Para ver la galería completa, haga clic en la imagen. Foto realizada por: Juan Carlos Martínez Castro / El Tiempo

Las oficinas de Google siempre han causado admiración por su originalidad, futurismo y colorido; algo muy necesario para el ejercicio creativo. Muchas agencias de mercadeo y publicidad las han querido imitar de algún modo sin lograrlo, ya que, más que un estilo, hacen parte de toda una cultura empresarial que va más allá de unas simples locaciones.

Tener espacios de relajación como un spa, un gimnasio, una mesa de ping-pong y un salón de videojuegos es algo impensable para muchas empresas. Mucho más si le añadimos un restaurante tipo buffet con variedad de comidas y bebidas así como una barra de café tipo exportación y una terraza con helados disponibles para disfrutar a cualquier hora del día.

Pero si comparamos el nivel de bienestar y de satisfacción de un colaborador de Google y tenemos en cuenta su productividad y creatividad versus las utilidades de la compañía, entenderemos que más que un gasto, es una inversión que todas las organizaciones deberían pensar implementar.

Tal vez lo que más diferencia a Google es la dignidad con la que trata a sus colaboradores, es toda una cadena de valor que contribuye en gran medida a su crecimiento personal y profesional. A lo que se suman beneficios sencillos pero tan importantes como la alimentación diaria, sistema de transporte, un agradable ambiente laboral y excelentes salarios. Algo que motivaría a cualquier persona a dar lo mejor de sí.

Aunque en New York y Mountain View hay verdaderos complejos informáticos adecuados para la creatividad y los negocios digitales, la sede de Bogotá D.C. no es la excepción. Esta importante metrópoli fue elegida por Google debido a su alta competitividad, crecimiento económico y capacidad de innovación. Asimismo, por su robustez en el sector de las telecomunicaciones y por ser la sede de numerosas compañías de tecnología.

Dentro de la decoración se encuentran distintas curiosidades como un logo gigante hecho de material reciclable que se mezcla con los materiales ecológicos del mobiliario, así como otro de gran tamaño construido con botellas plásticas que llenan de luz y color el espacio interno. Sin embargo, el confort, el estilo y la clase bogotana es evidente, algo que le causará gran impresión a quien visita estas magníficas instalaciones.

Más recientemente, se han decorado algunos espacios con elementos simbólicos como un logo gigante hecho con monedas de 100 pesos que aportaron todos los colaboradores de la compañía para hacer alusión a la leyenda de El Dorado. También se incorporó una mesa de billar y se instaló una guardería para niños. Igualmente, a las nuevas salas de reuniones se les han puesto nombres de localidades bogotanas como Usaquén y Chapinero. Otra característica son elementos como cojines, tapices, cuadros y hasta sombrillas que están impregnadas de múltiples colores.

Para aportar a la ecología, esta sede cuenta con certificación Leed (acrónimo de Leadership in Energy & Environmental Design), un sistema de certificación de edificios sostenibles desarrollado por el Consejo de la Construcción Verde de Estados Unidos. Asimismo, hay un tanque recolector de aguas lluvias que reutilizan en los baños, luces ahorradoras de energía y un sistema de ventilación natural diferente al aire acondicionado. En el estacionamiento hay bicicletas para realizar trayectos cortos y evitar así el uso innecesario de automóviles.

En el año 2011 Google abrió oficialmente sus oficinas en Bogotá (aún cuando ya tenía presencia a través de un scout desde el 2007). Hasta el momento ha tenido tres sedes siendo esta la más reciente. En la actualidad, la compañía tiene como principal función fomentar el negocio de la publicidad digital y promover la industria del internet. Con esta sede, Bogotá D.C. consolida su liderazgo en el sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones tanto a nivel nacional como internacional.