En la vida hay ciertas experiencias que generan traumas y sentimientos negativos que pueden llegar a afectar gravemente el desarrollo integral de una persona. Sin embargo, hay quienes ante estas adversidades, logran encontrar el impulso para superar estos traumas y luchar por sus metas. María Trusa, víctima de abuso sexual infantil, es un claro ejemplo de superación.
El abuso sexual es un problema que reporta cada vez más víctimas a nivel mundial. Son miles las mujeres y hombres que han denunciado haber sufrido un caso de agresión sexual en algún punto de sus vidas, tal es el caso de María Trusa, una mujer que fue víctima de abuso sexual infantil.
María Trusa es una mujer nacida en la República Dominicana, lugar en el que vivió sus primeros años junto a su familia. Su historia de superación inicia con una terrible experiencia de abuso sexual que sufrió a manos de un amigo de su padre, cuando tenía apenas 9 años de edad.
Este evento marcó por completo su infancia y durante mucho tiempo tuvo que vivir con el dolor y el sufrimiento que esta experiencia le causó desde muy temprana edad. Sin embargo, hubo un punto de su vida en el que decidió que este hecho no tenía que convertirse en un impedimento para lograr sus metas.
Fue así como empezó un proceso de sanación personal, en el que logró encontrar todo tipo de herramientas que le ayudaron a superar su trauma y trabajar en su crecimiento profesional, hasta convertirse en la exitosa empresaria que es hoy en día.
La experiencia que por años opacó su vida
La historia de abuso de María Trusa es una de las más impactantes entre las miles de experiencias de este tipo que día a día salen a la luz. Ella tenía solo 9 años cuando este hecho ocurrió.
Un hombre que en el pueblo en donde vivía María Trusa era conocido como “El Brujo”, y que además era amigo de su padre, fue el responsable de este terrible acto que le arrebató a Maria su inocencia, y que le afectó emocionalmente durante muchos años.
Dentro de su testimonio, María recuerda cada detalle de aquella fatídica noche y cuenta cómo este hombre, aprovechándose de su posición dominante sobre ella, le dio de beber varios tragos de alcohol para luego abusarla sexualmente, destruyendo su infancia por completo.
El alcohol hizo que María perdiera el conocimiento en varias oportunidades durante esa noche, por lo que para ella es difícil explicar muy bien todo lo que ocurrió. Según sus propias palabras, todo se sentía como una pesadilla.
Esta terrible experiencia le dejó a María un sentimiento de dolor en su alma que por mucho tiempo la llevó a pensar que ya todo había acabado para ella.
Sin embargo, la realidad fue muy distinta. Algunos años después, logró encontrar las herramientas necesarias para transformar este oscuro momento de su infancia, en la fuerza y el impulso necesario para lograr sus metas y vivir una vida mucho más positiva y empoderada.
Un nuevo comienzo para María Trusa
Cuando tenía 15 años de edad, María se mudó a los Estados Unidos, lugar en el que reside actualmente, y allí inicia un proceso de crecimiento en el que decide preocuparse por su bienestar y trabajar en su vida profesional, hasta lograr el cumplimiento de cada una de sus metas.
En los Estados Unidos comienza sus estudios de inglés y se une al equipo de Scarsdale Medical Group, en donde gracias a su profesionalismo fue ascendiendo poco a poco, hasta el año 2008 en que llegó a convertirse en la directora ejecutiva del centro médico.
Su vida comenzaba a tomar la forma que ella buscaba, en la que pudiera contar con una estabilidad económica, profesional y espiritual, que la ayudara a vivir en armonía con ella misma y sus familiares más cercanos.
Pero la historia no termina allí. Desde muy joven María Trusa ha mostrado un peculiar interés en ayudar al prójimo, poniendo especial atención en las familias más vulnerables de la comunidad latina en la ciudad de New York.
Siguiendo este principio que la ha caracterizado en toda su labor profesional, en el año 2015 abandona su antiguo empleo en el Scarsdale Medical Group, para unirse a Gina Capelli en el Formé Medical Center, transformando este centro médico en un lugar cuyo objetivo principal es ayudar a los inmigrantes más necesitados de la comunidad latina en New York.
Hoy en día, María Trusa y su socia continúan la labor de brindar todo tipo de atención médica a la comunidad latina más desamparada, a través del Formé Medical Center, en donde incluso brindan atención a personas indocumentadas.
Yo Digo No Más, un libro que se convirtió en un movimiento
En el año 2020 María inicia con un nuevo proyecto que se mantiene vinculado a su labor de ayudar al prójimo: la escritura de su libro Yo Digo No Más.
A través de esta obra, María comparte detalladamente su testimonio de abuso sexual infantil, no solo con el objetivo de animar a las víctimas de este tipo de agresión a hacer públicos sus casos, pero también para demostrar cómo es posible superar un trama de esta magnitud, y alcanzar el éxito que todos buscamos en la vida.
Se trata de una crónica de su vida en la que narra los momentos más difíciles que le ha tocado enfrentar, explicando cómo cada una de estas experiencias la llevaron a iniciar un proceso de sanación mental y espiritual, el cual la ayudó a convertirse en la mujer emprendedora y exitosa que es hoy en día.
Pero no solo se trata de una historia biográfica. El libro Yo Digo No Más se muestra como una guía esencial que le servirá de ejemplo a todas aquellas personas que han sufrido de abuso sexual, o alguna otra experiencia negativa, para transformar todo este dolor en el motor necesario para salir adelante y tomar las riendas de su vida.
Tras el éxito del libro, y al ver la cantidad de casos que día a día se hacen públicos en el mundo en lo que ella llama “la pandemia silenciosa del abuso sexual”, inicia también el movimiento social Yo Digo No Más, con el que brinda una plataforma en la que todas las víctimas de abuso sexual puedan compartir sus testimonios para ayudar a otros, y así contribuir con la prevención del abuso sexual infantil.
La historia de María Trusa es todo un ejemplo de superación personal, cuya enseñanza es clara: No importa qué tan fuertes y difíciles pueden ser algunos momentos en la vida, siempre podemos encontrar un impulso que nos recuerde lo importante de sanar nuestras heridas emocionales, y nos anime a trabajar en nuestro futuro para alcanzar nuestras metas.