Molén: ¡Hola! Hoy la Psicóloga Norma Luján nos va a hablar de los padres tóxicos.
Norma: ¡Hola! El mito de que los padres aman a sus hijos de manera incondicional debe ser dejado de lado, hay personas que no saben amar, no se aman a sí mismas y no pueden brindar un vínculo saludable a sus hijos tampoco. Es aquí donde comienzan los problemas, una relación que se supone debe ser de protección y amor fácilmente puede convertirse en una pesadilla.
Estos padres tóxicos resultan dañinos para el niño y también para el adulto, ya que este adulto irá creciendo con un maremoto de emociones, entre amor y odio, incomprensión e impotencia, y muchas veces llegan a terapia con graves consecuencias emocionales a causa de este vínculo nocivo.
¿Cuáles son las características de estos padres tóxicos? Son esos padres que te dicen que no vales nada, que sin ellos no eres nadie, critican cada paso que das, nunca demuestran su apoyo a menos que hagas lo que ellos te dictan. Como había mencionado, en casos extremos son los padres que golpean por cualquier tontería al niño, justificándose con excusas tan inverosímiles como que el niño es insoportable o indisciplinado y por supuesto, se merecía el castigo. Son padres que no están disponibles emocionalmente, ya sea mediante una marcada ausencia o porque padecen enfermedades (reales o inventadas) que los consumen; en el polo opuesto tenemos a los padres que se desviven por sus hijos y no los dejan respirar, cualquier atisbo de independencia se convierte en mala palabra y los terceros (parejas, amigos, trabajo) se convierten en enemigos de ese vínculo simbiótico que el padre intentará mantener a como dé lugar. Estos padres tratan al adulto como si fuera un niño pequeño eternamente.
Por supuesto que estas actitudes van dejando ciertas huellas en nosotros, como por ejemplo involucrarnos en relaciones abusivas o de dependencia emocional y miedo al compromiso. Algunas personas creen que valen tan poco que si las conocen de verdad entonces todo el mundo se va a alejar. A veces se le da demasiada importancia a la aprobación de los padres, temiendo ofenderlos con las decisiones de vida que toma el adulto. Son adultos inseguros, sumisos, con un sentimiento de culpa desmedida. Hagan lo que hagan estos en otros niños indefensos, jamás podrán tener la aprobación de los padres, porque no se trata de amor, sino de manipulación o de llenar vacíos ajenos, algo imposible de lograr como hijo.
Tenemos que dejar en claro que los adultos también son vulnerables, más allá de que el dolor quizás sea más intenso y menos manejable al ser un niño, las secuelas que dejan tras de sí estos vínculos tan dañinos, deben ser identificadas y tratadas para que finalmente uno pueda liberarse de esta trampa emocional.
Susan Forward, escritora norteamericana y autora de Toxic Parents nos dice que los padres tóxicos siempre generan sufrimiento en sus hijos mediante diversas técnicas, ya sea por maltrato psicológico y físico, manipulación, demandas desmedidas, control en diversas áreas (elección de parejas, amigos, carrera profesional) o una competencia solapada. Y la realidad es que hay padres que no toleran ni la felicidad ni el éxito que sus hijos puedan alcanzar.
¡Les deseo una hermosa semana!
Molén: Gracias Norma por tratar este tema y desafortunadamente a muchas personas le toca lidiar con padres tóxicos o suegros tóxicos. Para cualquier duda o sugerencia los invito a que nos sigan en nuestras redes sociales. Bonita semana!