto el General Buitrago por orden de la Policía Nacional.

Una Fiscalía que hace temblar la justicia, inconsistencias del proceso:

Un trato desigual, es lo que muchos perciben por parte de La Fiscalía hoy en nuestro país , lo cual es preocupante, recordemos que en Venezuela todo comenzó con la persecución política y falta de garantías para aquellos que hacen parte o por algún motivo trabajaron  con  la oposición.

En el mismo proceso se habla de enriquecimiento ilícito, pero el excedente que se encuentra ratifica que los ingresos de los esposos siempre fueron los mismos y el incremento es debido a  la valorización de las propiedades,  que como se sabe es un tema de catastro y es algo natural que ocurre con todo aquel que tiene inmuebles, pero esto tampoco ha sido tenido  en cuenta durante el proceso. Si eso no se tiene en cuenta, ¿Cuantos colombianos hoy podrían ser juzgados por enriquecimiento ilícito?

A esto se suman falsos testigos, como es el caso de las declaraciones de alias MACACO hoy expulsado de justica y paz,  y sus primos en este proceso, donde la Fsicalia no hizo ni el minimo esfuerzo en verificar circunstancias de modo tiempo y lugar, dandole plena credibilidad a sus afirmaciones  e imponiendo medida confiscatoria de la  libertad al General Buitrago.

Los medios de comunicación muchas veces se unen a injusticias por el afán de una “chiva” sin saber el daño que pueden causar a familias, al honor pero por encima de todo a la dignidad de una persona. Así como hace unos años ocurrió con Sigifredo López, al que la justicia no había juzgado pero los medios sí.

Estamos en un momento decisivo de la historia de un país que ha padecido en carne propia el dolor de una guerra pero ahora lo más importante es rescatar nuestra justicia, no importa de qué corriente ideológica sea cada uno, la justicia no debe conocer color político. Es válido ser  anti uribista, anti petrista y anti santista pero no anti justicia. ¡Jamás habrá paz en un país que carece de  justicia!

Twitter: @CatalinaSuarezB