La luz tiene su propio lenguaje. Un lenguaje que expresa la belleza, la creatividad y la sabiduría de lo que somos. La luz habla en vibración y en resonancia, manifestando lo sutil, lo intangible e inexplicable.
Hace unos años conocí al lenguaje de Luz. Estaba en mi habitación y eran casi las 2 de la mañana. Llevaba más de dos horas dando vueltas en la cama sin poder dormir. Decidí pararme a tomar un vaso de agua y me senté en mi escritorio a dibujar para ver si podía distraerme un rato y volver a conciliar el sueño.
Recuerdo que en ese momento todo a mi alrededor estaba en silencio, incluso mi cabeza también lo estaba, no había diálogos internos o ruidos externos que me perturbaran. Poco a poco vi como el papel se iba llenando de signos, figuras geométricas y representaciones numéricas que desconocía completamente. Sentía mucho placer y paz mientras dibujaba, esta vez lo hacía de forma involuntaria, casi automática.
Pasaron unos días después de esa noche y publiqué en redes sociales los dibujos que había hecho. Quedé muy sorprendida al ver que una persona me comentó que lo que había dibujado se trataba del lenguaje de Luz. Inmediatamente empecé a buscar más información y noté que muchas personas alrededor del mundo dibujaban y escribían de manera muy parecida.
Con el tiempo fui profundizando en el tema y descubrí que el lenguaje de Luz es un vehículo que porta vibraciones o pulsos lumínicos que son captados por el campo electromagnético del corazón. La información que llega a través de este lenguaje nos permite reconocernos dentro de la unidad, desde la conciencia de que todos somos uno y que no existe separación alguna entre nosotros.
El lenguaje de Luz tiene la particularidad de no ser lineal, es decir, que no tiene una lectura tradicional que responda a una secuencia de signos o caracteres. Así mismo, no requiere de interpretaciones ni entendimientos mentales. Su conexión se da desde el sentir, la intuición y la apertura de nuestro corazón, y su expresión se puede presentar a través de los dibujos, el movimiento de la manos y la jerigonza, entre otras.
Todos los cambios que vivimos actualmente son la puerta para que nuevas formas de comunicación se experimenten en la Tierra. Formas que, como el lenguaje de Luz, nos encantan con la magia de lo que somos y nos revela nuestra poderosa conexión con todo cuanto existe desde el amor.
Paola A. León – @frq1320