Hoy día las tecnologías de la
información y la comunicación (TIC) son protagonistas en el tema educativo
desde distintos puntos de vista. Pero, hasta ahora que viví la experiencia, no
había podido entender las dimensiones y la acogida que tiene la educación
virtual en nuestro país y el mundo, con sus ventajas y desventajas.

 

Hace más de un mes me encontraba
buscando cursos o diplomados sobre comercio exterior y afines, pero los que
arrojó mi búsqueda tenían costos altos, que me exigían mucho tiempo y grandes
desplazamientos. Finalmente encontré una excelente oportunidad a través del
SENA con un curso que me brindaba todo lo que estaba buscando: los
contenidos teóricos y prácticos, la flexibilidad de horarioy cero desplazamientos
ya que podía hacerlo desde cualquier lugar. Este anhelado curso, tenía una particularidad o más bien unas  exigencias que tiempo después me daría cuenta
que muchos no tenían claras: un alto grado de responsabilidad y compromiso.

 

Si bien es cierto que  la educación virtual es flexible en cuanto a
que no se limita a un horario o espacio específico, requiere por parte del
estudiante una gran disposición y compromiso, que se verán claramente determinadas
por las expectativas y objetivos que cada uno tenga con respecto al proceso de
enseñanza.

 

Es decir, en mi caso, soy una persona
que trabaja, pero a la que le gusta estar en constante actualización y encontré
en estos cursos una oportunidad de hacerlo de manera más práctica. Pero a la
vez, soy muy exigente conmigo misma, me gusta argumentar mis trabajos  y saber que mis respuestas están bien
sustentadas. Creí ingenuamente que ese era el sentir de los otros
participantes, pero en cambio me topé con gente que solo se limitaba a
responder superficialmente, ya que en teoría no tenían a alguien que les
exigiera algo mejor o no tenían la suficiente conciencia del proceso educativo
que estaban desaprovechando.

 

Y aquí es donde me quiero centrar un
poco ya que la «buena educación», virtual o no,  depende de las dos partes directamente
involucradas, tanto de los alumnos, como de aquellas personas que nos dirigen
en el proceso de adquisición del conocimiento.

 

Hay profesores, tutores o  pedagogos que sencillamente se conforman con
impartir el conocimiento sin saber si sus alumnos lo están incorporando
acertadamente. En el curso virtual leí algunas respuestas que a simple
vista estaban  faltas de argumentos y
bases, a las cuales nunca les observé ningún tipo de retroalimentación o
comentario aclaratorio de quien nos estaba guiando. Creo que en  la misma forma, nosotros  los alumnos tenemos también esa
responsabilidad de lo que aprendemos  y
de la manera en que lo hacemos, de la forma en que indagamos y en donde lo
hacemos.

 

En mi caso, hallé páginas que nos
brindan grandes oportunidades de documentarnos 
y  de hacerlo bien, sin obviar los
derechos de autor, cosa que con esta experiencia no puede ver, ni siquiera
desde el tutor. Creo que la «buena educación», está en nuestras manos, ya que
la forma en que lo hagamos y la aptitud que tomemos al respecto, depende de
nuestros objetivos y expectativas de aprender.

 

Los cursos virtuales son una ventana
abierta  para que desarrollemos nuestro
conocimiento, una forma práctica de adquirirlo o afianzarlo. Pero si no somos
proactivos, si no buscamos ir más allá, si nos conformamos con alguien que
simplemente nos diga (en el mejor de los casos) que nuestras respuestas le
parecen bien o le parecen mal, nos 
estamos limitando a recibir una certificación que acredita un
conocimiento que no es  real sino
superficial. Si eso es lo que se quiere, pues para que buscamos más… pero mi
llamado es para los que buscamos educación de excelente calidad, con pedagogos
calificados y que tengan la mejor disposición para dar todo de sí y enseñar con criterio. Así como exigimos a las instituciones
educativas mejores estándares de educación, esto no tiene sentido si  desde nosotros mismos no existe el interés por aprender bien desde nuestro papel.

 

Lucía M. Osorio

Asesora Proyecto Educared

Alianza Fundación Telefónica – Corporación
Colombia Digital

lucia.osorio@colombiadigital.net

www.colombiadigital.net