Sanar a los demás a pesar de nuestra herida: la paradoja de Quirón
El mito del centauro Kyrón es uno de los más complejos y llamativos de la antigua mitología. Proveniente de la estirpe de centauros éticos y filosóficos, Kyrón es considerado uno de los grandes maestros de dioses, semidioses y grandes pensadores del panteón griego. Su padre Cronos (dios del tiempo) se transformó en un fuerte corcel para conquistar a Felgre (de orígenes marinos) y así lograr crear un ser mitad hombre y mitad bestia. Pero su destino se vio truncado cuando fue herido por una flecha lanzada por Heracles, y desde entonces su herida incurable lo obligó a ceder su inmortalidad para poder descansar del dolor que le embargó. La muerte le fue otorgada por los dioses, quienes le premiaron asignándole la representación del signo de sagitario.
Esta historia cruenta en la que un ser de naturaleza única aprende los secretos de la medicina y el poder de sanación para todos los seres (incluidos los animales, por lo que además de cirujano fue también considerado el primer veterinario), pero sin poderse curar así mismo, nos muestra una de las mayores paradojas del universo: detrás de la mayor fortaleza del ser humano se esconde su mayor debilidad.
Una realidad que fue también referida por Sun Tzu (544 a.c.) general y filósofo chino, considerado uno de los tres principales estrategas en la historia de la humanidad, y cuya obra máxima El arte de la guerra toca este punto con especial atención, cuando se refiere a que todos tenemos un punto vulnerable, hasta en el caso de los más fuertes. Y es que cuando se trata de encontrar nuestros puntos fuertes y también aquellos que debemos reforzar como seres humanos integrales, no solamente los libros de estrategia pueden ser de utilidad. Ciencias sobre las cuáles la humanidad ha podido apoyarse para desarrollarse y crecer, como la filosofía, la psicología y una de las madres de todas: la astrología, pueden acercarnos a ese deseable nivel de auto conocimiento que cada vez más, necesitamos para desarrollar nuestro potencial como especie.
En astrología, además del estudio de los planetas y de sus relaciones (lo que da como resultado infinidad de “ASPECTOS”) también se tienen en cuenta como elementos que enriquecen el estudio de un mapa natal, algunos asteroides, entre los que encontramos de manera bastante reciente a Quirón. Sólo hasta el año 1977 se incluyó este cuerpo celeste en el sistema astrológico, mostrando uno de los puntos más interesantes de estudio, pues Quirón muestra la herida abierta que traemos por Karma, y que en este plano existencial debemos cerrar para nuestra evolución física, mental o espiritual. ¿Cuál es esa herida personal que arde y se abre en ocasiones que parecen interminables? ¿Qué ámbito de nuestra vida es la que está marcada por esa cicatriz que no para de doler? ¿Podrá alguna vez curarse, o debemos resignarnos como el heroico centauro, al que solo la muerte le dio el alivio deseado?
La solución se encuentra precisamente en la paradoja anteriormente mencionada: aquél punto más débil, también puede ser nuestro mayor poder. Y es por esto que el primer paso es reconocer el punto que afecta esa herida en nuestras vidas, ya sea el campo emocional, la salud física, las relaciones entre hermanos, la facilidad con la que nos podemos adaptar a los cambios, la sensación de seguridad que nos puede brindar un oficio, o inclusive, la aceptación que establezcamos con nuestro cuerpo físico o nuestro sistema filosófico personal. Sea en donde sea que ésta herida siga expuesta, si sabemos ubicarla, ya tendremos la mitad de la solución. El siguiente paso necesario será tener la disciplina y la estrategia requerida para asumirla y enfocarnos en superar el reto que conlleva cerrarla a pesar del costo que conlleve: dolor momentáneo y sacrificios que serán el precio que hay que pagar para conseguir nuestros mayores anhelos. Y tercero, iluminarnos con la idea de transformar nuestro principal dolor, en el primer paso para convertirnos en maestros y poder ayudar a los demás a superar sus propios retos.
Cuando el obstáculo deja de ser el enemigo, y logramos reconocerlo como el puerto desde donde nos lanzaremos a conquistar nuestros más profundos miedos, entonces la semilla de la iluminación que el príncipe Siddhartha Gautama conceptualizó como “Budismo” brillará en nosotros desde dentro y nos dará la oportunidad de iluminarnos con nuestra propia luz. No olvidemos que el mismo Quirón ahora también nos acompaña como una estrella más, desde el firmamento.
Consultas con Julián Vallejo
- Si desean una consulta personalizada online a través del tarot de los ángeles, pueden comunicarse con Julián Vallejo vía WhatsApp al (57) 3107880595 o escribir al correo leertufuturo@yahoo.com.
- Las consultas personales online están disponibles para Bogotá. Para otras ciudades y países vía videollamada de Whatsapp. Más información sobre la consultahttp://www.conbuenaenergia.com/consul…
- Conectémonos en Twitter @conbuenaenergia, ¡Ya somos más de 13.639!
- Mi canal en YouTube crece día a día, ya son más de 7.473.000 ‘views’ y más de 73.600 suscriptores: http://www.youtube.com/user/JulianVal…
- Nuestro grupo en Facebook sigue creciendo ¡ya somos más de 7080 integrantes! Si desean unirse pueden hacer clic aquí: http://www.facebook.com/pages/Con-Bue…