El post pasado sobre el cansancio resonó sobre todo entre muchas mujeres. Al parecer el cansancio no está en nuestra cabeza, no es algo que debamos superar con actitud estoica y ya; es real y nos afecta diariamente. No es fácil vivir la vida moderna y su frenética velocidad si tu cuerpo está cansado. Hoy quiero dar una recomendación puntual a todas las personas que tengan alguna condición autoinmune. Este tipo de condiciones están al alza y las mujeres son un blanco más frecuente que los hombres. Por ejemplo, en el caso de la versión autoinmune del hipo tiroidismo, de Hashimoto, las mujeres tienen de 5 a 8 veces más posibilidades de desarrollarla.
No doy consejos de dieta muy a la ligera, sobretodo cuando se trata de eliminar algo. Sin embargo, varias fuentes confiables confirman que ante el amplio espectro de condiciones autoinmunes – desde Hashimoto, lupus o vitíligo – lo mejor es cortar con el gluten. Médicas como Amy Myers han sido pioneras en este tipo de investigaciones. No solo por haberlo vivido en carne propia, sino también al poder confirmarlo con cientos de sus pacientes; mujeres que padecen la pesadilla de una condición autoinmune mal manejada. El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, la cebaba y el centeno. Como aditivo también lo encuentras en innumerables productos, como vinagretas, salsa soya, vitaminas y colorantes. También puede estar en alimentos como la avena cuando hay contaminación cruzada. Como te darás cuenta, es ubicuo. El gluten es una proteína que tiene la particularidad de darle al pan su característica suavidad. Adoramos el pan, en parte, gracias al gluten.
El problema es que esta proteína, formada por los péptidos gliadinas y glutenina, activa procesos en el sistema inmune que pueden terminar en el cuerpo atacándose a él mismo. Siempre hemos comido pan, eso es cierto. Pero el pan de hoy no es el pan de antes. Adicionalmente, nuestra capacidad para digerir proteínas complejas como el gluten, no es la misma. Nuestra maravillosa pared intestinal está en contacto con más toxinas que antes, y su capacidad para defendernos a disminuido. Pocas personas son diagnosticadas con la condición celiaca, pero también sabemos que hay un amplísimo espectro en donde las personas reaccionan al gluten y se beneficiarían al eliminarlo de sus dietas. La mayoría de estas personas, según investigaciones, nunca serán diagnosticadas con intolerancia al gluten. Por eso el consejo es sencillo: si tienes una enfermedad autoinmune y sus síntomas interfieren con tu vida, elimina totalmente el gluten por al menos un mes. Este cambio sencillo puede ayudarte mucho en tus molestos síntomas. Ojo: muchos productos gluten-free están llenos de aditivos y azúcar. Mira cómo te sientes y después tú decides si esta proteína tiene un lugar en tu dieta.
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