Una vez más se repite la historia, miles y miles de
ilusiones, la llama de la esperanza de todo un país, y la consecuencia la
misma, eliminación, que para algunos podría considerarse un fracaso pero para
otros, algo más, que reflexión.
El Mundial Sub 20, sin lugar a dudas, deja grandes aspectos importantes, como lo son:
Un gran equipo de jugadores con excelente trayectoria, que tienen todo el potencial y el buen fútbol para empezar un buen proceso en la selección de mayores.
La cultura FIFA en los estadios es la mayor herencia que nos puede dejar el mundial, familias unidas en el estadio, desde el mas pequeño hasta el adulto mayor, no hay barras bravas, hay un comportamiento ejemplar, el respeto por la silletería, la alegría y la expresión artística mostrada por los colombianos y la seguridad fuera y dentro del estadio; todo esto es lo que vale la pena conservar con orgullo y cultura.
Es hora de un revolcón en la Federación Colombiana de Fútbol, es el momento de elegir un gran proceso a largo plazo a partir de una buena elección en el cuerpo técnico de todas las selecciones.
Los jugadores con los que hoy cuenta la selección de Colombia, son de grandes capacidades técnicas y tácticas, no es posible dejar pasar esta gran generación con la que contamos, por eso es urgente pensar en un proceso a largo plazo en todas las generaciones de la selección nacional.
Un comentario adicional: Alguien que me diga que hizo James Rodríguez en el partido contra México, porque lo único que vi fue pésimos pases, malos cobros de tiros de esquina y de fuera de área, mala recuperación de pelota en el medio campo; valdría la pena preguntarnos si es que los medios están hablando mas de la cuenta de él o éste ya se montó en el pedestal y cree que es una figura acabada porque la verdad no es tan figura como parece, sin embargo merito especial a Muriel, Bonilla y Ortega, que a pesar de los errores que cometieron, desplegaron buen futbol y sobresalieron ante los demás.
Reconocimiento especial al gobierno, los patrocinadores y los hinchas del buen fútbol que acompañaron e hicieron posible la realización del evento más importante en la historia de Colombia, lastima organizar la fiesta para que sea otro el que la disfrute.
1. Aplausos a todos los colombianos que
fueron a los estadios e hicieron posible que éste mundial fuera el de mayor
asistencia en la historia.
La eliminación deja claro que Colombia no va a poder ser capaz de ganar un mundial en toda su historia, dejémonos de utopías y de sueños, Colombia es un país que se ha constituido como actor de reparto en el mundo, porque no fuimos llamados a protagonizar grandes avances y proyecciones en esfera global porque no dejaremos de ser el mismo país subdesarrollado en el que confluyen la violencia, la corrupción (politiquería), la mafia y una pésima gobernabilidad a través de la historia ( Pero tengo la esperanza de que esto acabe), a pesar de tenerlo todo para ser algo mejor y proyectar mejores cosas a un mundo que requiere mas dosis de esperanza y menos visos de utopías, o acaso hay otro país en el mundo en el que confluyan calidad humana, recursos naturales y un gran condimento de alegría?
La invitación, por tanto, es a reflexionar y a estar aterrizados para ser conscientes de lo que somos y lo que hemos hecho, porque una vez mas el mundial demostró lo que es Colombia: alegría, ilusiones – esperanzas desmedidas, unión cuando nos conviene y un solo individuo liderando y llevando por la borda los sueños de un país, esta vez le tocó a Eduardo Lara, hacer naufragar este barco que ancló de la peor forma.
¿ESTAREMOS PREPARADOS RUMBO AL 2026 PARA ORGANIZAR Y REALIZAR EL MUNDIAL
DE MAYORES?
«La ilusión vale cuando la
realidad la toma de la mano porque la única verdad es la realidad»