Definitivamente, cada vez es más fuerte la influencia de las TIC en las sociedades. Es tal su impacto en el quehacer diario de estas, que cada día es evidente que penetran en cualquier sector sin importar estrato social, color, ideología, raza, religión, etc.
Mientras en muchos países diseñan y proponen leyes para vigilar y eliminar la piratería en la red  ‘satanizándola’, de cierta manera encasillan a los internautas como una especie de ‘vándalos virtuales’. Pero países como Suecia rompen el paradigma y abren sus puertas de par en par a la sociedad creativa, que ve en la Web 2.0 una herramienta enriquecedora para cualquier proceso.
Es por esto que justo antes de la navidad del año anterior, la agencia gubernamental sueca Kammarkollegiet  (el proceso fue muy estricto al punto que la documentación fue devuelta en 3 ocasiones) ha registrado en la iglesia de Kopimism,  un credo que defiende el derecho y la obligación de sus miembros a compartir información, convirtiéndose en una comunidad religiosa tan válida como el cristianismo o la iglesia Maradoniana.
El concepto de religión tiene su origen en el término latino ‘religĭ’o‘ y se refiere al conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad. Esta implica, sentimientos de veneración y temor hacia Dios o los dioses, de normas morales para la conducta individual y social y de prácticas rituales, como la oración y el sacrificio para rendirle culto.
Esta iglesia llamada ‘Missionary Church of Kopimism’, fue fundada en 2010 por Isak Gerson, un estudiante de filosofía, fiel creyente en el intercambio de ficheros.  El propósito de esta comunidad y su posterior solicitud para que las autoridades suecas la aprobaran, es prevenir que sus miembros sean perseguidos por las autoridades a causa de  compartir información libremente, ya que dentro de su teoría: «la información tiene un valor en sí misma y en lo que contiene, y el valor se multiplica a través de la copia«.
Aunque ser reconocidos por el Estado de Suecia es un gran paso para todos los ‘kopimi’, para muchos expertos en materia de propiedad intelectual, la aceptación de agrupaciones de este tipo no tiene efecto sobre la legislación en el tema de la piratería. Mientras que para los defensores las leyes que buscan regular la distribución de contenidos que no respetan los derechos de autor son una forma de represión que pondría límites, haciendo que la red pierda su esencia.
Por el momento, la página web de la iglesia Kopimism no está disponible, pero ya se conocen algunos dogmas y pilares de la organización:
  • Los atajos de teclado CTRL + C y CTRL + V son parte de sus símbolos sagrados.
  • Su credo defiende el derecho a compartir archivos como acto «sagrado», tengan o no derechos de autor.
  • Sus fieles aseguran que la «copia es un sacramento«.
  • Se oponen a la aprobación de leyes que puedan coartar esos derechos.
En varias entrevistas, el joven Gerson ha manifestado que con la fundación de esta iglesia espera que se esté dando un paso hacia el día en que los asociados  puedan vivir su fe sin temor a persecuciones, y que en un futuro no muy lejano, la religión sea tomada en cuenta a la hora de formular nuevas leyes.
En resumen, la tecnología cambia el mundo. Hay quienes se adaptan más rápido, mientras que otros tratan de oponerse, pero por más leyes que aparezcan y se ejecuten en los países, siempre llegarán tendencias inevitables.
Cómo dicen las abuelas: «cada loco, con su tema».

Álvaro Rodríguez
Corporación Colombia Digital
@LosCuernos