Desde que terminé mis labores en una compañía multinacional donde manejaba los temas de comunicación corporativa, comencé a hablar con diferentes empresarios y emprendedores sobre cómo manejan la divulgación y reputación de sus marcas, encontrando una breve restricción sobre el tema, ya que varios de ellos consideran que la prioridad son las ventas y la inversión en actividades propias de marketing digital. Eso está muy bien, sin embargo, hoy quiero retomar este tema para enfatizar en por qué una marca necesita apostar por la comunicación. 

La tarea no es fácil. Cuando se habla de comunicación (bien sea entre parejas, amigos, familia o en el trabajo) se piensa en hablar, en contar los problemas y las alegrías, en compartir los sentimientos, los éxitos y los avances… pero la realidad es que hay mucho más de fondo ¡la comunicación lo es todo! como lo expliqué hace algún tiempo en mi ebook (si quieres descargarlo da clic aquí). En este post les voy a explicar por qué una marca necesita aportar por la comunicación. 

  1. Una marca es invisible más allá de la ciudad o clientes habituales

Me refiero a que aunque tengas una clientela habitual que siempre está en contacto con tu negocio y te compra, ya que están ubicados en un mismo barrio o ciudad, la vida de los negocios (y en general) va cambiando constantemente. Ejemplo de estos cambios puede ser que la competencia crezca y comience a generar valor para atraer a tu clientela (Pasa mucho, ¿cierto?) o que por cosas del destino tengas que trasladarte a otra ciudad y, por ende, abrir las puertas de tu negocio allí… Si en ese nuevo lugar de trabajo no tienen referencias sobre tu negocio, o si tu clientela habitual no se siente fidelizada porque no les proporcionas contenido de valor, la conclusión es que tu marca es invisible y tendrás que iniciar de cero. 

Esto no es cosa de las grandes empresas, esto es de todo aquel que quiera ser visible. Por ello es necesario innovar, contar tus logros, tus desafíos, etc. 

Sin comunicación no te conocen… Y si no te conocen, no te compran.

  1. Qué se dice sobre ti y sobre tu marca

Ya tienes claro qué es importante, pero ¿cómo saber qué decir? Aquí viene una frase muy buena que traigo de la experiencia de mi colega Borja Gómez: “Tan importante es que hablen de ti, como lo que hablan de ti”.

Para poder llevar las riendas de la comunicación de la marca es importante planificar muy bien la estrategia a seguir. Me refiero a planear: qué quieres decir, cómo quieres decirlo y, sobre todo,  qué quieres que la gente perciba de tu marca.

Un ejemplo interesante para aclarar este punto es el del fabricante de zapatos. Qué será más importante decir: … que los zapatos son muy originales y de buena calidad, o que tienen comodidad y confort de acuerdo a la personalidad del cliente… ¡Esa es la cuestión! Que viva la estrategia de comunicación alineada a los objetivos del negocio. 

Todo es comunicación… Planéalo, contrólalo y sabrás lo que dicen de ti.

  1. Qué te aportan las redes sociales

Las redes sociales se han convertido en un gran escenario para dar a conocer a las marcas, pero no puede ser la única estrategia de comunicación. ¡La comunicación es integral digital, offline, interna y externa!

Para que las actividades en redes sociales funcionen, se debe acompañar de otras plataformas y otras formas de comunicación. Como bien lo ha mencionado Ramiro Parias en su blog corporativo, cada una de las redes que están ‘de moda’ tiene una particularidad y está destinada a funcionar mejor para algo concreto. Por ejemplo:

Instagram: Fotografías desde el móvil. Es visual, rápida, espontánea y fresca.

Facebook: Formalidad, accesibilidad mundial, lugar para escribir sin limitaciones.

Twitter: Opiniones, libertad, frases cortas y directas.

  1. ¿Reputación, reseñas y testimonios?

¿Por qué una marca necesita apostar por la comunicación? Porque hoy en día antes de hacer una compra, visitar un lugar, reservar un hotel, hacer un curso, etc,, siempre se quiere saber qué opiniones tienen otros usuarios. Esta es una nueva forma de consumir productos o marcas y se ha convertido en una parte fundamental de los negocios. Por lo tanto, la reputación es el mayor intangible de una marca, y se debe cuidar para su crecimiento. Esto se logra comunicando la experiencia del usuario, entre otras cosas. 

  1. Tu imagen sí importa

Este es un llamado para decirles que no solo importa la imagen de la marca, sino también la tuya como cabeza del proyecto. Si tú no tienes credibilidad, ni autoridad, ni prestigio, tu marca tampoco lo tendrá. Por lo tanto, tienes que trabajar en conseguir una buena imagen personal, apareciendo en la prensa, trabajando tu página web o cuidando los pequeños detalles. Si eres emprendedor, líder de una empresa, gerente o algo así, es porque conoces del negocio, tienes experiencia y habilidades para transmitir buenos mensajes.

  1. Cuida los pequeños detalles

Una unidad en la imagen corporativa, como lo menciona Borja Gómez, dará sensación de fiabilidad y confianza. Así que se debe trabajar desde el inicio laimagen corporativa’. Es decir, el logo de tu marca, los colores que utilizas (que te representen y que se asocien a ti. Por ejemplo, si te digo manzana piensas en Apple y si te digo rojo pensarás en Coca-cola), la tipografía (tipo de letra) igualitaria en todos tus textos, misma dirección en tus discursos, cuida tu imagen también (o la de tus empleados) cada vez que estés en público, etc.

  1. Más allá del convencionalismo

Ojo, ‘no está todo escrito’. A cada instante nacen nuevas herramientas que puedes aprovechar para avanzar como marca y como profesional cuidando la comunicación. La imagen, tu discurso, el color… en definitiva, la dirección de tu estrategia de comunicación, y también tu estrategia como negocio. Recuerda: debemos hablar de integración de estrategias…

¡Cambia lo normal, lo tradicional! La comunicación marca la diferencia entre tú y tu competencia. La comunicación hará que un potencial cliente se decida a entrar en tu tienda antes que a entrar en la de tu competencia.

Espero que ahora sepas mucho más sobre por qué una marca necesita apostar por la comunicación, basada en una estrategia para tu empresa/proyecto/evento.

Recuerda: Sin comunicación no hay visibilidad, sin visibilidad no hay clientes, y sin clientes no hay negocio.