Padres de familia se preguntan por los riesgos de este popular juego para celulares. ¿Hay peligro para los niños?
Por más que la tecnología no sea uno de sus temas preferidos, puedo apostar que ha escuchado, así sea de lejos, algo sobre el fenómeno de Pokemon GO, un juego para móviles que está enloqueciendo al mundo entero.
Pokémon, por si acaso lo desconoce, se trata de un videojuego y serie animada de los años 90 en la que se debían atrapar criaturas con poderes especiales (en una pokebola), para entrenarlas, evolucionarlas y enfrentarlas con otras que también han atrapado y entrenado otras personas. Quien posee varios Pokémon es un ‘Maestro Pokémon’. Hay torneos de lucha entre pokemones.
Volvamos al tema: ¿por qué hay tanta alharaca con el juego de Pokemon GO? Básicamente por tres razones.
- Por la tecnología. Para jugar, la persona debe moverse, salir, recorrer su ciudad. El juego usa el GPS del celular para mostrar cerca del jugador dónde están los pokemon y los gimnasios para ir a enfrentarse con otros jugadores.
- Por el reto. Para ‘crecer’ dentro del juego se deben capturar muchos pokemones. Además entrenarlos y evolucionarlos, lo que le da un nivel específico al perfil del jugador en la comunidad de usuarios de Pokemon GO. Es decir: a mayor nivel, mayor reputación, algo que para quien no sea fan de la tecnología y los videojuegos puede sonar tonto, pero para los fanáticos es algo muy serio y parte fundamental de la diversión.
- Por su forma de juego. Pokemon GO combina realidad aumentada, una tecnología que le permita a la persona activar la cámara del celular y ver, en su entorno real, a los pokemon, a los de sus rivales, etc. Es decir, la ‘app’ le informa al usuario cuándo hay un pokémon cerca, para que active la cámara y pueda ‘verlo’ en la calle, sobre un árbol, detrás de una puerta, etc., y deba ‘lanzarle’ una pokebola virtual y atraparlo. Al momento de pelear, podrá, desde la cámara del celular apuntando al horizonte, ver y controlar a sus pokémon durante la lucha contra los de otros.
Realmente es un juego, como podrán imaginar, muy divertido. Hordas de personas se reúnen en parques y sitios públicos, donde la aplicación crea gimnasios de enfrentamiento, para pelear con sus pokémon, por equipos, y hacerse a la ‘propiedad’ de cada gimnasio. O se encuentran por montones para ‘cazar’ pokemones en sitios donde la aplicación los guía.
Los riesgos
Se ha dicho de todo sobre los riesgos de Pokemon GO. Incluso que ladrones lo han usado para atraer víctimas. Para muchos padres y personas mayores, lejanas de este tipo de fenómenos tecnológicos, la principal preocupación es la supuesta ‘idiotización’ a que se exponen los menores (caminando como lelos mirando el celular por las calles). Y, salvo algunos tropezones y caídas, no, no es tal. Como toda moda juvenil, Pokemon GO es hoy por hoy un fenómeno, que luego de un tiempo, posiblemente, tenderá a reducir su influencia, pero que en líneas generales no le veo un riesgo psicológico o comportamental agudo para los menores. ¡Un buen día lo olvidarán! Como han olvidado al resto de cantantes, modas, lenguajes, series, juegos que alguna vez fueron ‘su máxima pasión’.
De hecho, me parece genial que un videojuego incentive la socialización 1.0, que invite a los chicos a salir, a caminar, a descubrir otras personas, etc. ¿Antes nos quejábamos de lo contrario, no?
Desde mi humilde opinión, estos son los principales riesgos que le veo a Pokemon GO:
- La descarga del juego. La ‘app’ no está disponible oficialmente en Colombia. Por lo cual, la única manera de tenerla es descargando una versión ‘pirata’ o no autorizada. Esto es un gran riesgo, pues los malos de internet están aprovechando para diseminar virus y códigos malignos, aprovechando el fenómeno, como el supuesto juego. Es posible, por tanto, que su hijo/a con tal de tener Pokemon Go, termine descargando un virus terrible en el móvil.
- El tiempo de uso. Como responsable de un menor, es importante que ponga reglas claras. Horarios permitidos de juego, ojalá con su supervisión. Acompañe a los niños a jugar (para evitar que estén por la calle sin compañía). Deles la oportunidad de experimentarlo con su guía.
- El gasto de usar la ‘app’. Pokemon GO necesita de datos móviles. También consume muy rápido la batería del móvil. Explique esto a los chicos. Seguro les espantará la idea de quedarse sin datos o batería (para otras labores aún más importantes que Pokemon GO, como Whatsapp).
- Compartir datos. Como todo en internet, explique a su hijo que lo ideal es no compartir información de identidad real en el juego. Que use un apodo sin mayores datos de su información personal real. Que no lo juegue cerca de la casa para que evite la cercanía de extraños con el hogar.
Como siempre, mi recomendación para todo padre o madre de familia es: no se aleje del tema. Descubra el juego (hay miles de videos en Youtube); lea del mismo, aprenda, entienda de qué se trata, de sus alcances, explíquele los riesgos a los menores, evite que descarguen aplicaciones ilegales o potencialmente peligrosas.
¿Dudas adicionales? No dude escribirme a mi perfil de twitter @JoseCarlosTecno. Y compartir este contenido si le pareció interesante. ¡Gracias!