La semana pasada, en el marco del 9° Congreso Empresarial Colombiano (CEC) celebrado en Medellín, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) conmemoró sus primeros 80 años, un gremio que late en el corazón productivo y empresarial de Colombia y cuyos afiliados representan cerca del 50 % del PIB nacional.
El marco de la celebración fue el ideal, puesto que el CEC se ha consolidado como un espacio vital para conocer las tendencias mundiales en diferentes sectores, así como un preciso termómetro de la realidad nacional. Durante tres días, los más de 1.000 asistentes aprovecharon a cerca de 50 expositores —nacionales e internacionales— que entregaron valiosa información en áreas como la sostenibilidad, la Inteligencia Artificial, el liderazgo y la innovación, así como de temas coyunturales para Colombia, América Latina y el mundo.
Pero volviendo al aniversario de la ANDI quisiera detenerme en uno de los tantos hitos del gremio (sería dispendioso listarlos todos) en estas ocho décadas de vida. Se trata de la creación, a principios de los años 90, de las cámaras sectoriales, que han demostrado el poder transformador de la colaboración, la colectivización y la especialización.
Procultivos, que ya tiene 34 años, fue la primera de esas cámaras y, con orgullo, puedo decir que he sido testigo privilegiada de cómo estos espacios han permitido a la ANDI aportar —en llave con el sector público—, a la construcción de país con dignidad y fortaleza, superando obstáculos y desafíos, y promoviendo un crecimiento que nos incluya a todos.
Este 80 aniversario, además, nos invita a resaltar el liderazgo que ha venido promoviendo la ANDI en el país. Un liderazgo cuya integridad brille con la misma intensidad en privado y en público, con líderes que inspiren confianza, transformen vidas y rechacen las máscaras, comprendiendo que la verdadera excelencia nace en el interior.
El aprendizaje continuo y la capacidad de adaptación al cambio han sido parte de la ANDI en sus primeros 80 años, agremiación a quien expreso mis más sinceras felicitaciones y agradecimiento. Debemos seguir trabajando, incasablemente, por un mundo más próspero, donde prime el bien común y la productividad inclusiva sea una realidad. El liderazgo que ejerce la ANDI debe seguir siendo tan inspirador como transformador, solo así seguiremos construyendo Más País.