Hace ya casi dos semanas en el periódico una noticia relacionada con un proyecto de ley para prohibir el uso de las bolsas plásticas debido al impacto negativo en el ambiente que éstas tienen. Ahora, desde mi punto de vista, creo que la resolución de este problema va mas allá de prohibirlas.

Empezando por el hecho que es más costoso reciclar las bolsas plásticas que producir nuevas, entonces la solución tiene que ser más de fondo ya que la producción de plástico, en este caso de bolsas, está generando daños ambientales que no nos imaginamos en el medio ambiente. Por ejemplo, muchos  animales y aves marinas mueren asfixiados por quedar enredados en estas bolsas o cuando las consumen confundiéndolas con alimento o gran parte de los residuos de grandes basureros (como el «Doña Juana» en Bogotá) se ven altamente invadidos por las mismas.

Comencemos en que podemos informarnos sobre la realidad de la contaminación que causan las bolsas plásticas y también sobre las que ahora tan de moda están en los supermercados que pensamos que pueden ser la solución, pero en realidad no lo son. Se necesita de botaderos de basuras con especificaciones técnicas especiales para el manejo de este tipo de plástico biodegradable si no pasan a contaminar como las bolsas de plásticos normales.  

Llevamos muchos años usando las bolsas plásticas para todo y si caemos en cuenta somos testigos de la contaminación que estas causan. Aquí en nuestro país tenemos  entre muchos ejemplos los paisajes de la Guajira salpicados con estos horribles adornos plásticos y no saliendo de Bogotá  vemos las inundaciones causadas por el taponamiento de las alcantarillas por causa de la basura que en su mayoría es plástico que no se degrada.

Pero, ¿Podemos hacer algo? Creería que comenzando con tener una conciencia sobre este problema sería un buen comienzo. Esa conciencia la deberíamos aplicar a nuestro papel como consumidores es un granito de arena que aportamos  para que el problema no siga aumentando.

Pero algo que si esta claro para mí es que ninguna solución será la mejor mientras existan intereses de unos pocos contraponiéndose a la necesidad de muchos. Esto lo digo porque nada se gana si  para solucionar el problema de las bolsas plásticas se utilizaran bioplásticos que provienen de fuentes naturales y renovables como la soya, pero plantar esta soya se arrasa con hectáreas de selva para su cultivo.  

La tecnología existe y avanza de manera extraordinaria  y se puede utilizar para estos fines, porque ya se han inventado sistemas que se encargan de beneficiar al medio ambiente en diversas situaciones. Estos problemas requieren soluciones y mi reflexión va finalmente a que no importa que clase de tecnología invente el hombre para ayudar, facilitar y mejorar su calidad de vida sobre el planeta lo importante es que la tecnología sirva para un bien común y se utilice para dar soluciones reales y completas a los problemas como por ejemplo el de las bolsas plásticas.

Las tecnologías sin importar si son de investigación para el avance de la ciencia o  que a través de este blog utilizo yo para dar a conocer mi punto de vista nos sirven si queremos para avanzar. Utilicémoslas de manera racional y reflexionemos sobre el cuidado que merece el lugar donde vivimos.

Ángela Patricia Paredes
Coordinadora administrativa
Corporación Colombia Digital
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