Estábamos todos esperando a que un híbrido de Transmilenio llegara al paradero. El lugar es en la 134 con séptima, y las filas (recordemos que se hacen dos o tres), mal hechas por la imposibilidad bogotana para entender que fila implica uno detrás de otro esperando a su...
Los primeros diez minutos son para estudiar el movimiento de la fila, en adelante para señalar a los cajeros, que se la pasan mamando gallo. Cuando uno ve que la fila no se mueve, nota que detrás de las seis cajas, estresados, solamente hay dos cajeros. Le pregunté a un...