Casi me cortan el gas, por no leer la factura. Tengo programado el pago mensual del servicio de gas natural a una cuenta débito, para no olvidar pagarlo y así nunca he tenido problemas, hasta que un día llegaron a decirme que me iban a cortar el servicio.
Como cualquier persona normal, me molesté con el técnico que llegó a mi casa a cumplir con su deber, y cuando terminé de decirle todo lo que pasaba por mi mente, él – muy amablemente – me pidió una factura vieja de gas, y me mostró con toda la calma, que llevaban meses diciéndome que me tenían que hacer una revisión y que yo debía haber pedido una cita, que nunca pedía.
¡Yo nunca miro las facturas!, y no sé de cuántas cosas no me enterado, por tener el débito automático de mis cuentas. Peor aún: las empresas creen que uno lee lo que ellas mandan, y se lavan las manos, bajo la premisa que uno debe de leer lo que el envían y hacerles caso.
Este enorme error de comunicación, no tiene sentido en la actualidad. Muchos tienen sus pagos programados, o simplemente no leen la cantidad de información que se manda por las facturas, ni siquiera los descuentos. Esto se debe repensar seriamente, y no porque me haya pasado a mí, que terminé con el servicio cortado como la norma lo indicaba, sino que las cosas se siguen haciendo desde la comodidad de las grandes empresas, sin pensar realmente en sus usuarios.
Por si le interesa, ayer escribí que sobre cómo la paz nos esta dividiendo…