Me toca unirme en esta ocasión a quienes consideran que las casualidades no existen y es así como mirando el lapso del receso legislativo encontramos que el 20 de junio de 2023, día de su inicio, por el dólar se pagaban $4.145,72 y el 20 de julio, que reinició labores, por el dólar pagamos $3.980,20, fortaleciéndose el peso, al tener que pagar $205.52 menos por cada dólar y si siguiera bajando estaría llegando a los $3,905.05, en que estaba el 19 de junio de 2022, día que recibimos la noticia de quienes iban a gobernarnos desde el ejecutivo por estos 4 años.

El país durante este receso la verdad sintió un poco de tranquilidad, la que da el saber que durante ese periodo no nos iban a subir los impuestos y que de las reformas que estudiaban una quedó archivada y otras en cuidados intensivos, afortunadamente, la de la salud entre esas. Esa tranquilidad, no solo en cuanto al dólar, sino descanso de un congreso que cada día nos asalta con malas noticias, que a veces lo percibimos como nuestro enemigo y que por lo que parecería indicar ese sosiego se transmitió a la tasa cambiaria, a través de los inversionistas y todos los actores en la compra y venta de dólares por nuestro peso.

Que tiene una cosa que ver con la otra, dirán algunos, pero la incertidumbre indiscutiblemente afecta el valor del peso y su intercambio con monedas extranjeras, en especial su referente internacional, el dólar, pero también el euro. Como las reformas propuestas inciden tanto en el presupuesto nacional, en especial si ocasionan su evidente insuficiencia a futuro, el hecho que no se esté hablando de ellas durante el mes le da tranquilidad a los colombianos, aún más si las probabilidades de su archivo son cada vez mayores.

Aunque las más afínes al sector financiero pueden ser la de pensiones y la laboral, la de salud afecta a todos y demandaría innecesariamente un gasto presupuestal tan grande como absurdo, por el cambiar por cambiar, con una posible estatización y con muchas dudas a futuro, ya que ningún presupuesto aguantaría desechar lo que se tiene y funciona, aunque lo debe hacer mejor, para supuestamente construir nuevas CAP, y con la fantasía de cubrir todo el territorio nacional cuando en 30 años no se ha logrado hacerlo con las EPS y centros de salud, ni ningún centro de atención del gobierno en esas áreas, como lo exige la ley existente. ¿Que puede crear más incertidumbre que poner en peligro la salud de los colombianos?

Parte de esta tranquilidad la da el hecho que al ir al receso en el congreso se había dado un rompimiento de la coalición, al sentir que a su regreso el congreso se fortalecía como contrapeso y así hay cada vez más esperanzas que estas reformas no van a pasar a pupitrazo limpio, que al no estar todos amangualados se va a evitar que pueda pasar cualquier cosa. En ese contrapeso y nueva capacidad de debatir, ante el desguace de la aplanadora, se tuvo la esperanza también que en la nueva disposición de las mesas directivas se eligieran personas menos extremistas y producto del consenso de más partidos, lo cual garantizaría precisamente mayor debate y oportunidades a todos los partidos de presentar sus ideas y rechazar tantas falsas proyecciones y pretendidos resultados, que no se ve, en los artículos y parágrafos, de donde puedan salir y por lo contrario si se ve el daño que pueden causar los existentes, que querían pasar de afán para evitar mucho análisis.

Los entendidos, dicen que por bueno que parezca que el dólar haya bajado de $4000, en la realidad, sin el ingrediente de incertidumbre de la política nacional, debería estar por los $3500, vamos a ver como se desempeña en este mes de julio e inicios de agosto. Lo cual parece estar confirmado por el hecho que en varias partes del mundo la tendencia del dólar ha sido al alza, mientras aquí estaba tan inflado que esa tendencia no afectó el fortalecimiento del peso al bajar la incertidumbre en este lapso. Ese ingrediente de incertidumbre sin ninguna duda se disminuye con la muestra de responsabilidad e independencia de los tres poderes de la nación, en la medida que ejerza cada uno su especial poder con un sentido de interés nacional, más que partidista.

Esta baja  del dolar, es de esperarse que continue de lograrse el archivo definitivo de la reforma a la salud, creo que sería una buena señal de tranquilidad para todos, todos nos enfermamos y a todos se nos enferman seres queridos, además entre más rápido se archive más tiempo le quedará al congreso para tantas cosas que hay que hacer en el país, según  la hora y cuarenta y cinco minutos de alocución en la posesión del Congreso ayer, este se tendría que dedicar a marchas forzadas para hacer solo una parte de ellas Que sentido tienen dedicar tanto tiempo a cambiar lo bueno que se tiene y funciona, por lo menos desde el punto de la ley, estando todos de acuerdo que hay muchas correcciones que se deben hacer pero en su ejecución, cuando hay tantos temas en los que si hay que legislar para crear o implementar medidas tendientes a tener un mejor país.

Si cada vez que se van a hacer leyes se reforma lo mismo, estaremos en el mismo circulo vicioso en que nunca hay tiempo para renovar lo que nos avance como nación y hacia el desarrollo. Se cree que darle grandes presupuestos a la educación nos va a sacar de este subdesarrollo, pero se queda en eso, en dar presupuesto pero la educación no avanza, mientras siempre se olvida o posterga la ciencia, la tecnología, la innovación, los proyectos reales, los incentivos a la producción y no a la holgazanería. Si dicen que se quieren cambios a tecnologías limpias, con retorica no se va a lograr, eso requiere investigación, desarrollo, transferencia acelerada de tecnología, no seguir botando el presupuesto en el bolsillo roto o mal dirigido de la educación, la que teniendo siempre el presupuesto más alto de todos los tiempos en cada gobierno, sigue estando en los últimos lugares de pruebas de estado y otros indicadores bien desalentadores.

Si fue casualidad o no, si el Peso se fortaleció o no por ese receso, o fue por otras causas, lo veremos en estos días en que se retoma su trabajo, sus debates y ver la nueva orientación y nuevos caminos que toma el congreso con sus nuevas directivas, en que dicho sea de paso hemos llegado a la situación en que nombres tradicionales en política al llegar siembran un poco de tranquilidad y esperanza al sentir el alivio de que algunos nombres ubicados en los extremos hubieran podido llegar a esas altas dignidades, esperemos que no sean caballos de troya, que cumplan con las expectativas, sobre todo, con sus mismos anuncios de permitir el debate amplio y sustentado de todos los congresistas y ojalá de muchos entendidos en cada materia en el país.

Empezamos hoy a mirar la reacción ante los cambios, todos los que han sucedido en esta semana de la independencia y si esa visión de un poco de mas tranquilidad y esperanza de verdad se mantiene, si se materializan los anuncios de un mayor debate, de una posición más conciliadora e incluyente, con respecto a la que quienes predican la inclusión en la practica hacían lo contrario, a la hora de querer aprobar en el menor tiempo temas de la más grave importancia para el pueblo soberano, cuya soberanía y poder parece perder una vez da su voto, ya que muy poco se oye su clamor cada vez más fuerte y claro con voz y pancartas, en manifestaciones multitudinarias como la del pasado 19 de julio y otras que aumentan cada día por temas puntuales como el aumento desproporcionado de precios de la gasolina y de los alimentos.