Este primer blog tiene una connotación especial. Con esta publicación doy la bienvenida a un espacio quincenal para exponer reflexiones, proyectos e historias que deben ser tratadas en voz alta, a través de entrevistas en formato podcast.

El primer tema es una de las sombrillas del camino en este blog. Hablamos de Colombia desde el talento que hay en los territorios y de los espacios de representación desde los que comúnmente se acuña la expresión de “orgullo patrio”.

Yara Mosquera es la primera invitada y la interlocutora de este podcast. Ella es modelo, nacida en el departamento del Chocó en el Pacífico colombiano. Sus sueños y talento que la acompaña la llevaron hoy a vivir en México, donde trabaja y proyecta su carrera a pasos agigantados.

Escucha el podcast completo aquí:

El caso de Yara es el de muchas personas que a falta de oportunidades en su territorio saltan, no a las grandes ciudades sino fuera del país, donde son reconocidos e incluso aclamados.

Su talento y belleza son evidentes. Es una persona con decisión y atribuye su presente a las ganas de superarse cada vez más. Explica que haber nacido en un municipio como Tadó, cuya principal fuente de economía es la minería, en una región históricamente olvidada, la llevaron a tener un enfoque claro: trabajar por construir un mejor futuro, con condiciones de vida digna para ella y su mamá, el motor que la impulsa cada mañana.

¿Cuántos jóvenes hay como Yara en Colombia? ¿Cuántos más han desarrollado valentía y persistencia como instinto de mera supervivencia? ¿Cuántos más han salido del país y cuando “la logran” se convierten en orgullo nacional?

Una fórmula con muchos elementos

Pensar en la clave del éxito de un país, sobre todo de un país con tantos matices como Colombia, es una apuesta de muy largo plazo, incluso, de más de 213 años, además, tampoco es el tema que ocupa esta tribuna. Sin embargo, es más que interesante acercarse a las mociones bajo las que se define el “éxito” y las acciones que emprende un país para ser categorizado como una nación exitosa.

Para estas definiciones existen cientos de rankings e indicadores, regionales y globales. Sin embargo, centrémonos en el éxito desde el talento.

Día a día las regiones de Colombia, desde La Guajira, al norte del país, hasta las espesas selvas amazónicas, aún en situaciones difíciles, casi precarias, son incubadoras de talento de exportación, en las diferentes disciplinas: deporte, arte, ciencia y tecnología, emprendimiento, entre otras.
Basta con revisar las historias de otras personas aguerridas que han ocupado la agenda mediática en el mundo en los últimos meses: el caso de los jóvenes de la Escuela de Robótica del Chocó que le ganaron a China o la vallecaucana Linda Caicedo, nominada al Balón de Oro.

Ojalá el país vuelva sus ojos con más frecuencia a las regiones, ojalá tengamos el olfato para reconocer y apoyar los talentos antes de que se vayan del país, y si se van, ojalá los aplaudamos con orgullo.