Hace rato no hablamos de bandas nuevas, viejas, de música en sí. Estamos muy concentrados en el tema de los conciertos, pues la agenda ha sido una de las más activas de los próximos años. Con el ánimo de retomar las discusiones musicales, les prometo que la próxima semana hablaremos de bandas muy buenas. Por ahí se viene un recorrido a la música de Los Dynamite.

Esta entrada tiene como fin ser más de servicio que otra cosa.

A continuación les dejo un calendario de conciertos que he programado en Google Calendar y que tiene las fechas de los próximos conciertos. Esto irá cambiando conforme se sepan nuevas noticias de eventos. Se puede imprimir, sincronizar con sus calendarios, etc. Es totalmente público para consulta (si quieren agregar una fecha, propónganla en el blog y con gusto, yo editaré el calendario):

 

 

Posdata: Si no aparece el cuadro, haga clic aquí.

Posdata2: Por motivo decencia y respeto al lector, fue omitida voluntariamente la fecha de Ricardo Arjona…

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¿Qué pasó con Iced Earth?

 

En estos días he recibido varios mensajes en los que los lectores me cuentan de su incertidumbre por el supuesto aplazamiento del concierto de Iced Earth, que estaba programado para el 14 de febrero. Nunca se realizó, permaneció anunciado en tuboleta.com -y de hecho, se encuentra aún hoy– durante varios días con posibilidad de seguir comprando boletas. Y como lo señalan las quejas, en Tuboleta.com no están devolviendo el dinero, como lo pude constatar ayer en una llamada que hice como supuesto cliente afectado.

 

Uno de los mensajes apuntaba algo muy simpático, en medio de la rabia: «No sé cómo pude confiar en una empresa que se llama Fuck Yeah Productions«. Y con justa razón, pues lo único que se ha sabido es que el concierto se aplazó hasta junio, pese a que la banda no da fecha en su página web.

 

En efecto, ese es el nombre del empresario encargado de ese concierto y quien ha estado detrás de otros que salieron bien, como Testament o Arch Enemy. Al parecer, hoy estos no dan la cara; su página web dejó de existir, así mismo el correo electrónico al que se rebotan todos los mensajes. No sirvió dejarles un mensaje en el buzón de voz del celular de uno de los empresarios. Otra firma implicada, Undercol, que estaba en la promoción del concierto, aclara que esa es su única función y que por ende no son responsables del evento.

 

Tuboleta.com, así como otros puntos de venta como Rolling Disc, afirman que no están devolviendo el dinero pues el empresario no ha hecho expresa la idea de que se cancele el concierto. De hecho, en algunos puntos, el empresario ya recogió el dinero de la boletería y entonces los vendedores no tienen la plata. 

 

La cosa es que, según los términos legales que están expresos en la contracara de cada boleta, si el concierto está aplazado y no cancelado, el empresario no está en la obligación de devolver el dinero…

 

No está en la obligación, OK, pero… ¿no sería un buen gesto con los fanáticos de la banda y con los futuros clientes de conciertos de Fuck Yeah Productions, devolverles el dinero a quienes probablemente no puedan asistir en junio o, por justas razones, tengan dudas sobre si se va a hacer o no? El mensaje que le queda a la gente, así esa no sea la intención del empresario, es «te jodiste, mira el nombre de mi empresa, qué más podías esperar».

 

Y eso, claro, si está realmente aplazado. Pero esa información aún no es clara. Iced Earth dice en su página web que el concierto de Bogotá, además de los de Argentina y Chile, se postergó «debido a circunstancias fuera de control». Y agrega: «Estamos trabajando muy duro para poder visitar estar lugares maravillosos en un futuro cercano y estaremos anunciándolo aquí (la web oficial) cuando llegue el momento». Actualmente estoy esperando una respuesta más concreta de Paul Ryan, mánager de gira de la banda. Tan pronto la obtenga, la daré a conocer en este espacio.

 

— Sin embargo, sé que hay serios indicios de que el show sería cancelado y cambiarían de empresario —

 

La conclusión, acá, es que no están haciendo algo ilegal… pero sí algo indecente con la gente que pone su confianza en sus arcas. Un buen gesto de una empresa que espera volver a hacer conciertos en Colombia sería dar la cara, reconocer el problema y brindarle confianza a la gente que les ha pagado boletas que superan los 70.000 pesos. Y si no vuelven a hacer conciertos, igual, los afectados no los van a olvidar.

 

 

Suerte y pulso.