Por: Andia Chaves Fonnegra
Al terminar una maestría en biología marina en la Universidad Nacional de Colombia tuve claro que mi pasión y mi futuro era la investigación. Sin embargo, los únicos empleos relacionados con biología o ciencia que existían en los periódicos del país eran para profesor en colegios. En internet y por medio de listas en biología, la mayoría de trabajos en investigación eran en el exterior y requerían nivel de doctorado. Me di cuenta entonces que con una maestría en ciencia estaba sobre-calificada para ser profesora de colegio en Colombia, pero que aún me faltaba educación para poder ser investigadora. Así que decidí continuar mi educación y busqué opciones para hacer un doctorado. Inicialmente consideré continuar un doctorado en la Universidad Nacional, pero mis mentores me recomendaron abrir el horizonte, aprender nuevas tecnologías que aún no llegaban al país y aprender a publicar artículos científicos en inglés. Por lo que decidí hacer un doctorado en el exterior en Nova Southeastern University (NSU), Estados Unidos. Específicamente me enfoqué en adquirir experiencia en genética poblacional, biología reproductiva y modelamiento de interacciones en arrecifes de coral. Para esto apliqué al crédito-beca de Colciencias con la esperanza de regresar al país a hacer ciencia y traer nuevas técnicas y conocimiento.
El programa de crédito-beca de Colciencias fue muy bueno, en especial el “Latin American Scholarship Program of American Universities” (LASPAU), la organización que maneja el programa desde afuera y que media entre ICETEX, Colciencias y los becarios, ya que hace el proceso más eficiente y accesible. Este programa me permitió terminar el doctorado, adquirir herramientas para hacer investigación, contribuir al avance de la ciencia y de la conservación de recurso naturales, y comenzar a educar nuevas generaciones como Profesor Adjunto e Investigador Postdoctoral en NSU.
Durante el doctorado comencé a buscar opciones para regresar a Colombia y vincularme a alguna universidad o centro de investigación. Apliqué tanto a las becas postdoctorales de Colciencias “Es Tiempo de Volver”, como a dos plazas para profesor, una en la Universidad del Magdalena y otra en La Universidad Nacional de Colombia. En el proceso de aplicación, encontré que los requisitos y la carga laboral para trabajar como profesor investigador no se ajustaban a mis objetivos, es decir la mayoría de horas estaban enfocadas en preparar y dictar clases, y muy pocas horas para obtener los recursos necesarios para hacer investigación. Sin embargo, las Universidades planteaban expectativas altas en cuanto a capacidad de producción en investigación.
No salí elegida en ninguna de las oportunidades laborales a las que apliqué. Ante estas circunstancias, decidí tomar la opción de hacer dos años de postdoctorado antes de regresar al país, tiempo permitido por del crédito- beca de Colciencias antes de empezar a realizar los pagos o tener trabajo en Colombia. He usado este tiempo para buscar opciones laborales y enviar aplicaciones, pero aún me encuentro como investigadora post-doctoral. Estoy a la expectativa de que nuevas convocatorias se abran.
¿Por qué es difícil regresar a Colombia a hacer investigación, es decir por qué los científicos colombianos se quedan en la diáspora?
Las razones por las cuales muchos científicos colombianos no regresan a Colombia a trabajar en ciencia y educar nuestras nuevas generaciones son varias. La primera es la falta de oportunidades laborales para científicos que retornan con nivel de doctorado y post-doctorado al país. La apertura de empleos en institutos de investigación como en universidades no ocurren anualmente, sino que pueden ocurrir cada cinco años o más. Específicamente en mi campo laboral encontré dos oportunidades en el 2014 y una en el 2015. El Concurso Docente 2015 de la Universidad Nacional abrió cuatro plazas en Biología y el de la Universidad del Magdalena en el 2014 abrió cinco, pero en áreas específicas, de las cuales mi perfil se ajustaba solo a una en cada convocatoria. Simultáneamente hay muchos profesionales con doctorado aplicando, y varios de ellos llevan años esperando a que se habrá la oportunidad mientras dictan algunas clases en la misma Universidad como profesor por contrato, lo cuál genera un alto nivel de competencia para cada plaza. Así que hay que hacer fila, una fila que puede tomar varios años, mientras uno adquiere todo los requisitos necesarios para obtener el mejor puntaje. A menos que la universidad abra plazas nuevas que se ajusten exactamente al perfil que uno tiene.
Segundo, el proceso de convalidación del título doctoral es una barrera burocrática, que solo hasta hace unos meses ha pasado a ser un proceso “on-line”. Lo que retrasa y pone en desventaja a los profesionales que están en el exterior. Es un paso pequeño que resulta ser más complicado de lo esperado, una pared de piedra de la que nadie tiene información de nada, a menos que uno este en Bogotá. Complicado si uno está trabajando fuera del país. Hasta solo hace unos meses, este proceso ha sido automatizado por internet: http://convalidacion.mineducacion.gov.co/newcs/validacion.asp?idusuario=.
Debido a que los científicos no encuentran opciones laborales, y a que los términos de convocatorias como la de Colciencias obligan a pagar en caso de no regresar y estar vinculado a una entidad reconocida por la Plataforma Scienti de Colciencias, muchos deciden conseguir trabajo en el exterior. Volver sin trabajo a Colombia no condona la beca, y devolverse sin empleo a pagar una deuda de millones de pesos no tiene sentido alguno.
Sumado a esto, el nivel de financiación para ciencia en el país es relativamente bajo comparado con otros países [1], y las convocatorias de los diferentes programas no se abren anualmente o de manera constante, lo que reduce las posibilidades de hacer investigación en la mayoría de universidades e instituciones. Volver y educar las nuevas generaciones es muy gratificante y no tiene precio. Pero regresar y saber que las posibilidades de investigación son mínimas no es un opción para muchos científicos que llevan toda la vida estudiando y en un proceso de investigación que no solo es competitivo, sino que requiere mucha dedicación, esfuerzo y sacrificios. En la mayoría de universidades en Colombia conseguir el espacio de un laboratorio puede tardar 5 a 10 años, y comenzar a hacer investigación o tener los equipos necesarios y financiación el mismo tiempo o más. Excepto en universidades privadas en las que la posición laboral va de la mano con dinero para investigación de la propia universidad o entidad. Sin embargo, casi ninguna universidad privada en Colombia ofrece esta oportunidad para vinculación inicial como profesor asistente (primer nivel en la carrera académica una vez adquirido el doctorado).
Aunque el programa doctoral de Colciencias en el exterior ha crecido y se ha fortalecido a través de los años, sus programas para ciencia dentro del país o programas de retorno de sus científicos no han progresado de la misma manera. Hasta solo el 2014, Colciencias abrió su primer programa postdoctoral “Es tiempo de volver” con el objetivo de traer de vuelta los “cerebros fugados” o aquellos científicos que se han quedado en “la diáspora” debido a la imposibilidad de retornar a Colombia a trabajar. Sin embargo, este programa resultó mal estructurado. Primero, la convocatoria fue muy amplia y mezcló investigadores de todos los niveles, incluyendo tanto recién graduados de programas doctorales, como personas con más de 20 años de experiencia en investigación en el exterior. Esto no permitió una competencia real y de acuerdo a los diferentes niveles de investigación. Normalmente las becas postdoctorales en otros países son categorizadas de acuerdo al nivel de investigación después del doctorado: 1) para investigadores recién graduados del doctorado, 2) con menos de 5 años de experiencia postdoctoral, 3) con más de cinco años de experiencia en investigación luego del doctorado. Así mismo, las condiciones de las becas post-doctorales (pagos y tiempo para comenzar) no fueron cumplidos en todos los casos. Por último, este programa no ha sido reabierto o reestructurado de manera adecuada, eliminando una posibilidad de retorno (y de condonación de las becas doctorales de Colciencias) para aquellos que como yo, nos encontramos aún entre “la espada y la pared”: volver sin trabajo a Colombia a pagar una deuda a ICETEX-Colciencias, o quedarse en el exterior (en la diáspora) e igual pagar la deuda.
¿De qué manera podemos ampliar la ciencia en Colombia y el retorno de los científicos que quieren regresar al país?
A continuación doy algunas sugerencias que en mi opinión pueden mejorar el desarrollo de la ciencia y permitir que se beneficien tanto los científicos trabajando actualmente en Colombia como los que están en el exterior.
Lo primero es incrementar el producto interno bruto destinado por el gobierno para ciencia y tecnología en Colombia. Si seguimos destinando menos del 1% del producto interno bruto del país (En el 2013 = 0.23% [1]), nunca vamos a crecer en aspectos de tecnología y conservación de recursos naturales, y como consecuencia seguiremos copiando los métodos y tecnología ajenas, que son más costosas y que muchas veces no se adecúan a las necesidades específicas en Colombia.
También, es necesario incrementar el número de convocatorias de Colciencias al igual que el dinero disponible en universidades para investigación. Primero hay que dar a los investigadores en Colombia la posibilidad de financiar sus grupos de investigación. Con esto sugiero que los científicos en Colombia puedan, a través de convocatorias de proyectos, incluir investigadores post-doctorales y tener financiación para proyectos a más de 5 años. De ésta manera se puede traer de vuelta a científicos recién graduados de doctorado o dentro de los primeros cinco años de postdoctorado. Esta estrategia permitiría que los científicos en el exterior como los grupos de investigación en Colombia se beneficien y contribuyan en conjunto para el desarrollo de la ciencia en Colombia. Igualmente se podrían fortalecer diferentes áreas de investigación. Los investigadores post-doctorales entrarían directamente a trabajar bajo el investigador principal de cada proyecto financiado y su salario se realizaría a través de la institución que recibe el dinero de Colciencias para la ejecución de los proyectos.
A continuación habría que pensar en abrir convocatorias específicas de acuerdo a la experiencia laboral de los científicos. Normalmente los científicos que llevan más de 10 años por fuera no están interesados en ser investigadores post-doctorales, sino que quieren establecer sus propios laboratorios en Universidades o institutos, o vincularse a grupos de investigación que requieran de alguien con experiencia. Hasta que no se estructure adecuadamente los niveles de experiencia en investigación, las convocatorias serán un sancocho, y no se puede hacer el uso apropiado de los potenciales de cada categoría y tipo de investigadores.
Finalmente se podría abrir un programa de colaboración entre científicos en Colombia y científicos en el exterior, y con esto permitir que los científicos en el exterior puedan condonar sus becas doctorales de Colciencias por medio de investigación conjunta y de proyectos con investigadores en el país. Por ejemplo, escribiendo propuestas de investigación a entidades tanto en Colombia como en el exterior interesadas en financiar proyectos en Colombia. Esto no solo permitiría ayudar al desarrollo de la ciencia en Colombia sino también permitiría el intercambio de tecnología dentro y fuera de Colombia; al igual, las publicaciones científicas y nuevas tecnologías podrían incrementar en conjunto, lo cual beneficiaría a ambas partes. Muchas veces los científicos en Colombia pierden oportunidades para conseguir dinero en el exterior. Las razones pueden ser falta de información de dónde están estas oportunidades, o porque las aplicaciones son en otro idioma diferente al español, o porque el proceso de aplicación es muy diferente al proceso en Colombia. Es aquí dónde tener a alguien en el exterior se vuelve importante para conseguir recursos económicos que finalmente entren a Colombia desde afuera. Actualmente Colciencias no permite la condonación de becas a través de este sistema, pero esta es una opción para hacer ciencia que beneficie a Colombia, sin importar en que parte del planeta se encuentren los investigadores colombianos.
En conclusión, si queremos que la ciencia en Colombia avance y que nuestros científicos vuelvan a casa, primero debemos ayudar a que los grupos de investigaciones actuales en Colombia se fortalezcan y reciban suficiente financiación. Si hay financiación para hacer doctorados en el exterior ¿Por qué no tenemos el mismo nivel de recursos para su regreso? Simultáneamente, tenemos que considerar que la ciencia y la adquisición de recursos se puede lograr desde adentro o fuera de Colombia. Si los científicos colombianos no consiguen la opción de volver a trabajar en Colombia, se debe abrir la oportunidad de que puedan hacer crecer la ciencia en Colombia y puedan condonar sus becas desde el exterior.
Referencias
[1] http://data.worldbank.org/indicator/GB.XPD.RSDV.GD.ZS