Por estos días es común que todo tipo de empresa, organización y/o negocio desee tener presencia en las diferentes plataformas sociales, pero es aun más común escuchar a los líderes y gerentes de proyecto justificar esta imperante necesidad de migrar a los medios virtuales simplemente porque “es lo que manda el mercado”. Pero en realidad no se encuentra un argumento sólido que justifique el despliegue humano y demás recursos que implica “abrir una cuenta”.

Y es que, “¿qué tan difícil puede ser? se trata de administrar y publicar cosas, algo que hasta yo lo puedo hacer” aseguran muchos. Sin embargo cuando decidimos entrar en ese mundo de las plataformas sociales tal y como lo manda el mercado, debemos entender que se trata de algo más complejo que escribir un par de contenidos: es la gestión de la marca, del nombre y de la imagen de nuestra empresa lo que se pone en juego. 

Para ello es importante que tengamos claro por qué y para qué vamos a dar ese importante paso; cuál es el beneficio que obtendremos; cuáles serán los recursos a dedicar; qué tipo de acciones se deben adelantar y sobre todo saber cómo funciona el mundo del Social Media. Porque cuando se está empezando en la gestión de las redes, es mucho lo que se dice, lo que se comenta y poco lo que se entiende. Es entonces cuando como usuarios primerizos se cae en ese recurrente círculo de términos y acciones desconocidas a las cuales se accede solo porque otros lo hacen y porque es la “tendencia”.

¿Le es familiar el siguiente escenario?:

Sujeto A – “¿Qué están haciendo en tu empresa?”
Sujeto B – “Creamos una página web y mostramos todos nuestros productos”
Sujeto A- “¿Hasta ahora? Nosotros ya pasamos por ahí, ahora la tendencia es el social media”
Sujeto B- “¿El social media?”

En la siguiente oportunidad la historia se repite, entonces el “sujeto B” intentará alardear de su presencia en las redes, mientras “A” le indica que con eso no basta, que “no es lo más actual”, que en su empresa son youtubers, miden el engagement, la viralidad, etc.

Y nuevamente empieza una carrera para nuestro emprendedor (sujeto A) por intentar equilibrar la balanza, y digo intentar, porque en cada encuentro se hallará con algo nuevo por hacer, sin embargo él siempre buscará estar a la vanguardia.

Pero ¿por qué?, ¿para qué?… Simple, porque es lo que manda el mercado.

Escenarios como el anterior son muy comunes dentro del ejercicio de la implementación del marketing digital. Preste atención, analice y juzgue. Pero ante todo, no “coma” entero. Si bien es importante saber qué es lo que se está haciendo en materia de propaganda, publicidad, marketing y demás, es aún más importante saber para qué nos servirá incluir ese portafolio de servicios, ya sea que lo contratemos o lo implementemos internamente. La clave está en identificar el valor agregado, qué quiero medir, qué quiero lograr.

Aprenda lo necesario, explore el maravilloso mundo del marketing online, identifique los factores importantes para crear y desarrollar una estrategia para su empresa y antes de empezar a hacer y deshacer analice qué es lo que le ofrece el mercado, recuerde que existen muchas plataformas con mil oportunidades, pero no todo lo que ofrece y demanda el mercado es lo más apropiado para su negocio o empresa.

 

Cristhian Herrera
Community Manager – Comunicador Social y Periodista
Colombia Digital