Facebook, WhatsApp, Twitter, BB Messenger, son empleados por muchos usuarios para mostrar sus viajes, su mejor cara, sus estados de ánimo y demás fotografías.
Pero, se ha preguntado: ¿cuántas veces al día o en la semana sus contactos cambian de foto o estado?, ¿qué sensación le produce?, ¿usted es de los que las ignora, las comenta o se toma el tiempo para reparar los detalles de la imagen?, ¿es de los que aprovechan el comentario para llamar a saludar o interactuar teniendo por tema la frase en particular?, O simplemente es de los que le sugiere al amigo cambiar el comentario porque lo dicho en un escenario púbico y profesional no le favorece.
Sabe cuántos de ellos usan las redes para compartir links de artículos, ensayos, blogs con producciones propias, canciones, noticias, recomendar libros, películas e informar sobre cursos y seminarios.
Se ha preguntado si lo que se comunica en las redes personales ¿es tenido en cuenta en los procesos de selección profesional?, ¿qué tanto accede el personal de recursos humanos a las plataformas donde se comparten hojas de vidas? Cualquiera de los dos casos anteriores tiene de fondo una intención, sea esta estratégica o no, en esos procesos se hace evidente el marketing digital o dicho de otro modo, el marketing personal digital. ¿Qué tan bien te vendes con lo que publicas, compartes o cuelgas en tus redes?
El marketing personal digital en términos generales se refiere a la capacidad de la que hacemos uso, para saber «vender» nuestro perfil profesional en estos sitios web, incluyendo títulos profesionales y conocimientos. Sin embargo el aspecto profesional no está solo relacionado con las certificaciones que poseemos, también tiene relación con las destrezas comunicacionales, la actitud, la generación de confianza y la credibilidad que se logre establecer con el otro, así como la imagen que proyectamos y comunicamos a nivel digital.
La relación con el otro, el trabajo cotidiano y la habilidad de colocar al servicio de los demás las capacidades personales y profesionales también tiene un efecto positivo en la forma como se establecen vínculos a través de los espacios virtuales. Pero actitudes como la displicencia, la falta de cordialidad, los chismes, comunicación negativa, entre otras, tumban el telón del buen nombre que hemos construido con base en el conocimiento certificado.
Se buscan aptitudes y se contratan actitudes. Identifique cómo es su proceso de venta, analice sus relaciones interpersonales, la capacidad de trabajar en equipo y de obtener confianza en los diferentes niveles jerárquicos y con sus colegas. Qué tan preparado está para realizar su marketing personal en redes sociales. En el vínculo mencionado previamente accederá a algunas recomendaciones que pueden ser de ayuda si es su interés personal y profesional.
María Eugenia Vallejo
Trabajadora Social
Candidata a Master en Educación desde la diversidad