A él no le gustaba que lo llamaran afrodescendiente, ni afroamericano: él era negro. Homenaje a un músico excepcional.
* La siguiente narración es una reconstrucción de antecedentes no comprobados. Si conocen información que pueda complementarla, bienvenida.
Cuentan que cuando sonó ‘ I got ants in my pants ‘ (tengo hormigas en mis pantalones) y vieron a ese hombre de ínfima estatura zambullirse sin pudor en el escenario, los asistentes al concierto del genio de sudor frío estallaron en una proclama de alegría absoluta. Esa noche, Bogotá se sintió bieeeeeeeeeennnn…
Se trataba de la máquina del sexo. Era James Brown, rodeado de las famosas llamas del funk. Rodaba 1973 (*), seis años después de la pirotecnia ocasionada en Estados Unidos con ‘Cold Sweat‘, con la que este hombrecillo se inventó el funk, para luego ratificarlo con ‘Sex Machine‘ y con su canción de activismo político en Estados Unidos, ‘Say it loud, i’m black and i’m proud‘ (dilo a todo volumen, soy negro y estoy orgulloso de ello). Ese negro estuvo aquí, en el Campín, según rezan las huellas de una generación.
Yo no podría recordarlo, pues no había nacido. Para mí James Brown comenzó como un jingle de máquinas de afeitar en la televisión (‘I feel good’, perfecto para el aftershave), mientras me dedicaba a sintonizar dibujos animados. Luego apareció cantando ‘Living in America’, una canción con la que se ganó un Grammy, como introducción a la soberana paliza que el ruso Draco le dio al orgulloso Apollo Creed en Rocky IV. Esta es la escena:
Ese encanto de Brown me llevó a explorar más acerca de su vida. Algunas de sus canciones lograron su cupo en compilados arbitrarios de la historia del rock. Aunque Cold sweat era la consolidación del beat vocal que se inventó James Brown -beat replicado posteriormente por la música electrónica-, en los discos las canciones rimbombantes eran ‘Papa’s got a brand new bag’ (cinéfilos recordarán una escena de la cinta Contracara, en la que el personaje de John Travolta comparte un cigarro con su hija y le dice ‘Papa’s got a brand new bag’), la mil veces sonada ‘I feel good’ y un éxito que, para mí, ratificó por qué le decían el padrino del soul: ‘It’s a man’s man’s man’s world’, una diatriba machista en la que este gringo explica que aunque es un mundo de hombres, no sería absolutamente nada sin las mujeres. Este es el Brown del soul. Aquí, el videito de esa canción, perteneciente a los primeros años de su carrera:
Luego tuve el placer de verlo -creo que de manera tardía- en una de las escenas más espectaculares de la historia del cine relacionado con el rock: James Brown interpreta al predicador de una iglesia bautista que llama a Elwood Blues (John Belushi, también Q.E.P.D.) hacia la luz, para que forme una banda de blues:
Pero si buscamos un recuerdo reciente, no más tenemos el comercial de Renault Clío MTV, y el barrendero que cantaba "guetapaaaammmmmm"…
Yo siento que el legado de Brown no se puede medir en si es papá de un género, padrino del otro e hijo del otro, pues las líneas que dividen el soul, el funk y hasta el rap y el hip-hop son más delgadas de lo que uno se imagina. Y en todas, Brown dejó huella y fue inspiración y norte. Más interesante pensar en la influencia de Brown en la música blanca. La electrónica le debe muchísimo al concepto del funk de este señor, así resulte difícil de creer.
Este señor es pieza clave del motown y del R&B, motor de innumerables giros, pero sobre todo, fue un unificador del pueblo estadounidense. Living in America fue un himno de ese país, independiente del color (corríjanme si me equivoco, pero tengo el recuerdo de James Brown cantándola en la inauguración del mundial de fútbol USA 94).
Claro, en su vida hubo excesos que este blog no va a defender, pues eran brutales, pero sus pecados eran los que hoy acosan a mucha gente: su dependencia a las drogas –este extraño video lo deprime a uno-, los capítulos oscuros de violencia marital, las recurrentes detenciones –registradas en estas fotos tristes-, disminuyeron su carrera, lo llevaron al ocaso.
Enlaces interesantes
– Recomendado: Aquí se puede descargar legalmente todo un concierto de James Brown en Washington.
– Línea de tiempo de James Brown.
– Un tremendo especial in memoriam.
– Recomendado: Brown cantando Georgia on my mind.
Su legendario paso por Bogotá quedó registrado en la web en este simpático poema de un ex hippie que encuentran en este link:
JAMES BROWN’S IN TOWN / Moe Armstrong
Light rain
we head to Coliseo
to catch a burning
concert
There’s rainbows
in the darkness
happiness to see
the Godfather of Soul,
come to town
Small groups
of people
head out from
all parts of Bogota’
this night
Saw some people
before I went in
we talked
When the concert started
the talking
smoothed out
There is lighting trip
to illimuniate the Godfather
I met Stan and Mario
we are the people
who live with the people
and we
watch James Brown
dance all night
Suerte y pulso, amigos.