… Es el PRECIO de los JUGUETES…

“Una HISTORIA como la RODOLFO GUILLERMO  ECKER merece ser CONOCIDA…

Nace en los Buenos Aires de la ARGENTINA el 14 de abril de 1955. Es el mayor de tres hermanos de una familia de clase media que vivía en Quilmes, en el sur del conurbano bonaerense. Recuerda su infancia como una etapa hermosa de su vida que se desarrolla en gran parte en casa de sus abuelos maternos, una hermosa casa con un gran jardín sobre una calle adoquinada frente a la plaza del barrio.

En esa época, y esto es absolutamente cierto, los tachos de basura eran un cajón de manzanas forrado por dentro con papel de diario, el basurero pasaba con un carro pintado de gris y tirado por un caballo. Como esa, tantas otras cosas quedaron grabadas en su memoria: olores, vivencias, algunas intrascendentes y otras que marcaron hitos en su vida. Los amigos eran del barrio, se jugaba en la calle o en los terrenos baldíos, que en esa época abundaban. En otoño se hacían fogatas en la calle para quemar las hojas secas de los árboles. Cuando había tormentas de viento, treparse al árbol más alto del jardín, un tilo que había plantado el abuelo, abrazarse al tronco en lo más alto y balancearse al impacto de las ráfagas, era una fantástica aventura.

Cursa el primario en la escuela alemana de Quilmes, eran once cuadras de ida y las mismas de vuelta caminando, cada día, cada año hasta el secundario que lo lleva más lejos, a Buenos Aires, a la Escuela Industrial Otto Krause de Buenos Aires, a la que ingresa en 1968 con el segundo mejor promedio en el examen de ingreso;  y de la cual egresa en 1973 junto con la mejor banda de forajidos intelectuales  jamás salida de esa escuela.

En paralelo estudia Cerámica en la Escuela de Bellas Artes de Quilmes y se recibe de Técnico Ceramista, una carrera de orientación artística. Esta actividad la desarrolla con interrupciones hasta el día de hoy.

Entre 1974 y 1979 estudia Arquitectura en la Universidad Nacional de Buenos Aires, en la FAU, en el turno noche. De este modo puede trabajar como dibujante en diferentes estudios de arquitectura en todos sus años de estudiante.

Durante el año 1976 hace el Servicio Militar en la Marina. Durante la instrucción que realiza cerca de Bahía Blanca se produce el golpe militar para destituir a Isabel Perón. En el verano se embarca por tres meses para hacer la campaña antártica a bordo del buque Bahía Aguirre, un antiguo carguero que definitivamente no estaba apto para navegar en aguas del Sur con témpanos y barreras de hielo. Sin embargo, es una experiencia que nunca olvidará.

Entre 1980 y 1990 trabaja como arquitecto en diversos estudios en la ciudad de Buenos Aires, entre otros con los asociados Antonini, SEPRA, Raña Veloso y Kocourek en la realización del Plan de 60 escuelas municipales.

Durante algún tiempo desarrolla la profesión en forma independiente asociado a colegas y amigos en diferentes constelaciones con mayor o menor éxito.

En 1983 se casa con Graciela, con quien sigue casado en la actualidad.

En 1984 nace su hijo Alejandro

En 1990 emigra a Alemania junto a Graciela y Alejandro debido a las dificultades económicas y laborales     –una vez más- en la Argentina.

Desde entonces está radicado en Heidelberg, Alemania y ejerce su profesión como arquitecto en estudios especializados en arquitectura hospitalaria e industria farmacéutica.

Desde los pequeños proyectos realizados en Argentina hasta esta arquitectura de alta complejidad pasaron muchos años de aprendizaje, de esfuerzo, de trabajo duro, pero también de nuevos desafíos y de algunas satisfacciones.

RODOLFO es abuelo de dos nietos hermosos, no es antivacunas, no es vegetariano, políticamente se inclina hacia algo intermedio entre la socialdemocracia y el socialismo, es pacifista, ama la naturaleza, ama a su familia, de no haber sido arquitecto hubiera sido carpintero, le fascina la fotografía y vaticina desde hace años que las próximas guerras serán por el agua…”

Así es la COSA

Y hay que tener especial cuidado con las confusiones. Como con los sueños, uno los deja en alguna parte, y cuándo te los devuelven son otros”

 

Así comienza este MONÓLOGO de un ARQUITECTO  que saca desde su interior un SECRETO VERDADERO… la DIFERENCIA entre los ADULTOS y los NIÑOS  es el precio de los JUGUETES..!

Es ahí cuando AFLORA ese NIÑO que TODOS llevamos DENTRO…

 

 

Analícelo, recapacite y si le parecemos INTERESANTES siga leyéndonos y vea el FINAL de la NOTA …

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CONTINUARÁ…

CON JABÓN…! NO COMO PILATOS PORFIS