Se avecinan las elecciones regionales en Colombia y con este hecho la necesidad de tener, como votantes, la tranquilidad de recibir propuestas reales y que trasciendan las campañas. Así mismo, nace la oportunidad para los aspirantes a gobernadores y alcaldes de generar una buena estrategia que pase de “no ser un actor y decir las cosas como las siente y las piensa”. Como votantes necesitamos creer en los candidatos regionales y por ello es imprescindible crear estrategias de comunicación integrada en marketing político asertivas, reales y alineadas a las necesidades de un país polarizado.
La política es una de las áreas que más preocupa a los colombianos, y para este año, de acuerdo con la reciente columna de Alejo Vargas Velásquez, “todo indica que la política colombiana tendrá tres escenarios fundamentales para su desarrollo: la calle, el Congreso y el electoral, y los tres estarán interrelacionados”. Así las cosas, las estrategias de comunicación integrada en marketing político son un elemento fundamental para los partidos a la hora de ganarse la confianza de los votantes e incluso hacerles partícipes de los problemas que acarrean al país. Sin embargo, los colombianos tenemos la sensación de que a ese proceso comunicativo únicamente se le da importancia en el periodo de campaña electoral y con un fin más publicitario que informativo.
Un buen plan de estrategias de comunicación integrada en marketing político puede dar respuesta a las necesidades del ámbito político y la sociedad, pues los votantes exigen una comunicación más humana y continuada, diferente a la que los partidos han intentado hacer por medio de nuevas vías como las redes sociales, mensajes de texto y herramientas como WhatsApp.
A través de las nuevas tecnologías, concebidas por la economía digital en la que vivimos, los partidos se acercan mas a los ciudadanos y emiten conceptos basados en la percepción y/o alineación que tengan con el partido o candidato de momento. El llamado a los candidatos para el proceso de octubre, es construir una cultura política basada en los valores como la tolerancia, el respeto a la diferencia y la libertad de expresión. Y para ello los jefes de comunicación de los partidos políticos, son pieza fundamental del éxito. A continuación, algunas recomendaciones para el desarrollo del plan:
Estrategias de comunicación integrada en marketing político
Hacer, pero hacer bien un plan de comunicación integrada en marketing político lleva trabajo y tiempo. No hay que ser politólogo para llevarlo a cabo, pero si es necesario hacer un buen análisis de una serie de factores que ayuden a resolver preguntas como: ¿cuál es el objetivo? ¿qué comunicar? ¿cuándo comunicar? ¿cómo hacerlo? y ¿a través de qué medios o canales de comunicación se va a trabajar? Es importante también hacer referencia a que el día a día en política va muy rápido y, en muchos casos hay que actuar sin tener mucha previsión. En comunicación política la rapidez de respuesta no siempre es mala, al contrario, tiene sus ventajas.
- Análisis de la marca política
Lo primero es evaluar objetivamente la imagen y percepción que tienen los ciudadanos de la marca. Establecer claramente la ventaja competitiva, lo que se quiere comunicar, sus diferenciales y las motivaciones reales por la que la marca generará más confianza que los otros que están también en desarrollo de campaña
- La audiencia objetivo
Muy importante en época de elecciones regionales y locales. Por tanto, se deberá contemplar una clasificación del ciudadano de forma detallada (edad, sexo, estado civil, ubicación, intereses, profesión, nivel económico, etc). Se trata básicamente de definir el buyer persona y en función de eso y de las necesidades de la región o ciudad, crear los mensajes clave, con argumentos focalizados, y no ir a argumentos genéricos. Los ciudadanos están más informados, acceden a multitud de contenidos todos los días, tienen redes sociales, internet, interactúan, opinan…
- ¿Qué hace la competencia?
En cualquier estrategia de comunicación y marketing se debe analizar siempre a la competencia, y el tema político no es la excepción. Siempre se debe analizar la competencia, qué hacen, dónde lo hacen, qué medios usan, qué ofrecen, etc. En procesos de campaña electoral coincidirán en algunas herramientas, pero al finalizar su diferencial será siempre su programa de campaña, que deberá hacerse realidad si es elegido.
Conoce bien a tu competencia, no para atacarlos, o copiarlos, sino para aprender de ellos y mejorar el plan.
- Los objetivos políticos
Si no se definen bien los objetivos, pueden ser motivo de frustración, pérdidas de tiempo, y hasta dinero. No sirve decir de manera general qué se quiere ganar las elecciones, o aumentar los votos en referencia a las elecciones anterior. El objetivo debe ser medible, aterrizado a la realidad, ajustado en el tiempo. Objetivos SMART (Especifico, Medible, Alcanzable, Realista, Tiempo). En el caso político, se debe pensar también en cómo dar soluciones, más que en cómo manipular a la gente, hacer las cosas bien no cuesta tanto. ¿Qué quieres conseguir en estrategias de comunicación y marketing político? ¡No lo digas, hazlo!
- Canales de comunicación
Ahora se habla mucho de estrategias de posicionamiento digital, de comunicación online y offline, pero en definitiva es comunicación el cómo hacer llegar tu mensaje para que sea más eficaz. Por eso es importante analizar y definir qué medios de comunicación usar en la estrategia. Mi recomendación es clasificarlos en medios tradicionales (Prensa, radio, tv, vallas publicitarias, folletos, etc.) y digitales, es decir, enfocados a la política online del candidato (Redes sociales, blog, foros de internet, portales especializados y muchos más). La unión de las dos formas de comunicar es lo que hace posible una comunicación 360º, una comunicación en toda su dimensión. Las dos por separado pierden efectividad.
- Tácticas y acciones
Una estrategia de comunicación integrada en marketing político puede contener una, dos, tres o miles de actividades o tácticas. Lo importante no es el número, sino lo bueno que sean para ayudar a conseguir los objetivos. Cada objetivo tiene que contener como mínimo una acción para intentar conseguirlo. Incluso cada objetivo puede tener asignado diferentes o varios programas y tácticas para conseguirlos.
- Medición
Lo que no se mide, no tiene sentido. Hoy, con la inclusión del mundo digital, podemos medir todo. Acción que nos permitirá saber cuánto nos queda para terminar una tarea, si el trabajo está bien hecho, valorar a percepción de la marca política. Se hace necesario que los KPI’s se marquen desde el inicio de la campaña política, alineados con los objetivos y que en el proceso de ejecución se analicen los resultados con el ánimo de trabajar siempre la mejora continua de todos los apartados de las estrategias de comunicación integradas en marketing político.