Francisco Jaimes, más conocido en su barrio como don Pacho, es el dueño de la tienda ubicada en un concurrido sector de oficinas. Maneja su negocio en una libreta, donde además de las cuentas de sus clientes, toda la parte contable. Hoy llegó el proveedor de galletas, preguntó por la cantidad que solicitó por Don Pacho, y él se remite a su cuaderno, busca, suma, resta y le pide al señor que le deje tantas unidades de un producto que ha rotado mucho.
Doña Marta Herrera es una costurera de barrio, que en su taller emplea a cinco madres cabezas de familia que trabajan al destajo (pago por contrato). Doña Martha tiene clientes permanentes, pero esos no copan toda su capacidad de producción. Ha impreso catálogos, pero esos solo los ha podido distribuir con sus conocidos y no han generado un impacto significativo en sus ventas.
Por otro lado, está la asociación de artesanos de Santa Marta, quienes han sido beneficiarios de un sinnúmero de proyectos que les han permitido poco a poco sacar productos de mejor calidad y muy competitivos en el mercado, pero no han podido comercializarlos en grandes cantidades, pues presentárselos a los clientes y darlos a conocer no ha sido fácil.
Todos estos temas podrían solucionarse con opciones que las TIC ofrezcan a las Mipyme, por ejemplo, software de inventario, páginas Web u otros sistemas que harían que esas tareas que antes se hacían en forma manual, hoy puedan hacerse en forma más ágil y rápida.
La Corporación Colombia Digital, desde el año pasado, con recursos del hoy Ministerio TIC ha llevado a cabo proyectos, que a un bajo costo, logran llevar estos beneficios a mipymes interesadas en mejorar su productividad a través de la innovación tecnológica. Esta propuesta no podría ser eficiente si se tratara únicamente de entregar fierros o cacharros, por lo que se plantea que los proyectos que se financian sean integrales y tengan en cuenta que para lograr una adecuada implementación de las TIC (tecnologías de la información y la comunicación), es necesario no solo capacitar, sino empoderar a los microempresarios de la utilidad de estas herramientas.
En Colombia gran parte de las empresas son micro, familiares o pequeñas y en ocasiones el acceso al mundo digital se ve truncado por una errónea percepción de las TIC, pensando que implican altos costos y que son más un estorbo que una ayuda. Pero poco a poco, a medida que se apropia el tema, se puede identificar que hay muchas opciones disponibles, a costos mínimos o inclusive gratis, que facilitan proceso no solo de implementación de herramientas sino también de formación en el uso y aplicación de las mismas para actividades que forman parte de la vida diaria del empresario.
Hoy la invitación es a que proveedores TIC, con experiencia y gran sentido social, agrupen un número mínimo de 10 mipymes y presenten propuestas orientadas a mejorar la competitividad de estas unidades productivas, a través del uso de herramientas tecnológicas, a la convocatoria que está abierta desde el 28 de octubre, llamada Mipyme Digital (www.colombiadigital.net o www.colombiaplantic.org).
Casos exitosos hay muchos, personas satisfechas y con ganas de seguir aprendiendo hay montones y eso nos impulsa a seguir adelante. Pero esto solo es posible con el compromiso expreso que las mipymes darán lo mejor de sí para aprovechar esta oportunidad y sacar los mejores resultados para su empresa y para sus vidas.
Ana Cecilia Mejía
Directora administrativa
Corporación Colombia Digital
anamejia@colombiadigital.net
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