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El hotel W de Bogotá acaba de ser reconocido por Conde Nast, Reader’s Choice Awards, como el mejor hotel de Sudamérica. Me aventuré a alojarme allí para comprobarlo.

El hotel W, ubicado en el corazón de Usaquén y parte de la cadena Marriott, hace pocos días se posicionó como el mejor hotel de Suramérica en los prestigiosos premios de la publicación Conde Nast, Reader’s Choice Awards. Además, fue reconocido entre los mejores hoteles del mundo, en la posición #17. ¿Es cierta tanta maravilla?

El plan que elegí para comprobar por mí misma si de verdad se merecía tal reconocimiento, se llama Stellar Staycation. Incluye una noche para dos personas en habitación Wonderful, enriquecida con una serie de experiencias poco usuales.

Aquí le cuento mi experiencia.

Su originalidad, punto a favor

El plan que viví en el hotel ofrece una experiencia distinta al típico paquete romántico de la mayoría de hoteles. No tiene una cama decorada con pétalos de rosas, pero sí una experiencia que le lleva un reproductor de vinilos a la habitación para disfrutar en pareja de una noche de rock and roll. Le entregan un “menú de vinilos” que va desde Johnny Cash hasta AC/DC y una buena oferta de cocktails para sentirse en un bar de rock dentro de su propia habitación.

Además de eso, el plan Stellar Staycation incluye la posibilidad de disfrutar de una película en una sala de cine privada con pantalla grande y palomitas de maíz. Yo pedí ver la clásica Almost Famous con palomitas dulces.

Aproveché y agendé también una sesión de fotos con un fotógrafo en las instalaciones del hotel, pues es una experiencia que está incluida en el plan y sirve para llevarse varios recuerdos.

El paquete tiene también cata de vinos en una de las elegantes salas de juntas del hotel, para degustar copas de tintos y blancos a través de la charla de un aficionado de la viticultura.

¿Queda duda de lo osados que son en Hotel W para proponer planes distintos?

Espacios eclécticos para todos los gustos

El hotel W ofrece una experiencia exquisita en su restaurante, complementada por la elegancia de su bar W Lounge. Además, el alojamiento incluye desayuno buffet, aunque si definitivamente no quiere salir de la habitación, siempre puede pedir la carta de room service.

Las habitaciones son confortables y uno no quiere ni salir de ellas, pero una escapada obligada debería serlo al Away Spa, que cuenta con estaciones de manicure y pedicure, salas de masajes para parejas y más.

Todos estos tratamientos tienen un costo adicional, pero incluida con mi estadía sí estaba la posibilidad de disfrutar de la piscina de hidroterapia, la cual está inspirada en las Catedral de Sal de Zipaquirá y su decoración guarda alegorías a este mundo subterráneo.

De hecho, todas las instalaciones del Hotel W buscan hacer un homenaje a la cultura colombiana, por eso, en varios de sus espacios hay una alusión clara a la Leyenda de El Dorado, como la balsa de oro en el lobby o la lluvia dorada alrededor de las mesas del bar.

Su atención, incluso mejor que todo lo demás

Durante los dos días de mi estadía, absolutamente todos los colaboradores del hotel se encargaron de hacerme sentir especial.

Gracias a que el Hotel W es pet friendly, me alojé con mi mascota y nos sentimos comodísimos. En la sala de cine le dieron snacks y agua; y durante la sesión de fotos nos permitieron posar con él. La habitación tenía platos para su comida, una cama y hasta elementos de aseo.

Sin duda alguna, el Hotel W no solamente fue reconocido como el mejor hotel de Sudamérica gracias a sus servicios y lo novedoso de sus planes (las experiencias que brinda este paquete Stellar Staycation es algo que jamás había visto en ningún hotel del mundo), sino también gracias a su atención al cliente.

Es verdad que sus instalaciones son espectaculares (de las mejores entre los hoteles de Bogotá), sus espacios son amplios y confortables, y sus servicios son muy originales, pero nada se compara con lo bien capacitados que están sus colaboradores.

Mi conclusión

A lo largo de estos 8 años recorriendo el mundo y registrando mis experiencias en redes sociales y blogs, pocas veces me he sentido tan bien atendida como en el Hotel W.

Brinda una experiencia audaz, con planes que pocos representantes turísticos se atreven a ofrecer. Está ubicado en una de las mejores zonas de Bogotá, así que si usted no vive en la capital es una oportunidad única para disfrutar de Usaquén.

Y no olvidemos que los premios Conde Nast, Reader’s Choice Awards los entrega el público a través de votaciones. Es la voz de los huéspedes la que ha acreditado al Hotel W como el mejor de Sudamérica y el #17 en el mundo.

Así que, si quiere celebrar una ocasión especial y sentirse bienvenido en cada espacio y momento, aproveche que el mejor hotel de Sudamérica está en Bogotá y péguese una escapada.