Molén Antolin: ¡Hola! Es un gusto compartir este espacio con Erika Diep y hoy nos va a hablar de la Carta Astral.
Erika Diep: ¡Hola! Comencemos por decir que la mayoría de las personas tienen un concepto erróneo de lo que es la astrología, incluso, la definición del diccionario la describe como “arte adivinativa que estudia la influencia de los astros sobre los acontecimientos terrestres y el conocimiento del hombre y pronostica el futuro”.
La realidad es que la astrología es mucho más útil de lo que pensamos, sobretodo en lo que se refiere al conocimiento del ser humano.
Los horóscopos que leemos en periódicos y revistas clasifican a la persona de acuerdo a su posición zodiacal, mejor dicho, del signo del zodiaco al que pertenece.
Aunque las personas que comparten el mismo signo presentan rasgos de personalidad similares, en su mayoría son totalmente distintos, incluso personas del mismo signo que pertenecen a una misma familia son totalmente diferentes entre sí , tienen reacciones diferentes y reaccionan distinto ante una misma situación, ¿porqué?, la respuesta, como diríamos vulgarmente, es porque somos únicos e irrepetibles.
En este punto es en donde entra la carta natal, la cual es una representación gráfica de cómo estaban acomodados los planetas en el momento justo de nuestro nacimiento, dando como resultado una radiografía de nuestra personalidad.
La Carta Astral está conformada por diez planetas, los cuales representan los rasgos de carácter de cada persona según el signo y la posición en la que se encuentran.
El punto más importante de una carta es la interrelación que existe entre todos los componentes de la misma. Según Bruno Huber, creador de la Psicología Astrológica, la estructura de estos aspectos tiene un significado fundamental, son las fuerzas motivadoras en el ser humano que dan sentido a su vida, tema que ha sido cuestión de estudio y preocupación desde la antigüedad.
¿Quiénes somos?, ¿Hacia dónde vamos? ¿Qué sentido tiene nuestra existencia?, son preguntas que sólo podemos contestar teniendo un conocimiento profundo de nosotros mismos, y que si dejamos en blanco serán motivo de confusión, ansiedad y angustia.
Lejos de predecir el futuro o la buena fortuna, el propósito de la astrología ha sido desde la antigüedad, el estudio profundo del ser humano.
Un astrólogo calificado es capaz de reconocer las cualidades fundamentales de una persona a partir de los aspectos astrológicos representados en la carta natal.
Para aquellos que quieran conocerse a sí mismos y a los demás,la interpretación de la Carta Astral será siempre una herramienta de gran ayuda, siempre y cuando el astrólogo sea una persona capacitada y certificada, pues en este ámbito es muy fácil caer en la charlatanería.
Molén Antolin: Gracias Erika para cualquier duda o sugerencia los invitamos a que nos sigan en nuestras redes sociales. Que tengan una excelente semana.