Ese es Waits, una pruebita de los Estados Unidos subterráneos: Un músico sincero con un estilo muy, muy propio, que siempre ha ido contra la corriente de la industria.

Sus primeros discos, que comprenden la etapa entre "Closing time" (1972) y "Swordfishtrombones" (1983) demuestran una simbiosis que pudo ser fatal y no lo fue: Waits era un jazzero de cabaret como Louis Armstrong, con ínfulas de Montgomery Cliff, que recitaba letras como las de Jack Kerouac, con una voz como la de Bob Dylan y una acidez estomacal como la de Frank Zappa… ¡Fácil! ¿No?

Claro, ese era el de antes. El que algunos críticos creían, en ese entonces, que estaba destinado a desaparecer porque no podía innovar. Ese era el primer Waits. Luego vino el versión 2.0, el que dejó atrás la onda beatnick para revolucionar la escena musical con un espectáculo que no es blues, no es jazz y tampoco cabaret music… ¿Qué rayos es lo que hace? Me parece muy gracioso el caótico intento de allmusic.com de clasificarlo en los siguientes estilos: "Singer/ Songwriter, Beat Poetry, Experimental Rock, College Rock, Album Rock"… es decir, todo y nada.

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Descargas gratuitas legales de la página del sello discográfico Anti.
"Hold on", del álbum Mule Variations
"How"s it gonna end", del álbum Real Gone
"Another man"s vine", del álbum Blood Money
"Alice", del álbum Alice
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Los años en "La isla"

La primera casa discográfica de Waits fue Asylum. Su valor fue descubrirlo, pero su pecado fue ahogarlo. El final de los años setenta fue tormentoso para el artista, sumergido de cabeza en el alcohol y en las críticas de la industria.

Por fortuna, su contrato fue adquirido por el prestigioso pero pequeño sello Island. Dos discos brillantes en ese arranque ratificaron al artista: El que mencionamos, "Swordfishtrombones", y luego "Rain Dogs" (1985).

Entre los destellos brillantes de Waits está el hecho de que comenzó a explorar con sonidos grabados en sistemas monofónicos de antaño que luego unía a la instrumentación en estudio. Los resultados hacían que el formato de acetato / vinilo se quedaran cortos para reproducir semejante mezcla de sonidos casi de ultratumba. Sonidos místicos que llamaron la atención de la prensa nuevamente.

"Bone machine" (1992) es el disco más importante, entrados los noventa. Luego vino la compilación "Beautiful maladies" (1998) con lo mejor de los años de Island. Cierre con broche de oro para una época genial que trajo a Waits de nuevo a la luz. [ Atención, miembros de Last.fm, aquí pueden escuchar las canciones de "Beautiful Maladies" ]

Luego vino la etapa Anti, que no ha acabado y ojalá no acabe. Con este sello que tiene una excelente selección de artistas, ya ha grabado cuatro discos, todos de gran aceptación: "Mule variations", "Alice", "Blood Money" y "Real Gone", cuyas grabaciones son en verdad asombrosas: En algunos casos, se encerraba en el baño con una grabadora y los samplers que salían durante su ducha-sesión terminaban incluídas en las pistas. [ Aquí, un reportaje sonoro sobre cómo hizo Waits su álbum "Real Gone". ]

Waits el actor

Su participación en bandas sonoras ha sido una constante. Desde que lo llamó Fellini, y luego por su amistad con Jim Jarmusch, el tipo ha hecho cosas sensacionales. Yo recuerdo el impacto que me dejó la escena que abre la película "Things to do in Denver when you"re dead ("Asuntos pendientes antes de morir"), la imagen de Andy García, o Jimmy "the saint", en su automóvil descapotado, entrando a la ciudad. El tema era "Jockey full of bourbon", de los años Island.

Luego se puso de moda que una película que necesitaba sorprender con una canción incluyera a Tom Waits. Pasó con "Robots", cinta animada por computador para el segmento de los niños que tuvo su secuencia musicalizada con Waits.

Sin embargo, hay otro Waits, el actor, el que merecía ser llevado a la pantalla por su extraño -y muy real- aspecto. El personaje de la voz encajonada que no necesita maquillaje ni vestuario. El que debía protagonizar "Down by law" y aparecer en varias cintas para darle un climax a la escena.

Un reflejo de su personalidad fue capturado en pantalla cuando lo entrevistó David Letterman [ Aquí, el video -la carga puede ser algo lenta-]

Waits ha tenido que lidiar, además, una guerra contra sus imitadores. Cuando se negó a dejar que su música estuviera en comerciales de televisión, los pautantes comenzaron a poner imitadores. Waits no guardó su rabia ante el asunto y amenazó con demandar a diestra y siniestra

[ Escuche aquí la voz de Tom Waits y las de sus imitadores en comerciales ] Su respuesta: "Yo no soy un compositor de jingles, así de sencillo".

Links

Las películas en que ha aparecido él o su música.
Entrevista para NYRock sobre "Mule Variations".

Eso es todo: Les había prometido a Waits hace rato. Los dejé con descargas de musiquita y con algunas entrevistas geniales. Nos volveremos a ver el viernes.

Suerte y pulso.