Mayor precisión y menos molestias para el paciente

 

Mejorar la estética y la función respiratoria, ambas cosas a la vez. Ese es el objetivo de la técnica más reciente de cirugía nasal: la rinoplastia ultrasónica.

 

La rinoplastia en Bogotá y en otros grandes puntos es de las cirugías más demandadas. Es una variante de la versión clásica en la que se utiliza un bisturí piezoeléctrico para moldear la parte ósea de la nariz de una forma mucho menos invasiva. Ese bisturí emite una frecuencia de ultrasonidos que sólo lima el hueso pero respeta los tejidos blandos, así que es un método más preciso y menos traumático, por lo que la recuperación es más rápida.

 

Como esta técnica es más suave, se disminuye el hematoma postoperatorio. Pero es que además permite que la intervención se realice bajo anestesia local y sedación. En definitiva, se vuelve a la actividad diaria antes que con otras técnicas tradicionales. Por supuesto que todo depende de cada paciente, de cómo reaccione a la intervención y del tipo de trabajo o actividad que realice, pero sí que en líneas generales la recuperación es más rápida.

 

Cirugía de nariz para respirar mejor

La rinoplastia ultrasónica se utiliza, como se ha mencionado, no sólo con fines estéticos sino que en ocasiones la finalidad es funcional para mejorar el tracto respiratorio. E incluso, con habitualidad se realiza con ambos objetivos.

 

Los beneficios de la parte estética son indudables, pero hay que dejarse aconsejar siempre por un buen cirujano con años de experiencia y seguir sus recomendaciones. Las modas llevan a veces a querer seguir una tendencia o imitar la estética de un personaje, pero no debemos dejarnos influir por patrones que a lo mejor no son lo más acorde a nuestro rostro.

 

Diferentes tipos de nariz

Diseñar la pirámide nasal o corregir malposiciones, asimetrías o deformidades va más allá de un mero capricho estético y hay que tener en cuenta que la cirugía es un cambio irreversible. Y lo es en positivo por supuesto, pero hay que plantear bien la intervención y no tomar decisiones precipitadas. Es esencial en primer lugar elegir un centro con las acreditaciones profesionales necesarias y un equipo altamente cualificado y con experiencia. Una vez que se ha elegido el centro lo siguiente debe ser evaluar los antecedentes médicos y realizar una exploración clínica.

 

Cuando se ha considerado al paciente apto para la intervención hay que valorar las proporciones faciales de manera que el resultado que se va a crear sea armónico; y explorar la fosa nasal para valorar el tabique y la presencia o no de patología.

 

El antes y el después de la cirugía plástica

La inmensa mayoría de los pacientes de rinoplastia con esta técnica tienen un postoperatorio con molestias leves y una inflamación de grado bajo. Sí que se aconseja tomar en los días posteriores a la intervención antiinflamatorios pero en una semana como máximo se vuelve a la normalidad. Aquí volvemos a la premisa de que cada paciente es diferente y el umbral de dolor puede variar, pero la experiencia indica que esta técnica de rinoplastia ultrasónica tiene un postoperatorio bastante más satisfactorio que con otras técnicas más antiguas.

 

Es destacable el hecho de que se gana en calidad de vida tras esta intervención, bien sea por razones estéticas porque los resultados en la estima son muy notables, bien sea por argumentos funcionales, ya que los problemas respiratorios provocados por un tabique nasal desviado y otras patologías, afectan a la calidad de vida. En estos pacientes se identifican reacciones conductuales y fisiológicas que definitivamente cambian su vida a mejor.